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No ve a Louis desde hace casi una semana.

Dejó de ir a la cafetería para evitar cruzarse con el todos los días. Sus amigos insisten en que valla porque según ellos "le debe una explicación a Louis" ya que "el no se merece esto".

Y si, tienen razón y Harry lo sabe.

Pero no tiene idea de como hacerlo.

No sabe como se supone que debe darle explicaciones, no sabe ni siquiera que se supone que tiene que decir o hacer, así que simplemente está evitando cualquier tipo de contacto con el para posponer esa conversación lo mas posible.

Sus amigos se encargan de informarlo sobre todo lo que pasa con relación a el, así que no es como si no supiera nada sobre Louis. Y la verdad es que lo agradece porque no sabe que haría si no supiera absolutamente nada de el.

Está enterado de que Louis no ha dejado de ir a la cafetería en ningun momento. Que de hecho, ha estado yendo mas que nunca. Sus amigos están seguros de que es para tener mas posibilidades de verlo.

Louis empezó a ir por las tardes y todos los días pregunta por el, saber eso le rompió un poco el corazon, se siente muy culpable por lo que está haciendo, pero se intenta autoconvencer de que es lo correcto. De que es lo que el puede hacer y si es así, entonces está bien.

Pero en el fondo sabe que no es así. En el fondo tiene muy claro que sus sentimientos por Louis aún van mas allá de la amistad, sabe que se está comportando como un estúpido adolescente cuando se pelea por cualquier cosa con su pareja y desaparece, aunque lo suyo no haya sido una pelea. Y en el fondo, muy en el fondo, tiene claro que lo que está haciendo está mal, por lo que se repite a sí mismo que en algún momento aclarará las cosas con el. En algún momento, mas adelante.

Eva también notó que su padre está decaído y triste últimamente. Ya no tiene esa energía que tenía antes, y que haya dejado de ir a la cafetería la tomó por sorpresa porque, ella siempre había querido estar con su padre todo el dia y se quejaba cada vez que se tenía que despedir de el porque debía trabajar, pero también sabe que su padre ama trabajar, sabe que ama su trabajo, y que de un día para el otro lo haya dejado era extraño.

- ¿Irás al trabajo hoy, papi? - preguntó Eva al segundo día de que su padre había dejado de ir.

- No, amor - respondió Harry - Me tomaré un descanso, solo un tiempo.

La menor se emocionó al escuchar aquellas palabras. Pensó que era algo bueno, que se pasaría los días enteros junto a su padre, pero no tenía idea de que terminaría como lo está ahora.

Asi que, cansada de ver a su padre sin su habitual sonrisa de hoyuelos, decide que lo irá a animar.

- ¡Papi, papi, papi! - llama la pequeña dando saltitos hasta llegar a la habitación de su papá y subirse a la cama junto a el.

- ¿Que pasa, princesa? - pregunta con una pequeña sonrisa que se podría describir como triste o cansada. La niña se sienta alado del mayor dispuesta a animarlo.

- Tengo una idea para levantarte el ánimo - comienza a decir. Harry está por interrumpirla para aclarar que el está bien y que tiene un buen ánimo, como su hija decía, pero sabe que estaría mintiendo, así que se limita a acomodarse mejor en la cama y prestarle atención a su hija - cocinaremos galletas con chispas de chocolate, nuestras favoritas - dice eso último en un susurro sacando una pequeña risita del mayor - y haremos una maratón de pelis de disney o de marvel, como a ti te guste.

Harry no puede evitar sonreir con ternura al ver que su hija no solo se dio cuenta de que no está en su mejor momento, sino que se propuso "levantarle el ánimo" tal como había dicho.

The boy with the blue eyes || Larry StylinsonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora