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EN MEDIO del bosque, dos estudiantes de Clase-D, 𝐊𝐮𝐫𝐞𝐧𝐚𝐢 𝐓/𝐍 y Koenji Rokusuke, estaban en ese momento saltando entre los árboles con la ayuda de las ramas a un ritmo bastante rápido.
"𝐊𝐮𝐫𝐞𝐧𝐚𝐢-boy, parece que cabeza calva y su clase están apuntando a la cueva como su lugar. ¿Deberíamos capturarla antes que ellos o dejarla en paz?"
A pesar de que Koenji todavía tenía su sonrisa habitual en su rostro, esta vez había un aire diferente a su alrededor. Era un rostro lleno de confianza y certeza, como si estuviera diciendo "Terminemos con esto lo más rápido posible".
"No... No la tomaremos. La cueva, a pesar de que es un lugar bastante protegido, tiene una sola salida, a diferencia de los otros lugares. Así que no tendríamos ningún uso para eso. Además, debemos mantener al menos un lugar libre para las otras clases, de lo contrario, mi plan no funcionaría tan bien".
'Eso es sólo una miserable excusa de mi parte. La cueva habría sido un lugar maravilloso como nuestro campamento base, pero el problema es que está bastante aislada de los otros lugares... Por lo tanto, sería más agotador registrar los lugares tres veces al día durante toda una semana'.
Cuando la Clase-A pronto entró en la cueva en grupos, los ojos de 𝐓/𝐍 se encontraron con los de Hashimoto, quien solo le dio un pequeño asentimiento y una sonrisa tratando de transmitir el mensaje "Déjame esto a mí".
Con eso, ambos estudiantes de Clase-D cambiaron sus objetivos y capturaron al resto de los tres de los lugares antes de que las otras clases lograran tenerlo en sus manos.
Habiendo terminado con su trabajo, Koenji se cepilló el cabello con los dedos antes de recoger dos plátanos del árbol junto a ellos. Le tiró uno de los plátanos al líder de la Clase-D con una sonrisa, quien lo aceptó con gratitud.
"Buen trabajo Koenji. Pero tenemos que seguir este método todos los días durante los próximos seis días, tres veces al día. ¿Estás listo para eso?"
"Mi, mi niño 𝐓/𝐍, no debes subestimar el calibre de una existencia perfecta como la mía. Hacer este pequeño trabajo es tan fácil como cargar a esas dos hermosas damas sobre mis hombros y flexionar mi cuerpo divino frente a ellas Jajajajaja".
'Pobres Matsushita y Satou... o afortunadas de ellas... no sé cuál y me abstengo de pensar más en eso'.
Con eso, Koenji comenzó a reírse ruidosamente para sí mismo, ya que todo lo que 𝐓/𝐍 pudo hacer fue soltar un pequeño suspiro para sí mismo.
"Entonces, vayamos a nuestros campamentos... Esperemos que a los demás les vaya bien".
