capitulo 24

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La escena frente a los ojos de Minho, de alguna forma hicieron que todas sus esperanzas se cayeran. Aquel hombre alto, de nombre Sung-chan y su ex esposo, besándose. Claro que eso no era ni la quinta parte de lo que seguro Seungmin sufrió al verlo en la cama con otra y claro que en ese momento las circunstancias eran otras, ya no eran nada.

Minho tosió un poco incomodo y la pequeña pelinegra se aferró a la mano de su padre.

—Jisoo ¿Dónde te metiste? —Seungmin corrió hacia su pequeña y la abrazó fuertemente— No vuelva a huir así, no sabes lo preocupado que estaba.

—Perdón papi —dijo la pequeña limpiando las lágrimas que caían por sus mejillas— Pero no tienes porque llorar, ya tengo a mi otro papi que me va a proteger siempre.

La mirada del pelinegro se dirigió a Minho, quien seguía en silencio viendo la escena.

—Me alegra que estes b-

—¿Tú que haces aquí? ¿Cuándo te vas a ir?

—Jisoo, no empieces por favor —Seungmin la regañó y la pequeña regresó al lado de Minho, tomando su mano nuevamente.

—No te preocupes amor, es pequeña y creo que es momento de decirle la verdad.

—¿Verdad? —esta vez fue Minho quien habló.

—No nos hemos presentado formalmente —dijo el peligris estirando su mano— Soy Kim Sung-chan, el prometido de Seungmin.

—Mucho gusto, soy Lee Minho.

Ambos hombres se dieron las manos, ante el recelo del peligris, quien lo veía de una forma algo inusual. Por otro lado el menor se quedó en silencio al ver como el ambiente se transformaba a uno incómodo.

Lo único que quería hacer era desaparecer con su hija.

—Felicidades supongo, por su futuro matrimonio.

Dijo Minho luego de varios segundos.

—¿M-matrimonio? —Jisoo habló mirando a todos los adultos presentes.

—Hija escuch-

—¡Me prometiste que no te ibas a casar con él!

—Jisoo por favor, habl-

—¡No! ¡Eres un mentiroso! —las lágrimas no se hicieron y Minho no pudo evitar tomarla en brazos.

La menor se aferró al cuello de su padre y comenzó a llorar sobre su cuello y ninguno de los adultos presentes supo como actuar. Seungmin quien era quien más la conocía tampoco supo que hacer en ese momento, ya que ella jamás había llorado de esa forma.

Minho acaricio su cabello en un intento de consolarla, lo cual fue en vano.

—Seungmin ¿Dónde queda su habitación? —preguntó en susurro al ver que su hija no dejaba de llorar.

—Arriba, es la segunda puerta de la derecha.

El pelinegro asintió y comenzó a caminar por la dirección que le había dicho el menor.

Poco a poco el llanto dejó de escucharse tan fuerte y Seungmin suspiró un poco más tranquilo, sin dejar de pensar en qué era lo que hacía que Jisoo llorara de esa forma. Si bien era consciente de que a su hija nunca le agradó Sung-chan, nunca logró entender el porque de su actuar con él.

Jung Sung-chan siempre se había portado de una forma muy dulce y amable con ella.

—Será mejor que te vayas, Sung.

—¿Estarás bien? No quiero dejarte solo con tu ex esposo y con Jisoo en esta situación.

—Soy un adulto, sabré manejarlo.

forget or love ✧ knowminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora