Enamorado de una mariposa (Tanjikana)

Capítulo 7: La invitación

Al siguiente día todo transcurrió con normalidad.

Misma rutina y ya todos en la escuela.
Como siempre cierto pelirrojo llegó antes y esperaba ansioso a la mariposa de ojos violetas.

Tanjiro:
—Hola Kanao—dijo sonriendo y animado.

Kanao:
—Hola Tanjiro—dijo con una sonrisa que hizo sonrojar a Tanjiro.

Tanjiro:
—A por cierto Kanao—busca en sus bolsillos.

Tanjiro:
—Quería darte algo, por favor cierra los ojos—

Kanao solo asiente y cierra los ojos.

En eso Kanao siente como algo rodea su cuello.

Tanjiro:
—Listo, abrelos—

Kanao abre los ojos y ve su cuello, vio un hermoso collar de mariposa color rosa.

Kanao:
—Gracias Tanjiro—decía con los ojos brillosos.

Tanjiro:
—Ayer cuando cerramos paso un amable señor vendiendo collares y cuando me los mostró ví ese y me acordé de ti, pensé que se te vería bien—dijo con una sonrisa.

Por alguna razón Kanao tuvo un impulso y abrazo a Tanjiro.

Tanjiro se sonrojo al instante.

Kanao al darse cuenta de lo que hizo lo soltó inmediatamente.

Kanao:
—Lo...lo si...lo siento Tanjiro—dijo apenada tapándose la cara.

En eso Tanjiro le devuelve el abrazo.

Kanao se sonroja por eso.

Tanjiro:
—Tranquila no me molesta en lo absoluto—dijo sonriendo.

Kanao:
—Tanjiro es muy calido—dijo en su mente.

Después de unos minutos la suelta y se sientan en su lugar porque el maestro no tardaba en llegar.

La clase paso con naturalidad, hasta que llegó la clase de Kanae.

Kanae se encontraba dando la clase como siempre pero Kanao estaba perdida en sus pensamientos.

Kanao:
—¿Por qué lo hice?—dijo en su mente dudosa de porque le dió el abrazo.

Todo siguió natural hasta que llegó la hora del receso.

Todos los amigos estaban comiendo hasta que Tanjiro propuso algo.

Tanjiro:
—Oigan ¿Qué al si mañana damos un paseo?—

Aoi:
—No es mala idea—

Senjuro:
—¿Pero a dónde iremos?—

Zenitsu:
—¿Qué tal el centro?, tiene muchas opciones—

Tanjiro:
—Me parece bien—

Todos se ponen de acuerdo y acuerdan salir mañana, pero primero tendrían que pedir permiso.

En cuanto termina el receso regresan al salón y esperar a Shinobu.

Mientras tanto en la sala de maestros:

Kanae:
—Vaya este día estuvo ocupado—

Muichiro:
—Bastante diría yo—

Tomioka:
—Estos chicos son bastante enérgicos—dijo mientras bebía café.

Rengoku:
—Nuestro deber es convertirlos en grandes personas—dijo también bebiendo café.

Mitsuri:
-¡Miren lo que traje!-pone en la mesa una caja de donas.