Soy un Cobarde en un Apocalipsis Zombi.

Soledad.

Con el paso del tiempo, el brazo de Santino mejoro. Pero no me perdonaron por haber huido, ni siquiera parecían querer hablar conmigo. Empeze a sentirme excluido del grupo, hasta el punto en el que pensé que tenía esquizofrenia.

"Acéptalo, toda esta soledad es tu culpa" pense yo.

Escuche que Santino ya estaba listo para cazar. En cuanto a mi, no parecían ni querer hablarme. Apenas si me invitaban para comer algo. Pero no mantenían charla conmigo, solo entre ellos.

Una noche, escuche a Luz y Melani hablar.

-¿Qué hacemos con Aaron?- pregunto Luz.

-No lo se, pero no podemos dejar que se quede- dijo Melani.

-Tampoco lo vamos a tirar a la calle.

-No, Luz, no somos así, pero es tan... difícil. El nos pone en riesgo... y ya está por convertirse en una amenaza.

-Pero, Melani, el estuvo con nosotros toda la secundaria.

-No fue el mejor compañero, así que eso me pone en duda.

-¿Cómo que no fue el mejor compañero?.

-El... el era un presumido. Su actitud era bastante cuestionable y siempre era cargoso.

-Dale, Melani. Tambien teníamos compañeros igual de cargosos, como Larrea y Martin.

-Si, pero Martín y Larrea no eran unos presumidos, como Aaron.

-Bueno... Larrea también era presumido, pero no TANTO.

-Como sea, ¿que vamos a hacer con Aaron?.

-No se, solo déjame pensar.

-Santino dice que esta muy de acuerdo con tirarlo a los zombis.

-DEJAME PENSAR.

Yo escuche la conversación y me puse muy nervioso. Trate de dormir, pero me pase como 1 hora pensando en lo que dijeron Melani y Luz. Sabía que muy seguramente me iban a matar. Tendría que haberme ido, pero ellos son la mayor protección que puedo tener.

Me levante. Ya era de día y Luz y Melani estaban afuera de la cabaña. Intente no prestarle atención a lo que dijeron ayer y salí de la cabaña para tomar algo de aire. Estaba muy nervioso, ya que sabía que lo más probable era que me echen de la cabaña y me dejen ser devorado por zombis.

Derrepente, sentí un rifle en mi nuca. Me voltee y vi que era Santino.

-¿Qué haces acá? Casi haces que te pege un tiro- dijo Santino.

Yo lo mire y le pregunte si iban a echarme.

-Van a echarme del grupo, ¿no?.

-Escucha, Aaron, tenemos que seguir vivos, y si queres estar vivo en un apocalipsis, tenes que tomar medidas extremas. Vos nos pones en riesgo, y no vamos a ignorar lo que hiciste esa noche.

Santino se fue. Yo me quedé pensando.

"Estoy muerto, estoy muerto" me quede pensando.

Me puse tan nervioso, que me puse a llorar. Iban a tirarme a los zombis, y yo no podía hacer nada. Me quedé llorando unos minutos, hasta que me sentí un poco mejor. Pero sentí que algo me tocaba la espalda. Era mi mamá. Me puse feliz.

-¿Por que lloras?- pregunto ella.

-Es que van a decidir que hacer conmigo. Dejar que me quede, o tirarme a los zombis.

-Tranquilo, veni conmigo.

Ella me guío hacia una casa, la cual me recordaba mucho a mi casa. Entramos y todo parecía estar... en orden. No habían manchas de sangre, no había olor a podrido, no había polvo y no se oían zombis por ninguna parte. Al parecer, las cosas eran como antes.

-Que linda casa, mamá.

-Tu papa te esperaba.

Mi papa salio de su habitacion.

-Veo que por fin llegaste- dijo el.

Yo le di un abrazo. El me dio unas palmadas en la espalda.

-Lo mejor de todo, es que justo veniste a la hora de la cena- dijo mi mamá

Ella señaló una mesa con un montón de comida. Me senté y empeze a comer. Me puse aun más feliz al ver que estaban toda mi familia. La comida sabía riquísima.

-¿Que tal esta, Aaron?- pregunto mi mamá.

-Esta buenísimo. Los tengo que llamar a Luz, Santino y Melani para que vengan.

-Déjalos que se mueran. ¿No me dijiste que planeaban dejarte?.

Me quedé sorprendido por lo que dijo mamá.

-¿Hablas en serio?.

-Quédate con nosotros- me dijo mi papá.

Derrepente mi papa, mi mamá y toda mi familia empezó a desaparecer. Me encontré en una casa putrefacta. Oí unos pasos ir hacía mi. Me di vuelta y era un zombi. Iba a tirarse arriba mio y trato de morderme. Yo lo tire e hice que chocara contra un televisor, el cual se cayó en su cabeza y lo mato. Me sentí muy culpable por su muerte. Pero me sentía aún peor por alucinar con mi familia. Me di cuenta de que toda esta soledad empezaba a provocarme esquizofrenia.

-Tengo que salir de acá, o van a venir más zombis.

Me largue de la casa y corrí hacia la cabaña. Corri tanto, que nisiquiera sabía dónde estaba.

"Estoy perdido, no se donde estoy, voy a morir" pense.

Choque contra una cabaña. Caí al suelo, debido al choque. La nariz me sangraba un poco.

-¿Aaron, estas ahí?- pregunto una voz parecida a Luz.

Recupere la conciencia y vi que Luz estaba en frente mío.

-¡Aaron! Te perdiste.

Me asuste un poco, por que pensé que era otra alucinación.

-N- no voy a caer de vuelta en las alucinaciones.

-¿Qué decis, Aaron? Soy yo, Luz.

-¿En serio sos Luz?.

-Si, Luz de carne y hueso.

Me levante.

-Te sangra un poco la nariz.

-Oh, si, después... después te lo cuento.

Me limpie la nariz y volví a la cabaña. Estaban Melani y Santino. Me convencí de que no eran otras alucinaciones y eran de verdad.

-Che, Aaron. ¿donde estuviste todo este tiempo?- me pregunto Melani

-Aaah... yo... me... me perdí en una casa abandonada.

-¿Casa abandonada? ¿Cuánto corriste?- pregunto Santino.

-Yo... ok, acá va: tuve una- una alucinacion.

-¿Alucinación?- pregunto Luz.

-Si, de mi madre... pensé que mi familia estaba... viva. Pensé que estaba con mi familia, pero solo estaba en una casa abandonada.

Me miraron con cara de como si estuviera loco. Yo sabía que ellos tenían la culpa. Me dejaron de hablar por días, y mi cerebro empezó a hacer alucinaciones.

-Bien, te creo- dijo Luz.

Melani y Santino la miraron.

-¿En serio crees en lo que dice Aaron?- pregunto Santino.

-Si, el tiene alucinaciones. Hay que tratar de encontrarle ayuda y... tal vez, hablar con el- dijo Melani

-No, lo dejamos a los zombis- le dijo Santino a Melani.

-¿Van a hacerme eso?.

-Vamos a ver- pregunto Santino.

-¿Que- que van a hacer conmigo, entonces?.

-Vamos a encerrarte un rato en tu habitación. Si vemos que estás mejorando un poco, capaz que te liberamos.

FIN.