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ADVERTENCIA: hay partes que tratan sobre autolesionarse, por lo tanto si sientes que es un tema muy fuerte o que puede afectarte física o psicológicamente, por favor te recomiendo no leerlo. 

"Nunca podemos juzgar la vida de los demás, porque cada uno sabe de su propio dolor y de su propia renuncia. Una cosa es suponer que uno está en el camino cierto; otra es suponer que ese camino es el único."

-Paulo Coelho

Howe se mostraba cuerdo al inicio de sus historias, y casi parecía tener un propósito. Luego de un par de páginas comenzaba a divagar, para finalmente acabar con un libro repleto de frases sin sentido. Aun así, Clarke debía admitir que sus palabras generaban cierta atracción.

Además, su transición de cordura a completa demencia ocurría tan lentamente que, realmente, era imposible darse cuenta de ello. Tal vez en eso estaba su magia.

El cambio no se percibía hasta que era demasiado tarde.

"Y aquí, Alycia, de cabello rojo, dijo al caballo: 'Mátame', y el pobre Bob, que era un perro, por fin hizo realidad su sueño de ser un gorrión"

Y en ese momento, casi como sabiendo que Clarke finalmente comenzaba a leer el libro de Howe, Lexa la llamó. La canción "Shape of you" resonó en la habitación.

—¡Lexa Woods! —Saludó con entusiasmo antes de cerrar el libro de Howe.

—¿Clark? — Su voz y su peculiar forma de llamarla se escuchaba suave tras la línea, casi hipnótica — No puedo creer lo mucho que me gusta tu voz.

—¿Sólo mi voz?

Habían pasado dos semanas desde lo que sucedió en el apartamento de Lexa y todo estaba en calma. No había clientes locos, ni escenas violentas, ni gritos, ni llantos. Estaban en una etapa maravillosa.

—Tu culo también, pero no quería ser tan poco romántica.

Clarke rio a carcajadas. Realmente le encantaba esa idiota.

La relación de ambas, por desgracia, no había cambiado mucho. Se hablaban con más frecuencia, sí, y Lexa parecía haber aceptado el hecho de que estaba enamorada de la tatuadora, pero ninguna se atrevía a dar el siguiente paso.

Pero ambas comenzaban a impacientarse.

—¿Podemos hablar de lo demente que estaba Howe? —Cuestionó Clarke con una sonrisa —Juro que a partir del octavo capítulo el pobre estaba alucinando... Y puedo jurarlo porque olvidó escribir el capítulo ocho.

—Es de lo único que hemos hablado durante estas dos semanas — Remarcó Lexa divertida —... Pienso que has leído los tres libros de Howe que te he prestado sólo para burlarte de él.

—¡Por supuesto que no! — Se negó con indignación — Lo hago porque quiero entender qué es lo que ves en estos libros.

—No vas a entender si tratas de entenderlos.

—¡Esto es confuso! — Se quejo la tatuadora —¡Y estresante! —Añadió.

—Tú también sueles estresarme cuando no dejas de hablar de un escritor muerto — Comentó tras la línea con neutralidad — Pensé que yo era su fan loca, no tú.

Clarke intentó contener su risa, pero no lo logró. Nunca se había imaginado a Lexa como una loca fan de nada, pero ahora tenía una clara imagen de la pintora gritando como demente mientras vestía una camiseta con el rostro anónimo de Howe.

—Está bien, lo siento... ¿De qué quieres hablar?

—Iré al estudio mañana para recogerte. Quiero pintarte un poco más...

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⏰ Última actualización: Feb 17, 2023 ⏰

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LA TATUADORA DE LIBÉLULAS (Clexa AU)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora