Capitulo 18.

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—Esta bien,puedes dejarme aqui—pedi mientras abría la puerta del auto.

—¿Segura?—Leisan me miraba como cachorro a su dueño.

Era un poco tarde,y seguro me regañaran por la hora. Ahora mismo estamos en el auto de Leisan,quiere acompañarme hasta el apartamento,pero me estoy negando.

—Puedo acompañarte hasta tu apartamento,no tengo problema—decia con voz segura—. Hací podemos evitar que te regañen por la hora.

—Si es que mamá esta en casa—murmure.

—¿Ella suele comentarles el momento en que tiene que irse?—cuestiono curioso.

—Si,pero en ocasiones se va antes de lo acordado y ni nos enteramos—explico.

—Entonces,no es muy seguro que esté aquí hoy—murmuro.

—Asi es.

—De todos modos,voy a acompañarte aunque te niegues-dijo mientras salía del auto y lo rodeaba hasta llegar a mi puerta—.Venga,vamos.

Y sabía que no tendría que seguir negandome,por qué de todos modos el iba a hacerlo.

Pinche hombre desobediente.

(...)

Al señorito se le dió por usar las escaleras y no el elevador,y yo como toda pendeja me deje arrastrar de el.

JAJAJA.

El estaba muy tranquilo,no mostraba ninguna emoción negativa. Me gusta esa serenidad que tiene.

El hombre perfecto para ti.

Callate.

Llegamos a mi piso y nos acercamos hasta la puerta, no traia llaves haci que tuve que tocar el timbre.

Pasaron unos segundos y nadie abria.

Volvi a tocar.

De nuevo nadie abrio.

—¿Sera que tu hermano no está en casa? —cuestiono dudoso.

—No lo se—negue repetidas veces con la cabeza—¿Puedes enviarle un mensaje?

—Claro—dijo sacando su movil del bolsillo.

***

Mierda.

Mierda.

Mierda.

Un mes de mierda.

Estamos a inicios de octubre, septiembre acabo hace unos días,pasaron las fechas de flores amarillas,y se aproximan muchas fiestas más.

Mi cumpleaños,por ejemplo. Una fecha que no me agrada para nada. En Ecuador,el mes de octubre es celebrado al revés y al derecho,ya que prácticamente hay demasiadas fechas por celebrar. Me acostumbré demasiado a que las personas celebrarán todas las fechas y menos mi cumpleaños,tanto que termine odiando ese día por completo. No me agrada en nada.

Pero lo más importante,es que ahora medio colegio cree que salgo con Leisan.

Estúpido.

¿Por qué hiciste eso?

El veintiuno de septiembre,Leisan llegó hasta a mi con un estúpido ramo de rosas amarillas.

¡¿Rosas?!

¡Rosas! ¡¿Enserio?!

¡¿Por qué rosas?!

¡No me agradan las rosas!

Pero lo que más me molesta no es eso,si no que casualmente tuvo que decidir darmelo,¡frente a todos!

Todos presenciaron ese momento,y si antes no dejaban de cortejarme tantos hombres,ahora se suman mas. Quieren hacerle competencia a ese estúpido rubio.

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