La cita 3/3

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Perdón ya cogí otro avión

Yo aquí no vuelvo

No quiero otra decepción

Tanto te la dabas de campeón

Y cuando te necesitaba

Diste tu peor versión

—¡¿Esa perra mamada qué?! —Dijo Memo al leer lo que acababa de aparecer en su perfil de Facebook.

No terminaba de entender por qué ni Messi ni él se borraban de una vez por todas de Facebook, pero la neta es que para el mexicano era por más risible ver las indirectas que tiraba su ex, todas relacionadas con haber perdido a lo mejor de su vida y la mamada. Al chile a Memo ya le daba risa, porque si tanto lo quería como el argentino pregonaba en redes sociales, entonces desde un principio no hubiera sido un culero, ojete, hijo de la chingada que le pintó el cuerno con el primer pitochico que se le puso enfrente.

—¿Ahora qué puso? — Dijo Diego, que junto a Kevin habían prácticamente invadido su casa desde que empezó con su depresión post rompimiento con su exesposo, y ahora, casi un año después, ya hasta eran roomies.

—Nada, más mamadas haciéndose la víctima como si no lo hubiera cachado yendo a ver a su amante.

—Ese wey, ¿Ya sabe que andas con alguien? —Preguntó Kevin, que se estaba terminando de arreglar en el espejo de la sala, pues tenía una cita con Julián en como media hora.

Memo suspiró, pues no, Lionel no sabía y hasta cierto punto sentía feo decirle.

Y no, no era que pensara perdonarlo, bajo ninguna circunstancia haría eso, pues Leo lo había lastimado y mucho, tanto que pasó como 3 meses cantando a todo pulmón Flowers y después la sesión 53 de Bizarrap cuando finalmente empezó a superar todo, pero eso no quitaba que antes se la hubiera amanecido pisteando, escuchando en bucle No llega el olvido de la Jenny, chingándose botella tras botella, ya fuera en compañía de sus amigos o solo, pero de que se la amanecía en la peda, se la amanecía.

Sin embargo él no era un ojetote como su ex y sentía medio culerillo el romperle todas las ilusiones de que pudieran regresar. Pero wey, su nuevo ligue era Robert Lewandowski, que estaba más bueno y a demás era un caballero.

—Nadie más que ustedes, Chicharito y Andrés saben, pero chance subo una foto con él para que este wey ya deje de pensar que voy a volver con él.

Le escribió entonces a su nuevo novio, y tras obtener su aprobación subió una foto en la que se estaban besando y no quedaba lugar a dudas que eran pareja. Y aún hubiera quedado una, el comentario que puso Lewy a la foto dejó en claro todo.

No se le hizo raro recibir un mensaje de Messi, luego otro y otro más. Mensajes que ni siquiera llegó a abrir y se limitó a borras, eliminando también a Lionel de sus contactos de Facebook, e incluso borró su número de teléfono.

Listo, eso era todo. Estaba superado. Ya había dado sus primeros pasos para empezar de nuevo, nada más de mirar hacia atrás y recordar a alguien que lo había dañado.

En otro lado de la ciudad, sintiéndose completamente solo y miserable, Lionel entendió que lo había perdido.

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NOTA: ¡He vuelto! Esta vez prometiendo una actualización semanal, quizá un poco más, pero nunca menos. 
Espero que aún quede alguien que quiera leerme a pesar de tardar tanto fjbvdfb.  

Amor en la cancha Donde viven las historias. Descúbrelo ahora