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Minho ya se había puesto su traje azul celeste y su corbata blanca, listo para ir al baile. Se había maquillado incluso, y él no solía hacerlo mucho por vergüenza.
Salió de su casa y empezó a caminar hasta llegar al instituto. Se le hizo raro no ver a Han por ahí, así que decidió ir a por algo de beber mientras esperaba.
Empezó a pasar el tiempo, él estaba sentado en un banco observando a todo el mundo bailar. Estaba deseando que Jisung llegase para poder bailar así.
22:15, aun no llegaba Han, y Minho empezaba a sentir su pecho doler.
22:50, sigue sin haber rastro de Jisung, y él era el único que no estaba bailando.
A las once justas, le llegó un mensaje de Jisung.
"Oye bonito, no voy a poder ir contigo al baile :((( me ha surgido un problema familiar y necesito resolverlo, prometo que te lo compensaré <3"
Minho sintió su pequeño corazón encogerse, y sus ojos llenarse de lágrimas. Lentamente se levantó y caminó hasta salir del interior del instituto y llegar a la cancha, donde se sentó y cerró sus ojos para pensar en cosas buenas. Al final no podría bailar, no podría sentirse especial por un momento en su vida. Dejó fluir las lágrimas lentamente, frotando sus mejillas para hacerlas desaparecer cuando caían muy hacia abajo.
Por otro lado, Hyunjin había visto como el omega salía corriendo del lugar mientras bailaba con una bonita omega. Se excusó diciendo que iba a ir al baño y salió detrás de Minho. Llegó a la cancha y lo vio sentado, abrazando sus piernas mientras sus ojos húmedos eran iluminados por la tenue luz de la luna que entraba por las cristaleras. Se escuchaban sus pequeños sollozos y sus hipidos. Tenía el corazón encogido y trataba de retener su llanto.
— Lee.. —Susurró una vez estuvo frente a él, mirándole fijamente—
Minho no respondió, solo tapó su rostro y mordió su labio para no hacer ruido al llorar. Hyunjin se quedó callado, mirándole, pero a la vez frunció su ceño al notar ese olor amargo que el muchacho desprendía. ¿Tanto le importaba un estúpido baile? Hacían uno todos los años, no era para tanto, o al menos eso pensaba Hyunjin.
— Y-Ya...puedes bu-burlarte —Dijo Minho, rompiendo el silencio mirando hacia un lado mientras limpiaba sus lagrimas—
Su maquillaje se había corrido un poquito, sobre todo el rímel. Hyunjin se sentó a su lado en silencio, sin mirarle, aún con el ceño fruncido.
— ¿Por qué te importa tanto este baile? Hacen uno igual todos los años —Le dijo—
Minho tomó una gran bocanada antes de responder.
— Yo nunca...he e-estado en uno...
Y ahí Hyunjin recordó que ese pequeño omega nunca era invitado a nada que fuera de "parejas". Es más, casi nadie hablaba con él.
