🎾 u n o

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Primer día de su nuevo trabajo y ya iba tarde. 

Vaya dilema.

Hyukjae corria por las calles de Seúl, todavía tenía que subir una pendiente para lograr llegar a aquel lugar, el Club de Tenis más exclusivo del país donde regularmente gente asquerosamente rica iba como pasatiempo aún si no sabían nada del deporte. 

-Llegas tarde.-Su jefe lo miro molesto al verlo entrar por el área de empleados.

-Lo siento. -Se disculpo sin buscar una excusa porque no importaba. 

-La primera y última vez, Lee. -Sentencio. -Cambiate, te espero en dos minutos en el área de caja. 

Soltó un suspiro abriendo su nuevo casillero donde podría meter sus pertenencias durante sus turnos de trabajo el cual consistía en atender a las personas con comida o bebidas que vendían en el club lo cual se le hacia estúpido considerando que estaban ahí para prácticar un deporte. 

Al ponerse su uniforme que consistia en una pantalón de vestir negro, calzado elegante, una camisa blanca con el logotipo del lugar y un delantal; se sentía rídiculo pero no podía quejarse porque realmente necesitaba ese trabajo por la buena paga.

Recapitulando un poco, Lee Hyukjae es un joven de 27 años, sin estudios que tuvo que ser la cabeza de su familia cuando su padre murió cuando cumplió los 17 años, 3 años después su madre comienza a enfermarse y después de muchos estudios no supieron que era lo que tenía así que tuvo que dejar su trabajo y él hacerse cargo de la parte económica.

 Al inicio todo iba relativamente bien pues su padre les había dejado ahorros pero tras los estudios y medicamentos que su madre requería poco a poco los problemas llegaron, su sueldo como mesero en una cafeteria no le alcanzaba para dos personas así que pronto comenzó a tener varios trabajos pero a la larga ni siquiero eso comenzó a ser suficiente. 

Hace un par de meses su madre comenzó a ponerse peor así que en busqueda de un empleo se metió en el lugar que más detestaba, la parte de los millonarios. Era aguantar prepotencia o dejar que su madre muriera, obviamente saben la repuesta. 

—Tu placa, Lee. —Su jefe le extendió el pequeño objeto rectangular metalico. —Por hoy solo matendras limpio el lugar y solo, escucha bien, solo cuando alguien se acerque a la barra atenderás. —Le recalco el solo. —No te quiero cerca de ningun comensal por hoy, ¿entendiste? 

—Si, jefe. —Asintió seguro de sí mismo. 

—De acuerdo, solo observa a tus compañeros y pregunta. —Dijo dispuesto a irse pero antes se detuvo. —Cierto, dos cosas. —Lo encaro con el rostro más serio posible. —La primera es que el cliente siempre tiene la razón, no importa si él tuvo la culpa. —Lo señalo. —Y por último, no molestes a Lee Donghae o te despido. 

Hyukjae asintió pero una pregunta rondo por su cabeza.

¿Quién diablos era Lee Donghae? 

🎾

Estacionó su porsche en su lugar asignado, bajó del auto quitandose sus lentes oscuros y abrio la cajuela para sacar su maleta con su equipo. Recientemene había llegado al pais después de su triunfo en el Abierto de Australia pero debía entrenar si quería ser el Golden Slam para superar a sus rivales. 

—Señor Lee, nos alegra tenerlo de vuelta. —Le saludo el gerente con una sonrisa lo más simpática posible.

"Que falso", pensó Donghae al pasar, 

—Buenas tardes. —Saludo a todos con una ligera sonrisa, lo más sincera posible y es que había una realidad.

Donghae no era grosero o tenía su ego hasta el cielo, simplemente odiaba que lo tratarán como un Dios cuando claramente era un simple mortal con una buena habilidad para el tenis pero las demás personas no lo consideraban así.

Tennis Prince »EUNHAE |TERMINADA|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora