dilf's: one shots.

O1

PEDRO PASCAL x reader.

título: you could be my daddy.

advertencias: semi pedofilia, pura ficción, y un ligero +18, más que nada dirty talk.

primer one shot! espero que les guste mucho, de nuestro chileno favorito. 😼

                                   ( 🍾 )

La fresaca brisa del mar chocaba contra mis piernas, el sol brillaba contra mi cuerpo y mis ojos estaban cubiertos bajo mis lentes de sol.

Vacacionamos en familia a una pequeña isla en Italia, donde se encuentran todos los chicos bellos y hermosos, escondidos en el continente europeo.

Pero había algo mucho mejor que un chico de 16 años con ganas de follar.

Un hombre de más 30 años con ganas de hacer el amor.

Y desde hace rato en este hotel había uno que no podía dejar de mirar.

Pelo azabache medio canoso, barba y ojos negros. Se veía latino, pensaría que es mexicano, pero por su acento creo que es chileno.

Su camisa a juego con su short caqui me hacían estremecer de la emoción.

Tan solo pensar en él y yo escondidos en alguna de las habitaciones de este hotel me hacen sentir una deliciosa sensación en mi vientre bajo.

Decidí hacer algo al respecto.

En cuanto lo vi sentarse en las bancas que daban vista a la alberca, la peor o mejor idea que se me haya ocurrido paso por mi cabeza.

Me levante y prepare para nadar, con pequeños estiramientos que dejasen a la vista mis atributos traseros.

Me eche a la alberca y nade de la manera más sensual que conocía, básicamente con lo que muestran en el porno, porque a mis 16 años nunca había tenido un encuentro sexual.

Y en verdad quería que el primero fuera con él.

Salí de la alberca quedando frente a él hombre azabache, sacudi mi cabello y lo exprimi hacia atrás mientras subía mis braguitas dejando ver mis nalgas bronceadas por el sol.

– Oh, mierda. – Dejé la toalla en el otro camarote. – Fingi torpeza y me voltee hacía él, que de hecho me estaba mirando. Me pregunto desde hace cuanto que me esta observando. – ¿No tienes una toalla que me prestes? – Sonreí inocentemente al hombre mayor.

– Por supuesto, cariño. – Sonrió coquetamente y me cedió su toalla blanca.
– Muchas gracias, ¿Te importa si te acompaño? En lo que me seco, no me gustaria mojar mis pertenencias. – Hice un énfasis en mojar.

– Claro, no hay problema. ¿Quieres algo de tomar? – Asentí suavemente. – Espero que te guste el vino seco. Justo estoy apuntó de pedir un vino seco y una tabla de quesos. – Dijo el hombre.

– Oh, amo el vino seco, aún que soy un poco más fan del vino rosado.

– Entonces rosado será. Dame un momento. – El hombre mayor se dio la vuelta para llamar a una camarera y pedir los alimentos, continue secando mi cabello mientras escuchaba atentamente lo que él decía en italiano, su voz en ese idioma era tan "eccitante". (excitante)

El hombre se devolvió hacia a mí y me dedico una bella sonrisa que acentuaba sus facciones.

– Aún no me presento. Soy Pedro Pascal. – Sonrió y sus ojos se achinaron de una forma tan encantadora. Me extendió su grande mano para saludarme amablemente.

– Mucho gusto, Pedro. Soy __________, __________. – Le sonreí coquetamente mientras estrechaba su enorme mano.

– ¿Eres de por aquí? Me parece que eres demasiado bella, toda una belleza extranjera diría yo. – Dijo mientras tomaba de su vino.

– No, no soy de aquí.

– Ya decía yo, eres muy bella, un poco latina diría yo. ¿De dónde eres? – Pregunto interesado el hombre mayor.

– Pues de por ahí, pero no te diré más. – Sonreí y lo mire a directamente a los ojos. – Si quieres saberlo tendrás que averiguarlo por tu cuenta. Digo aún me quedan varias semanas en Italia. – Lo desafié, lo desafié a que me conociera más, no deje de ver sus enormes ojos castaños.

– Supongo que tendré que correr el riesgo. – Me guiñó el ojo coquetamente mientras me sonreía.

AQUÍ LLEGAMOS POR HOY.
Muy corto, pero ya tenía ganas de actualizar, como mañana tengo que ir a la prepa, lo dejo hasta aquí.
Espero que les haya gustado, claro que tendremos parte dos, pero que mejor manera de empezar que con nuestro chileno favorito. 💗