Segunda temporada de Blood night
Tras la partida de Rubí a tierras Europeas, las cosas cambiaron en Seúl.
Yoongi se graduó, convirtiéndose en adulto. Lo que no sabía es que se convertiría en uno de los líderes mas altos de los vampiros.
Tras la un...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Tras tres días desde que llegó Hani y nuestra nueva hermana, todo ha sido un descontrol. La dichosa mocosa llora a cada rato y es imposible dormir.
Rubí estaba muy extraña, no se separaba de la pequeña. Era como una rara necesidad de saber en todo momento que la pequeña Lexi estuviera protegida.
Me llegaba a incomodar que estuviera más pendiente de la mocosa que de mi. Debíamos mudarnos y quitarle esa obsesión a Rubí de u bebé que no era su responsabilidad. Ya que muchas madrugadas cuando la escucha se toma como un deber ir a ver que este bien y yo siendo vampiro también necesito dormir un poco aunque sea.
Realmente no lo necesito, pero me gusta dormir y ella irrumpe siempre que estoy descansando.
Hoy al fin iríamos a ver a la madre de Taehyung y de paso a ver la casa que nos está intentando vender Jimin. Iríamos solo ahí, por lo que no me preocupa Rubí. Mientras la tenga apartada de todo macho pervertido, puede hacer vida normal.
En cuanto a Jae, le noto raro desde la llegada de Lexi. Es como si nos evitará a todos y eso me hace pensar cosas... ¿puede ser envidia? ¿Es solo coincidencia y él está teniendo un bajón emocional? ¿O es algo más complejo y debo meterme como hermano mayor?
Son preguntas que no sacaba de mí mente mientras conducía. Rubí iba mirando por la ventana seguramente pensando en lo que sucedería hoy. Ambos estábamos nerviosos por lo que pasaría hoy.
No tardamos en llegar a la clínica, donde la madre de Taehyung nos esperaba. Era una clínica especializada en estos temas sobrenaturales, está preparada para llevar embarazos de este tipo.
Tuvimos que esperar sentados, mientras hablaba con Jimin para avisarle de que iríamos después a verle. Según él, teníamos que hablar algo importante. Eso me dejó confundido, pero no pude hablar más con él, ya que me vi obligado a colgar al escuchar el nombre de Rubí.
-- Rubí Wolf, pasa. Ya estoy libre.
La mujer de unos cuarenta y tantos o cincuenta años hizo una reverencia dejándonos pasar a la sala. Tenía esa misma sonrisa que Taehyung y aparentaba menos edad de la que tenía.
Los dos entramos tímidamente en la fría sala. Le harían una ecografía para confirmar nuestras suposiciones y ya de paso darnos más detalles. Con mi madre fue todo más diferente, supongo que depende la especie.
-- Esto no es como el ginecólogo ¿cierto? no tengo una buena experiencia y no me gusta que metan cosas extrañas ahí abajo.
La mujer no pudo evitar reír, mientras yo me tapaba la cara avergonzado por sus palabras.
-- No debes preocuparte, no habrá que meter nada por ahora.
Eso de "por ahora" no le hizo mucha gracia a Rubí. Pero ella tomó asiento en la extraña camilla y se terminó tumbando como le explicó la madre de Taehyung.
