●9●

134 14 3
                                    

Johnny tardo muy poco en llegar a su hogar  pues por la emoción de que su invitación fuera aceptada y al mismo tiempo la adrenalina que tenía en su cuerpo por los nervios y la situación dio una vuelta completamente innecesaria en una dirección contraria a su casa pero daba igual de todas formas nadie lo esperaba en esa estructura que debía llamar hogar, entró cuidadosamente sin hacer mucho ruido o si lo hacía de seguro Sid empezaría una discusión. Subió con cautela a su cuarto y al entrar solo pudo sentarse al borde de su cama extendiendo la mano pata tomar la almohada que estaba en la cabecera y ponerla contra su cara para ahogar sus gritos, definitivamente parecía una adolescente de 15 años.

-Bien Johnny Lawrence- empezó a decirse a si mismo- tampoco debería emocionarme tanto, en primer lugar ¿porque tanta emoción? Daniel es un chico que conocí hace relativamente poco y...dios a quien engaño estoy confundido.

Dejo caer la almohada y poner sus manos en su cara tratando de pensar ¿realmente sentía algo por Daniel? mierda ya le dolía la cabeza todo esto. Se disponía a bajar para tomar un vaso de agua y al llegar a la cocina el celular que se encontraba en su bolsillo derecho vibro levemente, dejó el agua a un lado sacando el celular para ver a que se debía aquella notificación, tenia muchos mensajes que probablemente no respondería pero el último definitivamente si, y si es de quien lo piensan.

"Gracias por venir a dejarme a casa Johnny será genial ir a una fiesta juntos"

No pudo evitar sonreír, Daniel provocaba ese efecto en el algún día se le caerían las mejillas de tanto sonreír por culpa de ese chico, pero lo hacía sentir tan bien que no le importaba.

"Claro que si Dani Boy no te arrepentirás lo pasaras increíble;)"

Dejo el celular aun lado para tomar un gran trago de agua apoyando sus manos sobre el mesón de la cocina mirando el techo, estaba realmente cansado de esa casa de esa vida tan vacía y solitaria, arrugó un poco su nariz al pensar en eso pero al parecer su ángel de la guardia sabía cuando Johnny sobrepensaba todo y lo salvaba.

"Jajaja claro será increíble esta cita"

¿Cita? ¿Era una cita? realmente lo pensó por un segundo pero al momento en que entraría en pánico una notificación volvió a sonar salvándolo de sus pensamientos.

-"Solo bromeo contigo jajajaj nos vemos mañana buenas noches"
-"Jaja ya lo se buenas noches descansa"

Termino de tomarse aquel vaso de agua dispuesto a subir y dormir, al llegar a su habitación dejo cuidadosamente su celular sobre la mesa de noche que se encontraba al lado de su cama, se metió cuidadosamente en las sábanas traídas desde París como un regalo de su madre cuando fue con Sid por su aniversario, eran realmente cómodas que con solo tocarlas el sueño lograba llegar rápido y eso fue lo que rápidamente provocó en el rubio con tan solo tocarlas quedándose profundamente dormido.

Por otro lado Daniel estaba en su casa, acostado mirando la pantalla de su celular esperaba que Johnny contestara pero algo le decía que debía estar durmiendo, y que el debería hacer lo mismo pero no podía, la invitación del rubio de ojos azules a aquella fiesta sus ganas de dormir desaparecieron, como su hubiera estado en un profundo sueño que una bruja puso sobre el y Johnny viniera en su caballo a salvarlo y despertarlo de ese sueño, claro que ni vendría en un caballo y mucho menos lo besaría, besar, besar a Johnny Lawrence era un sueño que cualquiera quisiera vivir hasta el hombre más heterosexual y por supuesto que Daniel también quisiera saber el sabor de esos labios que tienen una obsesión con las tartas de fresa y el café ¿a que sabrá más?¿a fresa?¿o a café? esas preguntas por más absurdas que sonoran no lo dejaban dormir.

Flores Con Café Donde viven las historias. Descúbrelo ahora