Sentado en la cama con su espalda recostada en la pared, el rubio contaba las tablas del techo como por enésima vez. El tiempo seguía avanzando, no sabia cuando amanecía o anochecía. Tenia un vago calculo cuando Jimin iba a la habitación para llevarle la comida.
Los encuentros con el menor se habían repetido incluso varias veces en el día, Jimin siempre se aseguraba de atarlo antes de comenzar a besarlo y montar sobre él. Yoongi ya se había resignado y le daba al chico lo que pedía, entendía que era la única manera de estar mas cerca de la libertad, o al menos eso creía.
Tampoco era estúpido y no se taparía bajo el manto de víctima, follar a Jimin le estaba comenzando a gustar, ese niño era un pervertido y le gustaba el rostro de placer que dibujaba cuando lo montaba. Quizá algo de perversidad se le estaba pegando.
Llevo su mano a la muñeca rascándola por encima del suéter que tenia puesto, ahora Jimin le daba ropa con el que pudiera cubrirse y no tener que estar semi desnudo casi todo el tiempo. Se subió la manga rascándose las heridas que aun no sanaban, pues hasta hace un par de horas el peli rosa lo volvió atar para que lo follara. Suspiro cansino, estaba aburrido y agotado. Siempre le gusto la soledad, pero ahora parecía volverse su enemiga y el silencio lo asustaba en ocasiones. Quería salir.
Escucho como el seguro de la puerta se desactivo y por acto reflejo se giro para mirar. Ahí estaba de nuevo el peli rosa ingresando con un conjunto de ropa diferente, pues hasta hace unas horas estaba vestido con un deportivo gris ahora tenia un conjunto blanco. el menor le sonrió ampliamente dibujando dos medias lunas en sus ojos.
—Vine a limpiarte las heridas — elevo la caja en su mano. El mayor asintió.
Jimin se acerco con calma dejando la caja sobre la cama, incluso debajo de la sudadera podía notar el arma en la pretina. Se sentó a su lado y saco lo necesario, un par de gasas y un líquido con subtono naranja. Con cuidado tomo la mano de Yoongi y subió las mangas dejando ver las heridas en su muñeca, hizo un chasquido con su lengua y miro al mayor.
—Debo cuidarte mejor, no quiero que esto se infecte. — Yoongi lo observo sin responder.
No pudo evitar fijarse en las manos pequeñas de Jimin, sus dedos eran pequeños y regordetes, igual sus uñas eran pequeñas. Su piel era bastante blanca y al tacto se sentía cálida.
—¿Qué día es hoy? — dijo sin siquiera darse cuenta, el menor lo miro frunciendo el ceño —Di-disculpa, es solo que...estoy aburrido.
Jimin ladeo su cabeza y suavizo la expresión en su rostro.
—Es miércoles.
Yoongi abrió sus ojos y dejo sus labios entre abiertos ¿Tanto tiempo?
—¿Estas bien? — inquirió el menor. Yoongi solo asintió.
El rubio desvió su mirada a la pared, en un punto fijo dejando que su mente se perdiera por un momento. Llevaba varios días en ese lugar encerrado siendo el juguete de Jimin en los que no había visto la luz del sol o tan siquiera un atardecer. donde su única rutina era despertar, follar a Jimin y seguir en esa habitación esperando a que le diera de comer. No. No se sentía como un juguete, era una mascota.
—Jimin — le llamo con temor. El aludido lo miro — ¿Crees que pueda salir de aquí? — inquirió con el miedo reflejado en sus ojos — Quiero decir, salir de esta habitación.
El peli rosa se detuvo y se irguió para mirarlo fijamente, de nuevo su mirada cambiaba, era posesiva y demandante.
—¿Por qué quieres eso?
—Quiero salir de esta habitación Jimin, quiero ver algo mas que estas paredes. Por favor — suplico.
El menor suspiro sin dejar de mirarlo, recorrió el rostro pálido que tanto le gustaba, sus ojos reflejaban un miedo que no le hacia sentir bien. No quería que Yoongi le temiera. Suavizo una vez más la expresión de su rostro y le regalo una sonrisa dulce con la intención de que el mayor no lo siguiera viendo de esa manera.
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OBSESSION [Yoonmin]+18
FanfictionMin Yoongi un chico universitario que debido a sus buenas notas obtuvo una beca en una de las mejores universidades del país para estudiar lo que más amaba y ser un gran productor musical. No obstante los gastos de su diario vivir era algo que debía...