One - Shots (Varios)

"¿Qué tal para Siempre?" (Emison)

Como saben, me borraron mi libro anterior de OS, así que aquí estoy reescribiendo, reeditando y tratando que queden bien. Este fue el primer OS que escribí y realmente no quería que perdiera la escencia pero si cambie ciertas cosas.

Por favor tenganme paciencia, porque son muchos OS que tengo que revisar, pero tratare de subir esta semana por lo menos tres.

En fin, espero lo disfruten, cualquier error corregire más tarde.

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Se dice que lo peor de perder la memoria, no es no poder recordar momentos vividos con las personas más importantes para ti, sino perderte a ti mismo. No recordar buenos o malos momentos, no suele ser malo, porque después de todo, puedes reconstruir nuevos momentos, pero tratar de reconstruir una identidad, es más difícil de lo que parece.

POV Omnisciente

Madrid, España

-Hola rubia, he traído tu desayuno –entró una pelinegra con una bandeja de comida entre sus manos.

-Gracias, pero no tengo hambre.

-Vamos rubia, tienes que desayunar –insistió la pelinegra mientras colocaba la bandeja sobre la mesita de noche.

-En serio no tengo hambre, Lauren, me duele un poco la cabeza –dijo la rubia volviendo a recostarse sobre la cama dándole la espalda a Lauren.

-Oye, sé que han pasado dos años desde que te encontramos y que estas tratando de adaptarte a esta nueva vida, ¿pero de verdad no quieres saber quién eras? –pregunto Lauren con cuidado sin querer alterar a la chica.

-No quiero enterarme de que tal vez pude ser una chica horrible –susurro la chica con voz rota.

-¿Y cómo estás tan segura de que pudiste ser una chica horrible? –pregunto Lauren con curiosidad. –A lo mejor dejaste un lugar y a varias personas con un vacío en el corazón, y a lo mejor hasta a alguien que estaba enamorada o enamorado de ti.

-He investigado que varias chicas de mi "estereotipo", son unas completas perras con las personas. No creo que alguien me extrañe si quiera si yo fui una persona así.

-Y eso no significa que tú lo seas –sonrió tranquilizadoramente la ojiverde. –A pesar de que te he conocido durante un año porque el primero estuviste en coma, sé que eres una chica bastante hermosa, que es vulnerable, que tiene muchas inseguridades y demonios, de los cuales huye cada vez que puede en vez de enfrentarlos, pero sé que eres capaz de darlo todo por las personas que amas –dijo Lauren mientras la observaba con una pequeña sonrisa.

La rubia se volteó para poder ver a la pelinegra cara a cara.

-¿Estás coqueteando conmigo? Porque te recuerdo que tienes novia –la empujo suavemente por el hombro.

-No te estoy coqueteando rubia, solo soy honesta –contestó Lauren encogiéndose de hombros.

-Y es demasiada honesta, a decir verdad. Es más, bien podrían ser hermanas sino fuera porque tú eres rubia de ojos azules y ella pelinegra de ojos verdes –dijo una castaña desde el marco de la puerta.

-¿Yo, hermana de ella? Ni en mis peores pesadillas –dijo la rubia con tono burlón.

-Tal vez si seas un poco perra.

-Imbécil –murmuró la rubia.

-Tonta.

-Loca.

-Estúpida.