4 misterios, 4 remedios (Finalizada)

31 Capítulo

-Esto es malo, muy malo- repetía Boscha mientras comía frituras

-Tenemos que hacer un plan, no podemos perder de nuevo está oportunidad para salir de esto de una vez por todas- decía Hunter mirando a todos sus amigos deteniendo la mirada en Amity quién se mantenía en silencio-Sabes que es nuestra única opción- Amity alzó la mirada chocando con los ojos del rubio soltando un suspiro de frustración.

-Lo sé...- sabía que esto estaba mal pero aún así era algo que no le podía decir, todavía no- Yo trataré de encontrar donde está, ustedes se encargan de sacarlo de ahí- más que un plan parecía una idea de lo que era pero la cabeza ya no le daba para más, estaba cansada de todo esto, de toda esta situación que antes miraba cómo algo normal pero ahora ve que no es así.

-¿Cuando será?- pregunta Matt

-No sé- volvió a suspirar- Denme tiempo- todos sabían que lo que no tenían era tiempo pero nadie dijo nada para ya no frustrar más a Amity quién se encontraba con su cara contra la mesa.

Los 3 chicos se encontraban viendo una película, o al menos eso era lo que pretendían. No podían sacar el tema de ayer, pues ¿cómo? Si se trataban de sus madres.

Cada uno estaba hundido en sus pensamientos, tanto que cuando uno de ellos salió de estos no se dieron cuenta que se habia ido.

Bajaba las escaleras del sótano apresuradamente antes de que Luz o Gus se dieran cuenta de su ausencia, su respiración estaba un poco acelerada pero no nerviosa.

Cuidadosamente quitó una tabla del suelo y de su bolsillo saco una hoja de papel, antes de meterla en ese agujero la reviso por unos segundos para después arrugar la y aventarla en el agujero para después poner la tabla.

-¿Que haces aquí Willow?- pregunto Gus acompañado de Luz quien la observaban con curiosidad.

-Oh... Nada, solo que escuché unos pequeños ruidos y pensé que se había metido un animal-contesto lo más tranquila que pudo, sería mentira decir que no la asustaron.

-Ya termino la película, creo que es momento de volver a casa- Willow asintió ante la propuesta de Luz

-Esta bien, nos vemos mañana- se acercó a ellos y los abrazo, aunque no lo aceptarán, ellos necesitaban ese abrazo. Duraron unos segundos así hasta que se separaron y con ojos medio cristalinos y una media sonrisa decidieron salir de ese sótano para después Willow poder escuchar la puerta principal cerrarse. Ya se habían ido... Y sin poder más Willow cayó de rodillas lastimando se en el proceso así llorando y no por los seguros moretones que se pudo a ver hecho al caer, si no, por la culpa que ahora ella cargaba.

La cena era silenciosa Erika y Hugo se mantenían en sus teléfonos mientras debes en cuando se llevaban un bocado de comida en la boca ignorando por completo que Boscha estaba ahí. Eso ya era normal para ella, ellos no se molestaban ni siquiera por preguntar su día, solo le pagaban la colegiatura, le daban comida y casa, parecía ser más un perro que su propia hija. Era cansado.

-Me voy a mi habitación- sin más se levantó de la mesa y se dirigió a su habitación pasando por puertas y más puertas, hasta que paso por la antigua habitación de su hermano, se quedo mirando la puerta unos segundos hasta que por fin se decidió en abrirla, nunca en su vida había estado ahí, ni siquiera podía recordar a su hermano o al menos confirmar que tuvo uno.

Al abrir la puerta se encontró con muebles de madera pesada, las paredes eran de color blancas si ninguna mancha, había una alfombra color roja cubriendo la mayor parte del cuarto, un aroma de tierra o de museo inundo su nariz, pareciera cómo si toda la casa hubiera estado avanzando con los años excepto ese cuarto.

Con miedo dio un paso adentro a de la habitación y cuando se sintió más segura empezó a recorrer el cuarto, a ver pequeños juguetes coleccionables de años atrás, el armario, su escritorio el cual se encontraba enfrente de la cama, una cama individual rodeada de libros desordenados, con cuidado iba observando cada uno de ellos, cada uno de ellos de diferentes temas, nunca del mismo, pero siempre relacionado con lo imposible.

Observaba con cuidado hasta que uno le llamo la atención, un libro de pasta dura,negro con pequeñas manchas de humedad y sin título, lo empezó a observar hasta que escucho unos pasos. Agarro el libro con fuerza y con mucho cuidado salió de ahí sin hacer ruido corriendo a su habitación, cerrando la puerta en el proceso.

Recuperando la respiración vio el libro que tenía en sus manos, está vez dándose cuenta que no era un libro, era una libreta, con un suspiro decidió abrir la libreta encontrándose con una sorpresa.

"Anotaciones.

Propiedad de Bash Ackerman"

Esto sin duda la había dejado atónita pero no tanto como lo de la siguiente página.

"Tenemos poco tiempo para que Philip nos descubra pero daremos nuestras vidas si es necesario para que el no pueda concluir lo que a estado por años"