Rainbow• [Ohmnanon]

Capítulo 1

OHM

Meses después del inicio de la relación.

Mi actividad favorita en la vida, es estar acostado con Nanon cuando lee, mirando su carita.

No soy capaz de cansarme de ese silencio cómodo que compartimos.

—Amor, tu teléfono —dice bajando su libro y noto que la pantalla está encendida.

Hay varios mensajes ahí.

Muevo mis dedos, para abrirlos, apoyándome en sus piernas.

—¿Quieres que te haga algo de comer? —le pregunto besando su barriga y él sonríe.

—Sí, por favor.

Asiento, leyendo con flojera el mensaje de Chimon.

—¿Quién es? —pregunta porque me quedo en silencio y bloqueo la pantalla, dejando el celular al lado.

—Chimon.

Él continúa mirándome, y entiendo que estoy siendo cortante así que aclaro mi garganta.

—Es por trabajo —agrego tratando de sonar casual.

Sé que este es un tema que hemos conversado y supuestamente está resuelto por completo entre nosotros, pero sigo intentando evitarlo.

—¿Qué dice? —suelta mirando su libro de nuevo.

—Hay un contrato —respondo mirando al techo— vamos a hablarlo mañana, porque quiere que lo firme.

Él no dice nada más.

No deberíamos hablar de esto, es algo que acordamos, y nos va bien de esa manera, pero solo... a veces es inevitable.

—¿Contrato de qué? —pregunta de la nada, cerrando su libro.

Quizás es una mejor opción hablarle con más sinceridad, para que no piense que hay algo que quiero ocultarle, porque no es así.

—Una película muy cliché para una plataforma nueva.

—Ah.

—Seguramente habrá más gente de lo normal en las grabaciones, porque es una empresa importante —le explico casi justificándome— siempre hay mucha gente profesional alrededor, todo el tiempo, en las cámaras, y dirección...

—Y estará también el actor que trabajará contigo, supongo.

Mierda.

Si me caigo de cabeza, quizás tenga una contusión para evitar esta conversación.

—Sí.

—¿Qué harán? —me pregunta mirándome directamente y yo niego con la cabeza.

—No me dan el guión, si no firmo el contrato.

—¿Qué sueles hacer?

Intento mantener mi mirada con él, porque sé que excluirlo de mi vida, puede hacerlo sentir más incómodo.

No debería seguir huyendo de esto.

Nanon es el hombre que amo, quiero pasar el resto de mi vida con él, y no me importa si es muy apresurado pensarlo, porque estoy enamorado.

—Hago lo que me pida el guión, cada movimiento está escrito por alguien profesional, no trabajo nada informal, porque no es mi intención ser un mediocre.

—Umh.

—¿Por qué estás preguntando tanto hoy?

—Curiosidad.

—¿Estás enojado? —le pregunto con miedo.

—¿Sería injusto decir que he cambiado de opinión sobre algo con lo que fuiste sincero desde nuestra primera cita solo porque te amo ahora y ya no pienso igual?

—¿Qué?

—Es solo una pregunta —dice levantándose— no estoy molesto.

Va irse a la cocina, pero agarro su mano para regresarlo a la cama.

Nuestra cama.

Fue tan intenso todo desde el inicio, que le pedí mudarse conmigo cuando apenas estábamos iniciando con esto.

Es que odio pasar tiempo lejos de él.

—Te amo —digo acariciando su mejilla— ¿Te lo había dicho ya?

—Lo dices todo el tiempo —susurra mirando mis ojos.

—Porque te amo, muchísimo.

—Ohm...

—¿Vas a decirme algo que no quiero escuchar?

Nanon suspira y luego de unos segundos que parecen eternos... sonríe.

—Si no quisiera esto, no estaría aquí, ya deja de preocuparte —responde agarrando mis mejillas— yo te amo más que tú.

—Yo te...

Voy a discutirlo, pero él pone un dedo sobre mi boca, para callarme.

—Créeme —dice ya serio— yo te amo más, Ohm.