𝕶𝖚𝖗𝖔𝖘𝖍𝖎𝖙𝖘𝖚𝖏𝖎 𝖓𝖔 𝕹𝖊𝖛𝖊𝖗𝖑𝖆𝖓𝖉 // TPN X Kuroshitsuji A.U

🝮︎︎︎︎︎︎︎𝑬𝒔𝒆 𝒄𝒐𝒏𝒅𝒆, 𝒓𝒆𝒇𝒖𝒈𝒊𝒂𝒅𝒐🝮︎︎︎︎︎︎︎

El hermoso sonido del silencio.
Después de haber descubierto cosas que nunca imaginaste, saber el secreto que nunca esperaste saber, y casi haber muerto en el camino al descubrimiento, estás durmiendo plácidamente.

Oh, qué hermoso es dormir después de haber pasado por tantas cosas.

—El silencio pudo haber perdurado si no fuera por aquella chica...— ¡Buenas, ¡buenas!

Emma.

El grito hizo Ciel despertara y aún dormido, viera la cara de Emma llena de energía, como si el verbo "dormir" no fuera parte de su diccionario.

—Buenos días, Ciel. —La de cabello naranja le sonrió ampliamente al joven cuando vio que fue el primero en despertar— ¿Cómo te sientes?

—El de cabello azul se tallaba su ojo izquierdo con el dorso de su mano, aún acostado— Bien, hasta que me despertaste —usó cierto tono de molestia y sarcasmo a la vez en su voz—.
—Ay, qué chistosito —dijo con voz burlona la pelinaranja mientras se ponía ambas manos en la cintura y volteaba los ojos—.

Ciel se fue sentando en el suelo donde estaba sentado. Conociendo a Emma, haría un escándalo terrible con tal de despertar a todos.

Notó que en una de sus manos había un sartén, mientras que en la otra un cucharón.

Por la reina Victoria.

—¿No puedes despertar más tarde? —Preguntó Ciel para después bostezar—.
—Nop, a las 6:00 A.M tengo que estar lista para despertar a todos —respondió Emma mientras alzaba los brazos hacia arriba—.

—Ya no estamos en la granja... —Dijo Ciel, rendido, empezó a quitarse la manta que tenía encima para levantarse y no tener que escuchar el alboroto de la chica—.

A pesar de que era verdad, a Emma en cierto modo le pareció un poco seco y frío la manera en la que Ciel dijo esas palabras. Es la verdad, pero el modo en que lo dijo fue algo que hizo su sonrisa un poco más pequeña.

—Espera, déjame revisarte —antes de que Ciel pudiera irse a otra habitación o a otro lado, Emma tomó de la manga del buzo de Ciel, haciendo que este se voltee la cabeza hacia la chica—.

Ciel sintió la mano de Emma deslizarse por su frente, estaba fría por los objetos de cocina. Emma tuvo que soltar el sartén para poder tocarlo.
Con una mirada confundida, Ciel miró la seriedad en Emma, esta chica era tan difícil de entender.

Alegre, pero preocupada.
Imprudente, pero decidida.
Chica, pero con apariencia de chico a primera vista.

—Veo que... estás mejor. Aunque aún tienes fiebre —Emma quitó su mano y sonrió levemente—.

—Ah... —Fue lo único que pudo decir el chico, pues no procesaba aquel tacto—.

Ciel se tocó la frente. Miró a Emma y mantuvo una cara neutral y confundida.

Decidió reaccionar e irse antes de que empezara la desgracia.

—Será mejor que me vaya antes de que hagas alguno de tus escándalos —al decir eso, abrió la puerta y salió—.
—¡¿A qué te refieres con "uno de mis escándalos"?! ¡Ciel! —Emma gritó mientras tenía el ceño fruncido con una sonrisa, pero el peliazul ya se había ido—.