D̲e̲s̲p̲i̲t̲e̲ ̲t̲h̲e̲ ̲r̲a̲i̲n̲

𝙴𝚡𝚙𝚕𝚘𝚜𝚒ó𝚗 𝚍𝚎 𝚎𝚖𝚘𝚌𝚒𝚘𝚗𝚎𝚜

---------------------------------✨----------------------------Un nuevo día comenzaba, está vez abrí los ojos encontrandome en el cuarto de hotel que compartía con Aldo el cual aún se encontraba dormido, aproveche para meterme a bañar y arreglarme ya que saldríamos con Roier a hacer IRL desde temprano.

Glow- (salió del baño enredado en su toalla buscando su ropa con la mirada) A cabron, ¿Dónde está?

Aldo- (se movió en la cama mientras balbuceaba entre sueños)

Glow- (al escuchar a Aldo se acerco a mirarlo para asegurarse de que si estuviera dormido) Wey, Aldo ya despiértate.

Aldo- (Abrió sus ojos entre sueños sonriendo al ver al menor) Hola brillitos.

Glow- (rio al escuchar aquel apodo) ¿Brillitos?

Aldo- (asintio tomando la mano del menor sentandolo a su lado) Si, eres el brillitos.

Glow- (acaricio la mejilla del mayor aprovechando el poder estar cerca del mismo) Déjame ir a cambiarme wey.

Aldo- (recorrió el cuerpo del menor con su mirada) Que atrevido (bromeó con una cara coqueta)

Glow- Ya ves mibida, todo lo que te comes (siguió la broma levantándose para cambiarse)

Aldo- (rio volteando para darle privacidad y que pudiera cambiarse) Ya cambiese pelón.

Glow- Eso voy a hacer pendegeo (tomo sus cosas empezando a cambiarse)

_Ya pasado dos horas los chicos se encontraban sentados en el lobby del hotel mientras esperaban a Roier y al Mariana, ambos se encontraban viendo clips recientes y comentando lo que veían entre risas recargado uno contra el otro con sus manos entrelazadas; al pasar del tiempo y gracias a su estancia juntos se habían vuelto más unidos e incluso más cariñosos, para ninguno era un secreto que se atraian mutuamente sin embargo no hacían nada para poder estar juntos más que lanzarse frágiles piropos cada que podian_

Glow- (su mirada se despegó del celular pasando a observar la cara del mayor) Aldo.

Aldo- (miro al menor al instante bloqueando el celular para enfocar toda su atención en el contrario) ¿Que?

Glow- (sonrió frotando las manos del contrario contra las suyas) Te quiero.

Aldo- (una sonrisa enternecida se pinto en su rostro plantando un beso en la mejilla del contrario) Yo también te quiero.

Mis labios se curvearon en una sonrisa al sentir aquel lindo roce, mi corazón se aceleró a tal punto en el que creí que se saldría de mi pecho,tomé las fuerzas necesarias para acercarme a aquellos labios que habían rozado mi mejilla, me detuvo unos segundos para recapacitar sobre lo que estaba haciendo...¿Y si no sentimos lo mismo? Mi autoestima y coraje cayeron hasta lo más profundo de mi piel haciendo que empezará a separarme o eso hubiera hecho si no fuera por las manos de Aldo en mi mejilla que insistieron en acortar nuestra distancia logrando por fin aquel beso.

_Ambos chicos se sumergieron en una burbuja llena de emociones dejando a un lado todo lo que pudiera pasar en aquel momento, a ojos de ambos esto era una experiencia simplemente maravillosa que no querían dejar de sentir; los labios  del otro sobre los propios, aquellas manos en su cintura acercando su cuerpo al contrario hicieron que Glow se dejará vencer por aquel chico de lentes cayendo rendido a sus pies, claro que no era el único que sentia emociones tan explosivas, en ese preciso momento el de lentes se encontraba aturdido y cegado por aquellos labios que parecían no querer separarse nunca más de los suyos, se rindió de inmediato al sentir aquellas manos que se aferraban a sus mejillas sin querer soltarlo.
Todo parecía ser perfecto hasta que las visitas inesperadas se hicieron presentes_

Glow- (Se separó al escuchar la puerta de la entrada siendo abierta)

Roier- (saludo feliz a ambos) Hola pinches prietos.

Aldo- (su boca se torció en un intento de sonrisa) Que pedo.

Mariana- (su mirada pasaba rápidamente entre los dos chicos) Weyes, ¿Están bien?

Glow- (miro con confusión al alto asintiendo) Si mojón, ¿Por?

Mariana- Es que están muy rojos apa (comento sin poder relacionar lo que pasaba)

Roier- Si weyes, hasta parece que se les pego un hielo el la trompa (rio al ver sus labios hinchados)

Aldo- (se levantó de inmediato tomando la mano del menor mientras caminaba para irse) No digan pendejadas y mejor vámonos.

_Roier le dió una última mirada a el Mariana sonriendo en grande al comprender que estaba pasando, saco su celular empezando a teclear frenéticamente "Por fin se nos hizo la boda cabron" mando aquel mensaje a su amigo quien de inmediato comprendió a qué se refería "Al fin se dieron cuenta" respondió de vuelta el más alto_