La Dama Del Oeste (sesshome)

Día con sesshomaru.

Aome –gracias sesshomaru-san. - sus mejillas se colorearon

¡Recibí un elogio de sesshomaru!

Aome guardo ese momento en su mente, la forma en que lo dijo, su cara, su tono de voz. Si, lo guardara por siempre después de todo no sucederá de nuevo.

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Aterrizaron bastante, muy muy lejos de aquella pelea, aome se bajó de ah-un con cuidado de no lastimar sus pies dejando su mochila sobre el demonio, y se sentó en un árbol, para su sorpresa sesshomaru se sentó en el árbol de al lado.

A:Bueno eso es normal en sesshomaru, creo.

Lo poco que sabía de el eran: sus ataques, demonio puro, señor del oeste, hombre de pocas palabras, orgulloso hasta los dientes, con un ego más grande que el sol y que le gusta sentarse debajo de árboles. Enumero distraída.

Río viendo cómo rin le ponía a la fuerza una corona de flores a jaken mientras esté pataleaba y le decía que lo dejara en paz.

Sesshomaru la miró curioso preguntándose el por qué de esa risa, se paró y antes de hacer nada tomo a la sacerdotisa y la echo en su hombro.

Aome –¿?

Sesshomaru –jaken.

Jaken –¡si amo bonito! - monto a la niña en ah-un y se subió en el dragón

Comenzaron a volar de nuevo.

A:¿A donde vamos? ¿Esto se considera secuestro? -suspiro–supongo solo fue un pequeño descanso.

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Llevaban varios minutos volando hasta que pasaron una barrera demoniaca, llegaron a un castillo pequeño de tres pisos era completamente blanco con tejas y columnas rojas. Las puertas estaban echas de hueso y un metal color bronce, habían pequeñas plantas por todo el lugar

A:No sabía que los demonios tenían esos conocimientos, se parece a un santuario que visite en mi época, supongo que están más avanzados que los humanos.

Aome –jaken ¿Donde estamos? - pregunto aún en el hombro del daiyokai

Jaken –es uno de los castillos de viaje del amo bonito.

Aome –vaya es muy bonita - uso su genji para traer sus mochilas, ahora que tenía ese poder podía usar dos, la de siempre más que pesada y otra más pequeña rosada.

Sesshomaru camino hacia dentro con aome aún en su hombro mientras atrás venían levitando las mochilas y claro rin y jaken siguiendo los. Mientras el peliblanco caminaba hacia quién sabe qué, aome veía el interior del castillo, el piso era de madera blanca bellamente organizaba, algunos muebles muy bonitos, sillones llenos de pieles, armas y cuadros.

A:Confirmado a sesshomaru le gustan las pieles..y... necesito el número de su decorador!.

El demonio camino hasta una habitación como una sala había una mesa en el medio y algunos dibujos y armas en las paredes. Dejo a la sacerdotisa con delicadeza en el suelo y se quedó en la puerta mientras rin y jaken entraban en la habitación. La azabache puso las mochilas en el suelo.