Domination // JJKxKTH

E l e v e n

Cuarto Acto: Las rosas tienen espinas

...

Bueno. Taehyung no admitiría nunca, jamás, pero jamás en su vida, que amaba en demasía ser atendido como un niño pequeño y flojo por Jungkook.

Luego de haberse pegado la peda despechada de su vida, Jungkook lo cargo como un bebé hasta su gran casona y lo atendió con esmeró, muy consciente de que Taehyung aun seguía siendo una bomba de tiempo y que esta podría explotar en cualquier momento ante una mínima mala acción o palabra que hiciera o dijera Jeon.

Porque perdonado estaba, claro que sí. Pero Kim Taehyung era un rencoroso y aun mantenía su ojo en sangre con toda esta situación.

Pero... ¿porqué era así de sanguinario cuando le mentían o sentía que lo dejarían?

Pues... Kim Taehyung tiene traumas de abandono, su padre casi nunca estaba en casa, su abuelo no podía hacer mucho por su vejez y fue a la marina muy joven... lo que menos esperaríamos de Taehyung es que fuera una persona cuerda y mentalmente sana, a pesar de tomar terapias en su tiempo, las heridas seguían ahí, cicatrizadas pero latentes, listas para abrirse ante el mínimo daño que se le hiciera a estas nuevamente. Sumándole que su nuevo trabajo no era lo mejor del mundo, en aspectos morales y de culpabilidad por lo que hacían, así que bien, bien pero bien, de la cabeza no estaba y él lo sabía muy bien.

Además, le prometieron lealtad y él cumplía, por lo que lo mínimo que podía esperar de Jeon Jungkook es que le pagará con las mismas acciones, ya que todo esto de ser pareja se trataba de dar y recibir, de la reciprocidad de las acciones, por lo que en menos había cabida en todo esto era ser desleal y un mentiroso, porque esos juegos no iban con Kim Taehyung.

Pero, en estos momentos las copas lo estaban sobrepasando un poco y lo que menos quería era seguir pensando en esta situación que lo hacía hervir en ira, ya que si seguía dándole vueltas, sus neuronas terminarían como huevos fritos, así que, como buen chico, se dejo bañar por Jeon y lo dejo que hiciera todo por él, ya que era lo mínimo que se merecía después de todo este escándalo.

Aunque había algo de lo que si estaba cien por ciento seguro Taehyung.

Y es que le darían la follada de su vida por ser un mocoso malcriado, ya que claramente podía ver las intenciones macabras de Jeon brillando en sus ojos zafiro, como un peligro silencioso que se sentía latente en el ambiente y eso era un hecho.

Pero bueno, ¿quién era él para negarse?. También se merecía que mínimo le dieran otra follada de su vida, no lo negaría.

— ¿Porqué tu mano está tan herida?— preguntó Jeon mientras cambiaba el vendaje viejo puesto sobre su mano dañada.

Taehyung se encogió inocentemente de hombros y sonrió chiquito, como si no matara a ni una mosca.

— Porque en mi manita reprimi todas mis ganas de querer matarte cuando te vi con esa zorra— respondió como un niño totalmente inocente de sus terroríficas acciones.

Jeon lo miró feo al escuchar eso, antes de seguir curando las cortadas. Tenía que ser delicado ya que al parecer, Kim seguía con su drama y este se quejaba en voz alta cuando ni siquiera Jungkook había tocado una de las heridas con la gasa bañada en suero.

Luego de eso, fue recostado en la cama de Jeon mientras este se iba a bañar, así que Taehyung se amurro entre las almohadas, pensando en todo lo que ocurrió este día mientras esperaba con miedo latente a la bestia de su novio.