☆○o𝙏𝙃𝙀 𝙁𝙄𝙁𝙏𝙃 𝙒𝘼𝙑𝙀o○☆
→˚₊· ܴೈ ━La humanidad no puede creer que algo va a suceder hasta que sucede❞
Dónde Cassie Sullivan le da un nuevo propósito de vida a Max.
Después de perderlo todo Max decide ayudar a una hermana a encontrar a su ú...
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Han pasado cinco meses y ni siquiera estoy segura de si la cuarta ola es humana, una especie de híbrido o los Otros en persona.
Hay un arroyo cerca de nuestro intento de campamento, pero a Cassie le preocupa que esté contaminado; si lo piensas bien tiene sentido. Privarnos de agua potable sería una forma excelente de barrernos por completo.
Por eso tenemos una excursión semanal para ir a buscar agua. Así que una vez a la semana Cassie toma su M16 y yo el arma que me dejó mi papá y salíamos al bosque a pie camino de la interestatal. A dos kilómetros al sur, nada más tomar la salida 175, hay un par de gasolineras que tienen tienda. Cargamos con todas las botellas de agua que podamos y, si tenemos suerte, algún bocadillo olvidado. Siempre regresamos a toda prisa antes del anochecer. El mejor momento para moverse es el anochecer. Nunca he visto un teledirigido a esas horas. Tres o cuatro durante el día y muchos más por la noche, pero nunca al anochecer.
En cuanto entramos por la puerta destrozada ambas nos miramos, ninguna dijo algo pero sabíamos que algo había cambiado aunque relativamente no había nada distinto.
La tienda parecía estar exactamente igual que la semana anterior: las paredes cubiertas de grafiti, los estantes volcados, el suelo lleno de cajas vacías y heces secas de rata, las cajas registradoras reventadas y las neveras saqueadas.
No logro entender por qué la gente se había llevado las cervezas, los refrescos, el dinero de las cajas y los rollos de billetes de lotería y, sin embargo, había dejado allí los dos estantes cargados de agua potable. No mentiré que estoy agradecida de que el agua esté ahí, de no ser así no tendría nada que beber. Pero no paraba de pensar en los idiotas que habían sido, ¿En qué pensaban? ¿«¡Es el Apocalipsis alienígena! ¡Corre, toma las cervezas!»?
Enserio que todo parecía normal pero había algo. Algo había cambiado.
No supe en qué momento Sullivan tomó su M16 pero copié su acto y empuñe mi arma.
No sé si Sullivan había matado a alguien antes de que termináramos juntas pero yo sí. La humanidad es cruel con el que cree que es el más débil, la primera noche sola alguien intento... Alguien intentó hacerme daño y yo le volé los sesos. Con todo, aunque sabía que había intentado lastimarme, no podía evitar sentir miedo y culpa. No había sido cualquier cosa, le había arrebatado la vida a alguien.
Me concentré en el silencio de la tienda abandonada, escuché atentamente. Algo estaba cerca. Me alejé un paso de la puerta y un pedazo de cristal roto crujió ligeramente al pisarlo.
