Alma Fría, Spark Cálida. || Transformers Prime||

Capitulo 2.- ¿Aliado o Enemigo?

Un nuevo sol salía de entre las montañas, dándole los buenos días a Jasper Nevada, los niños se encontraban con sus guardianes en la base autobot. Extrañamente no había avistamiento alguno de los decepticons, transcurría el día con tranquilidad, una que fue quebrada por cierto agente de tez morena.

-¡Prime!- exclamó con el tono de voz elevado.

Si no fuera por que Optimus sabe guardar muy bien sus emociones, estaría mostrando una cara de fastidio por los reclamos del agente Fowler.

-Agente Fowler ¿Que es lo que ocurre?.-

-¿Y me lo preguntas a mi? Llego a mis oídos un mensaje donde me comentaron que una motocicleta azul, un deportivo amarillo y una camioneta verde andan corriendo por las calles de la ciudad como si fueran caballos desbocados.-

Optimus solo dirigió su vista a los presentes, con su mirada dando a entender la pregunta que no dijo.

Bumblebee solo emitía sonidos, tratando de dar una excusa, pero no tenía en claro una, Rafael solo bajaba la cabeza tratando de no ponerse nervioso ante Prime. Arcee miro a Jack y este emitió la acción del menor. Nadie hablaba, pero la presión en la mirada del líder era tanta que el Wrecker no pudo contenerse más.

-Lo sentimos, nos estaba entrando el aburrimiento y decidimos hacer unas carreras.- se excusó.

-¡Bulkhead!- exclamaron los niños y el Camaro en pitios, Arcee sólo llevó su mano a la cabeza.

-A pesar de sentirse intranquilos en la base, hay otras maneras de pasar el tiempo, al hacer lo que hicieron solo pondrían en peligro sus identidades y ocasionar accidentes en las vías de transporte humanas, que no se vuelva a repetir.- sentenció el Prime.

-Ya lo escucharon, salgan a conducir tranquilamente o jueguen a las charadas.- comentó el moreno, los autobots solo lo miraron a ver incrédulos, el agente Fowler podía ser misterioso e incomprensible algunas veces.

-¡Es una grande idea!- argumentó Miko. -Podríamos salir un rato a conducir tranquilamente por las tranquilas calles de la tranquila Jasper Nevads, ¿verdad?.- miro a ver a sus compañeros para ver si captaban sus intenciones.

No era ingenua, observo que el agente Fowler se diría a Ratchet, eso significaba una cosa, le pedirá que les ordenara arreglar la base y a los bots a patrullar, un pequeño castigo por la travesura que hicieron.

-No lo sé Miko, ya escuchaste a Optimus, no podem...-

-Adelante pueden ir, pero con cuidado, traten de no ser muy llamativos para el ojo humano, pueden tomarlo como un patrullaje.- dijo Prime, el médico autobot y el agente sólo lo fulminaron con la mirada, pero este ni se inmutó.

Definitivamente, si alguien comprendía las cosas mejor que nadie era Optimus. Eran jóvenes, cometían errores, pero ponerlos a limpiar toda la base de arriba a abajo le parecía una idea muy cansada, sobre todo que mañana tenían que ir a la escuela temprano.

-Optimus no ayudas mucho ¿sabes?.- le comentó el doctor, este solo puso una mano en su hombro y se marchó a su cámara de recarga.

-¡Vamos!.- dijo emocionada la niña. Los 6 salieron a "patrullar" como les había ordenado su líder.

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En alguna parte de Jasper.

Un auto deportivo, recorría las carreteras desiertas de aquella ciudad, ¿su misión? Saber más sobre el paradero de ambos bandos, necesitaba saber si el estaba entre el equipo del bando bueno, solo así podría confiar y unirse a ellos.

Una llamada hizo que volviera a la realidad de sus pensamientos.

-¿Donde estas?.-

-Patrullando.-

-No comprendo qué haces patrullando a estas horas, ¿que podrías encontrar? Además llamó para reclamar que no me obedeces a mi, pero si a los militares, eso es cruel.- pregunto la voz rasposa del hombre mayor.

-Padre, por favor. Si te confié el secreto del descubrimiento de que ambos bandos estaban en la tierra fue para que te lo gusrdaras, ¿porque le dijiste a los militares? Claramente fue tu culpa que me mandaran a patrullar e investigar más, aparte son las 6:39 pm, no es tan tarde.- cuestiono la fémina divertida.

-Por tu seguridad.-

-¿Mi seguridad? Y dígame, cómo exactamente serviría eso para mi seguridad.- pregunto un poco disgustada.

-Mi luz, sabes perfectamente que hice un trato con ellos, tus servicios y discreción, por tu seguridad y la promesa de que se lleven a la tumba ante la humanidad el secreto de que un mecanismo robótico de otro planeta es mi hija y vive en una base militar de Mexico.-

-Se que lo haces por mi bien, que deseas cuidarme y protegerme, razón por la que no les has contado todo sobre mi y mi especie. Pero enserio necesito saber si el esta aquí y qué hay todavía esperanza para mi gente.-

-¿El exactamente? ¿No hay acaso otro robotito que se crea muy listillo y sepa controlar al lado bueno?

Ella solo soltó una pequeña risa por la ocurrencia de su padre. Lo quería, en sus peores momentos el le sacaba una sonrisa con esa forma tan "escandalosa" de hablar.

-Si padre, el es el único que conozco que podría guiar bien a los de mi especie y recobrar la gloria de mi planeta, aparte si no es el yo...tendría que.- comentó con un hilo de voz roto.

-Oye...tranquila, no pasará eso, tengamos fe de que el bando bueno tiene a su jefazo para guiarlo, tú tranquila y yo nervioso.

Otra risa, sin duda ese hombre era un haz de palabras elocuentes. Un pitido resonó en su radar, una señal.

-Padre te veo en la cena, detectó proximidad.- dijo un poco más seria.

-Cuídate mucho por favor, cualquier cosa llámame.-

-Si, no te preocupes.

Acelero todo lo que su motor daba, llegando a un terreno rocoso, donde pudo visualizar mejor todo a su alrededor, más abajo logró distinguir las marcas de los bots, aún ellos dando vueltas como desenfrenados, obviamente "divirtiéndose".

-Autobots...- optó mejor por seguir espiándolos, podría escuchar información valiosa o simplemente ver si podría confiar en ellos.

Tal vez su creador le haya dicho que confiara en el bando autobot, pero no podría estar segura. Era la primera vez que se encontraba con alguien de su especia desde hacía años en los que llegó al planeta tierra. Algo en su chispa le decía que hablara con ellos, pero algo en su procesador le decía que no. Su padre le dijo que si llegara a encontrarse con los malos, huyera y con los buenos, que no confiara tanto en ellos.  Entonces ¿A cual debería hacerle caso?
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