Alma Fría, Spark Cálida. || Transformers Prime||

Capitulo 22.- Separados y desdechados

Con los autobots esparcidos, Jasper siendo gobernada por Megatron y Optimus desaparecido, pocos planes e ideas se le ocurrían a la femme.

Habían estado conduciendo por días, no sabía el rumbo al que iban, solo seguía a Ratchet. Sumergidos en un tortuoso silencio, no entablaban conversación alguna con el médico, el cual tenía un profundo miedo por la situación con Optimus, un profundo enojo por la destrucción del cerrojo omega y un profundo orgullo dañado ante la derrota de la insignia autobot.

Conducían desde hace horas, ya la femme no sabía cuántas habían pasado exactamente, el humano no había descansado ni ingerido alimento en esos días, aún en su modo vehicular dentro de ella podía escuchar el sonar del interior de Samuel, en la parte baja de su pecho para ser más exactos, donde ellos almacenaban su energon llamado "comida". Se sentía culpable, desde que ella renunció a sus labores en Mexico y se llevó consigo al humano, había estado pensando muy bien si seguir a su lado o tratar de no involucrarlo en sus labores como parte del equipo Prime, le dolía que el hombre mayor de edad arriesgara su vida y su tiempo por ella, pero también le dolía pensar en alejarse de él. Después de todo él la cuido por 30 años exactamente, le había tomado un profundo cariño a ese humano. Pero cuando vio con sus propios ojos la situación que pasaron con el cerrojo omega una desesperación inmensa le entró al procesador.

-Lo siento mucho señor Samuel.- decidió hablar por fin la femme.

-¿Que? ¿Porque Sunstone?.-pregunto el humano.

-Por meterlo en todo esto. Pensé que...si lo dejaba en su casa y no lo llamaba se alejaría de mi y con eso hacer primordial su seguridad. Ahora no ha comido nada, no a descansado, huye junto conmigo en un conflicto en el que no tiene culpa alguna. Viéndolo de esta forma...no se que hubiera pasado si usted...-

-Sunstone, entiendo que pienses así. Estoy enfadado por no haberme hablado, creí que estarías ocupada o algo. Estoy molesto si, pero tu preocupación por mi me hace feliz al ver que todavía me aprecias. Te dije que me quedaría a tu lado sin importar que. Preferí venir aquí contigo en vez de quedarme en esa absurda y aburrida base en Mexico por que quería estar a tu lado. Coronado lo dijo bien, no me separarían de ti fácilmente. Se que...las últimas horas han sido duras para ustedes, pero es necesario que esté aquí presente contigo. Aun si mi vida corre peligro, como lo dije en tu mundo, daría mi vida por ti.- exclamó. La femme emperezo a sollozar.

-No sabe lo que sus palabras significan para mi...realmente lo necesitaba. Optimus y Wheeljack ellos...están muertos. Los autobots están con mucho peso encima y en desventaja con los cons. No quiero ni imaginar si alguno ya fue capturado.-

-Intenta ser positiva como siempre lo eres querida. Estarán bien.- exclamó colocando su mano en el volante de la femme.

Seguían conduciendo, ¿a donde iban exactamente? No lo sabía. Desde que salieron de la base y tuvieron esa pequeña discusión el médico no le ha dirigido la palabra. Para la sorpresa de Samuel su hija no se sentía mal por eso, sabía muy bien Sunstone no toleraba que un amigo o compañero le dejara de hablar por un buen lapso de tiempo, su inseguridad le carcomía los circuitos y siempre trataba de arreglar las cosas pidiendo disculpas, aun si no tenía la culpa de nada, pero a estas circunstancias la femme comprendía y sabia el por qué el médico no le hablaba y respetaría eso. Llegaron a un depósito de chatarra, en plena luz de la luna el médico por fin se dignó a transformarse. Ella lo imitó una vez que su padre bajó de ella.

-Ratchet.-dijo acercándose a él lentamente.-Lamento el haberte gritado antes de...salir de la base.-exclamó.-También entiendo que estes enfadado, pero ¡no hay que perder la esperanza! Nos reuniremos con los demás e idearemos un plan contra darkmount y contra Mega..-antes de terminar el médico se giró rápidamente a verla con un semblante serio y hecho furia.