Capitulo 4

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El collar era un lobo aullando a la luna en el fondo, ese collar representaba la amistad, la hermandad que ambos habían forjado en tan poco tiempo, parecía que el destino ya tenía previsto como sucederían las cosas para sus hijos, que congeniaron con solo una mirada.

El collar era un lobo aullando a la luna en el fondo, ese collar representaba la amistad, la hermandad que ambos habían forjado en tan poco tiempo, parecía que el destino ya tenía previsto como sucederían las cosas para sus hijos, que congeniaron ...

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Al principio ellos mismo se sintieron un poco confundidos con sus sentimientos, pensando que quizás ellos eran destinados, porque se entendían a la perfección, una sola mirada de ambos lo decía todo, no había necesidad de palabras, ellos sabían que hacer.

Con el pasar de los años y al conocer a sus destinadas, comprendieron que solo era su hermandad, a pesar de la traición que hubo de parte del líder Wang, ellos no rompieron su amistad, al contrario la lealtad de Ziteng, forjó aún más fuerte ese lazo que se volvió irrompible.

Fue por su amigo Wang Ziteng, que Xiao Fengmian supo de la emboscada que harían los demás reinos para derrocarlos del poder que tenía su clan, ellos ya están preparados y cada uno en su lugar, cuando llegaron los demás.

El collar estaba echo de plata pura, el lobo espiritual en el, representaba a su mejor amigo, su hermano del alma Wang Ziteng y la luna, la luna llena representaba a Xiao Fengmian, el rey vampírico.

El collar era un talismán de protección contra las fuerzas negativas, habían unido sus poderes para lograr hacer tal collar, significa un pacto entre hermanos.

Era su manera de dar a conocer que el otro necesitaba de su ayuda y un aviso que estaba en peligro, el cual también significaba que quizás nunca más se volverían a ver.

En el momento que terminaron de hacer ambos collares, se dijeron que se lo entregarían a su primogénito en un momento dado y que este los buscaría para protección y solo ellos sabrían que eso también significaba una cosa más, que el dueño principal había muerto.

Las feromonas de Xiao Fengmian inconscientemente se descontrolaron, el vino tinto se amargo y el tabaco se volvió igualmente amargo y picante, debido a su tristeza y dolor, que sin querer salían a flote.

Sus lágrimas se desbordaron por sus mejillas y su cuerpo se debilitó, sino fuera por su hijo Xiao Zhan, que reaccionó a tiempo para detenerlo entre sus brazos, se habría caído del impacto.

- Papá, mi amor, rey Xiao - se escuchó la preocupación en las cuatro voces que le hablaron al rey al ver su estado.



- Dime qué tienes mi amor - la reina cuestionaba con preocupación, soltó sus feromonas de vainilla con chocolate blanco, para tranquilizar a su esposo, su alfa, su rey.



- E..s es Ziteng mi amor - con su mirada de dolor, la reina Xiao pudo entender lo que ese collar significaba para ambos.



- Tranquilo mi amor - lo abrazó fuerte y susurro cerca de su oído - lo encontraremos no creo eso, sabes que el es fuerte, tranquilo si - le dio un beso en su mejilla.



- Darren, mi niño, dime qué pasó - cuestiono la reina Xiao, ya que su esposo no podía del dolor que sentía, ella por medio de su lazo podía sentir sus emociones.

Los ojitos del lobito se pusieron acuosos, el nudo en su garganta no lo dejaba hablar, con su omeguita seguían buscando el lazo con sus padres, pero no había ningún rastro de ellos, no soportó más y sus lágrimas se desbordaron.

Johnny y su alfa no soportaron ver de esa manera a su destinado y corrió a darle un abrazo y consuelo, soltó su aroma para tranquilizarlo, los reyes Xiao abrieron sus ojos en sorpresa al notar tal acción.

Pero así mismo también, para ambos a pesar de la situación no pasó desapercibido como su amado hijo se tensó y frunció su ceño al ver lo que hacía su amigo.

- Darren, dime Carman te enseñó como usar tus poderes de brujo?



- Si, rey Xiao.



- Te molestaría, mostrarme lo que sucedió hace tres días.



- Queee, tres días, yo que eh echo en ese tiempo, debo regresar buscar a mamá y papá - sollozaba fuertemente y aferrándose al abrazo del alfa.



- Si mi niño, estuviste inconsciente durante tres días, si Jhonny y mi hijo no te encuentran, no se que hubiera sucedido, que fue lo último que sentiste al caer en la oscuridad.



- Yo - sollozo fuerte, apretando su pecho en el lado de su corazón - deje de sentir el lazo que me unía a mamá y papá - su respiración se entrecortó y volvía a tener un ataque de pánico al recordar esos momentos.



- Tranquilo, mírame Darren - susurro suavemente Johnny, tomando entre sus manos el rostro del lobito - eres fuerte mi Omega, encontraremos a tus padres así que tranquilo, respira conmigo - decía y el lobito le seguía el ritmo de su respiración hasta que se tranquilizó.



- Rey Xiao - suspiro profundo el lobito - míreme a los ojos por favor, no aparte su mirada, le mostraré lo que sucedió ese día.



- Claro mi niño, te prometo al igual que Johnny, encontraremos a tus padres.

Ambos asintieron ante tal promesa, el rey Xiao, pudo ver a través de la mirada de Wang Darren todo detalladamente.

Desde que la nana de Wang Ziteng, quien era una chamán muy reconocida de la manada le decía que Wang Darren era el elegido de la profecía, algo que el se sorprendió también.

Su madre en un tiempo cuando eran aún niños con Ziteng y jugaban juntos en el colegio, les contaba esa leyenda, ellos les fascinaba escucharla, para ellos solo era un cuento más de su madre.

Así que ese era el destino de ambos, por esa razón ellos congeniaron tan fácilmente si desde el principio de la creación estaban destinados hacer familia.

Su corazón se partió al ver cómo su amigo dio un gruñido fuerte, antes que su cachorrito saliera a todo dar, logro ver el golpe que le dio el líder Wang en el cuello a su propio hijo.

Algo que llamo la atención del rey, fue como que si algo hubiera sido inyectado, pero el miedo del lobito no logro ver más, pero eso fue suficiente para el alfa del rey Xiao para querer venganza hacia su hermano y su esposa.

- Eso fue todo rey Xiao - susurró desconsolado el Omega.



- Gracias mi niño, no te preocupes, quiero que ese collar vuelva a tu cuello, no te lo quites por nada del mundo Darren, desde hoy eres parte de nuestro clan, vivirás con nosotros como un hijo más de los reyes Xiao.



- Gracias rey Xiao, no tengo como pagarle.



- No tienes nada que agradecer, tu padre y yo somos como hermanos y ese collar es el pacto de nuestra hermandad, así también es para protección, contiene el poder de tu padre y mío, al igual que este que cargo yo - lo saco debajo de su camisa y se los mostró.

Desde ese día los reyes Xiao, empezaron a buscar a sus amigos, Xiao Fengmian le mostró a su esposa todo lo que el veía a través de los ojos del Darren.

- Hola, soy Huang Johnny y se que tu lo sabes y lo sientes al igual que yo, somos destinados - susurró con orgullo el alfa, presentándose ante el Omega.



- Gusto en conocerlo alfa Johnny, ya sabe mi nombre soy Wang Darren - un sonrojo pinto las mejillas del hermoso y tímido Omega.



- Vamos Johnny, deja respirar un momento al niño - exasperó el príncipe - Hola mi nombre es Xiao Zhan, como verás soy el príncipe alfa del clan, mejor amigo de este fanfarrón a tu lado - se presentó observándolo de una manera muy intensa, a pesar que había escuchado que era el destinado de su amigo, algo en ese lindo y tímido Omega le llamaba la atención a su alfa.



- Mucho gusto príncipe - susurró y a la vez, abrió sus ojitos en sorpresa, era él, el príncipe del que hablaba la profecía, sería su yerno, el futuro esposo de su hijo - espero que nos llevemos bien príncipe - eh hizo una reverencia con su cabeza, ya que aún estaba acostado en el cuarto y tenia un suero puesto aún.



- No es necesario las reverencias niño Wang, estamos en confianza - sonrió ladinamente y algo coqueto.



- Cálmate Xiao, te recuerdo que aquí estoy yo y soy su destinado que no se te olvide - lo saco de sus pensamientos su mejor amigo.



- Aish, como arruinas los mejores momentos Johnny.



- Tu mocoso, respétame, soy mayor que tú.



- Y yo soy tu príncipe - sonreía juguetonamente a su amigo, le gustaba verlo molestó, siempre lo hacía para sacarlo de sus casillas.


El Hijo de Wang DarrenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora