//Capítulo 6\\

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Diario de Joel Miller:

Mediados de verano de 2004.

Esto me parece una tontería, por no decir algo innecesario, pero algo en mi mente me decía que lo hiciera. Cuando era joven utilizaba la música de forma de desahogo, ya fuera tocar la guitarra o escuchar música Country o Pop para subirme el ánimo o simplemente relajar mis sentidos y pensamientos. Tommy me ha aconsejado hacer lo mismo, pero con la escritura. Por suerte, hoy estamos en una de la parte de las afueras de Texas, y nos encontramos una gran oficina, que por suerte no fue muy atacado por el virus que se encuentra amenazando actualmente a la tierra, o al menos desde hace un año.

En este lugar pude encontrar una agenda, apenas utilizada del año 2003. La verdad es que algo complicado centrarse en que año estamos cuando todo el escrito está centrado en el pasado. Los utensilios para escribir los he tomado de bolígrafos y lápices que estaban por los cajones y mesas. Claramente, no nos centramos en esto único, ya llevamos un par de noches en este sitio, todo este desocupado, y ya sacamos los cuerpos de los caníbales por la puerta para poder ponerlos en un tipo de cuneta cercana. En este sitio había demasiadas cosas, desde una cafetería repleta de alimentos en la planta baja, hasta alguna que otra pistola en los cajones más ocultos. Nos pareció sorprendente encontrarnos eso en un establecimiento, pero podíamos suponer que ya habían pasado por diversos momentos difíciles en esta empresa.

Hasta ahora, solo he matado a personas con el virus, sigue siendo difícil, no es algo facil de tragar cuando te recuestas por la noche y antes de intentar descansar piensas en todo lo sucedido. Cuando ves sus ojos inyectados en sangre, sus huesos llegando a sobresalir, su boca llena de hilos, que son pertenecientes a un hongo. Sí, hongo, ¿suena extraño, no es así? Hasta 2003 solo trataba a los hongos como alguna enfermedad que podía transmitirse si tomabas las decisiones de higiene incorrectas. Este caso lo supimos gracias a un médico que nos encontramos en la ciudad de Texas, nos contó más o menos lo que estaba ocurriendo. Supuestamente, desde pocos meses antes del choque final, se supo de hongo que estaba devorando el interior de las personas, desde su transmisión hasta la capa del cerebro, se los comía por dentro, hasta salir a la superficie. Cuando fuimos a su hogar, nos mostró tres tipos de etapas posibles, entre ellas estaba las que estamos viendo, personas a las que el virus les ha llegado hasta la parte del cerebro, y solo activan dos de sus instintos, contagiar y sobrevivir. La segunda etapa, era cuando el hongo comenzaba a devorar su exterior, teniendo deformidades por su cuerpo. Nos mostró imágenes de hormigas, quienes ya tenían este virus desde hace años, en la imagen se observaba como un hongo atravesaba su tórax, al igual que por otras partes del cuerpo. Por último, nos comentó que la última podía ser que todo el hongo se adueñará del sujeto. Creando solo una manta de protección por hongos.

Quisiera escribir de otros avances, pero no puedo permitirme nombrar de ello todavía, puedo decaer, y no es el momento. Las cosas están difíciles, desde lejos hemos visto como la gente lucha por sobrevivir de la peor manera posible, y eso no quita que nos pueda pasar en cualquier momento. Como mañana, u hoy mismo, todo se puede curvar en tan solo unos segundos, ya lo he comprobado bastante durante este doloroso y espantoso año.

Bueno, no se cuándo volveré a escribir en este cuaderno, a lo mejor nunca. O a lo mejor le doy un segundo intento".

The Last Of Us. Otro camino.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora