Capítulo XXIII: Choque de mentalidades

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Los dos conjuntos se pusieron en sus posiciones, empezando así un segundo tiempo donde los silicianos comenzaron a aumentar aún más su agresividad en sus jugadas. No tenían intención alguna de atacar, si no de machacarlos hasta hacerles pedazos. Usaban las tormentas de arena para impedirles la visión y así darles toda clase de segadas y golpes. El partido fue transcurriendo y el empate seguía campeando en el marcador, aunque el Earth Eleven empezaba a estar muy dolorido por las sucias jugadas de Sílice.  Ni siquiera con la entrada de Víctor y Rika eran capaces de traspasar la línea defensiva de los de Sílice. Solo hacían que recibir golpes y entradas bruscas por parte de los rivales, que estaban dispuestos a destrozarlos.

-Ogar: Eso es, seguid machacando al Earth Eleven. ¡Hacedlos tantos pedazos que no puedan levantarse!

Inmediatamente Ogar se acercó a Riccardo, que estaba montando una contra, para placarle violentamente y robarle el balón. A continuación, mientras el jugador terrestre trataba de levantarse, lanzó un tiro fuerte raso hacia él, provocando que se volviera a caer al suelo muy dolorido.

-Así que nos queréis hacer pedazos, ¿eh? ¡Entonces yo no pienso contenerme! -pensó Dakkar-

Ogar pasó en largo hacia el delantero Shar Kiya, que sería cargado violentamente por el defensa Quintet con una durísima entrada, que tampoco fue sancionado con falta. Este le dio el balón a Dakkar sonriéndole de manera maliciosa, parece que tenían un plan. Dakkar le devolvió la sonrisa y se acercó a un rival, dándole el balón para instantes después empezar a darle patadas al esférico que tenía el otro en el pecho. Así pues, Dakkar levantó al siliciano para finalmente darle una última patada que dejó al oponente dolorido el suelo.

-Dakkar: ¡Prepararos, por que os voy a demostrar que a juego sucio no me gana nadie!

-Arion: ¡Dakkar, tienes que jugar limpio y no rebajarte a su nivel! -le regañó Arion-

-Dakkar: Ellos están dando palos todo el rato, así que no me quedaré de brazos cruzados.

Dakkar siguió avanzando por el campo sin pasar a ninguno de sus compañeros, simplemente con la intención de dañar a los silicianos que se le pusieran encima con balonazos o jugadas bruscas. Quintet hizo lo mismo, frenando los ataques de Silice con entradas sucias. Gracias a esto, el equipo ganó algo terreno, pudiendo rematar a puerta por mediación de Dakkar y sus peces voladores nivel dos, que fue atajado por el puño de arena del portero siliciano.

El despeje le cayó de nuevo a Dakkar, que sin embargo fue derribado por la supertécnica defensiva de Ogar, Maza Rocosa.

-Ogar: Así que pretendes jugar sucio tú también, ¿eh? Que sepas que a mí nadie me gana en eso, jeje. Un terrestre como tú no tiene nada que hacer contra mí. ¡Ahora es tu turno, te haré pedazos como a un enclenque! -lanzó un tiro hacia Dakkar, que para sorpresa de este pudo controlar sin caerse al suelo, aunque a duras penas-

-Dakkar: Gr-gracias por el pase, extraterrestre -inmediatamente cedió a Rika-.

-Ogar: ¿Te estás riendo de mí? ¡Vamos placad a esa terrestre, que no tire! -ordenó-

Entonces dos silicianos se lanzaron hacia Rika, levantando otra vez una tormenta de arena que le cegó momentáneamente, para así hacerle una entrada doble.

-Arion: ¿Estás bien, Rika? -le ayudó a levantarse-

-Rika: S-sí, esto n-no es nada.

-Arion: ¿No sientes nada al ver esto, K'aran? -se acercó y le preguntó al capitán siliciano-

-K'aran: Pero no nos queda otra, tenemos que hacerlo si queremos ganar.

-Arion: ¡Yo estoy jugando limpio, porque después no quiero tener remordimientos!

(Parada) Inazuma Eleven Go Galaxy: la amenaza intergalácticaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora