24. Fresa, no, limon.

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-¡MIRA ESE! ¡LO QUIERO DE FRESA! ¡NO, DE LIMÓM! ¡OOOH HAY DE OREO! ¡HAY DE NUTELLA! ¡MILKAAAAAAAA!

-¡Samy cállate, deja hablar a los mayores!-me regañó Dani divertido.-

-DIOS, ESTÁ EL HELADO MÁS BUENO DE LA HISTORIA. QUIERO EL DE KINDER BUENO, QUIERO ESE, EL DE KINDER BUENOOOOOOOOOO LO QUIEROOOOOO

-¡Samy deja de gritar! ¡Nos están mirando!-dijo Gisela.-

-Gisela, mira, ¡un pájaro!

-¿Dónde?-preguntó Patricia.-

-Ingenuas...-dijo Dani.-

-Dani, mira ¡Alejandro Sanz!

-¿¡DÓNDEEEEE!?

-¿A que duele?-le dijo Gisela.-

-Me has engañado, ya no te compro el helado de Kinder Bueno.

-Pues me enfado y no respiro.

A quien engaño, no quiero morir de asfixia por culpa de un helado.

-Oye, ¿dónde está Jesús?-preguntó Gisela.-

Dani y yo traguemos saliva ruidosamente y nos miramos, nos habíamos dejado a Jesús fuera.

-Ha ido al dentista...-dijo Dani.-

-Si, eso...-intenté decir yo sin reír al pensar que Jesús estaba fuera, ¿habrá conseguido entrar?.-

Nos sentamos en una mesa a comer nuestros helado. El mío era de nata, con una capa de kinder bueno y por encima unas galletas de oreo picaditas.

Me acabé mi helado en un segundo, mientras los demás no se habían tomado ni la mitad.

-¿Cómo puedes comer tan rápido?-me preguntó Patricia.-

-No sé, no tengo fondo.

Me puse a leer en wattpad con el móvil hasta que Dani me quitó el teléfono.

-¡Dani devuélvemelo!

-¿Qué he hecho yo?-preguntó ¿Dani?.-

-Soy Jesús, no reconoces ni a tu novio.

-¿Jesús no estabas en el dentista?-preguntó Gisela.-

-¿Yo? ¿En el dentista?-Jesús nos fulminó a mi y a Dani con la mirada, puede, solo tal vez, que nos hayamos olvidado de él...- Mi hermano y mi novia me dejaron encerrado fuera de la habitación, luego Samy hecho las cortinas y se olvidaron de mi. Por vuestra culpa me he refriado. ¿Cómo me dejáis fuera a las ocho de la mañana con un pijama mojado?

Gisela y Patricia se morían de risa.

-¿Cómo lograste entrar?-preguntó Dani.-

-La limpiadora me vió y me abrio. No se os olvida poner el cartel de "Entren a limpiar, por favor" pero si se os olvida que vuestro hermano barra novio está fuera en pijama.-

-Em...¿lo siento?-dije antes de que me entrara un ataque de risa.-

-No te perdono.-fingió enfadarse.-

-Pues no te compro un helado.-le dije.-

-Vale, esta vez haré una excepción y te perdonaré.

-¿Sabor?

-Vainilla.

-Cutre...-susurré.- Dani, dame el dinero.

-Genial, pago yo todo, como si fuera millonario.

Internada con ¿Gemeliers?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora