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Narra Giselle
Argentina, Buenos Aires. Aeropuerto de Ezeiza.

- Bueno, las voy a estar esperando allá. - Dijo Joaquín mirando las 3 valijas de cosas suyas. Ya era Lunes y se tenía que ir a Italia. Teníamos que dejar una vida acá.

- Te vamos a extrañar mucho estas 2 semanas mi amor. - Dije acercándome para prenderme a él en un abrazo. Me correspondió dejando besos en mi cabeza.

- Y yo a ustedes también, la falta que me van a hacer, vayan pronto eh.

El avión de Joaquín ya estaba en el aeropuerto y ya dieron el aviso para que los pasajeros de esa clase vayan subiendo.

Joa levantó a upa a Lionella para despedirse, ella ya estaba triste porque ya sabe reconocer que en los aeropuertos a veces nos despedimos.

- Te amo amor de papá. - Le dijo a Lio y le dio besos por toda la cara. Ella se reía.

- ¡Te amo más papá cucu! - Dijo pegándose a él fuertemente en un abrazo.

Joa la apretó fuerte antes de irse y la llenó de más besos, no quería despegarse de su lado. Se tomaron su tiempo y la bajó. Se acercó a mí.

Me agarró del mentón y se unió a mi boca en un beso muy suave y tierno. Pasaron unos segundos y nos separamos. Nos abrazamos fuerte y ya se tenía que ir.

- Las amo. Las amo muchísimo. - Dijo sonriéndonos alejándose poquito.

- Te amo, te amamos. Buen viaje mi amor. - Le dije con una sonrisa y él se fue hasta caminando, nos quedamos esperando hasta perderlo de vista. Yo alcé a Lionella que no entendía a dónde se estaba yendo el tucu. Me miró con una carita medio llorosa.

- Mamá. ¿Onde va papá cucu? - Me preguntó muy preocupada, y al darse cuenta que no volvía fue cuándo rompió en llanto. Se acostó sobre mi hombro y la llevé de ahí, no dejaba de llorar y nombrarlo, estas iban a ser 2 semanas muy difíciles.

Nos subimos al auto, ella iba en su sillita pero seguía llorando, no quería nada más que a Joaquín. Me ponía muy mal verla así, arrancamos el viaje a casa y por ratitos se callaba, después se acordaba que estaba mal y volvía a llorar, y así hasta que se quedó dormida.

Era muy temprano y ella casi no durmió, esperaba que durmiera toda la mañana. Tenía que sacarla del jardín, buscarle otro en Italia desde la distancia, pedir el pase. Tenía mucho por hacer.

Llegamos a casa y la acomodé en su cama. Por lo menos durmiendo iba a estar tranquila, a menos que sueñe también con Joaquín.

Tema Enzo, a pesar de que lo ignoraba, siempre me vuelve a mandar mensajes. Me pregunta siempre cómo está Lionella, si puede visitarla. Ahora no era la excepción. Estaba al pedo y le contesté un mensaje.

E.Fernández
en línea

Hola gigi buen día me
podés decir cómo está mi hija
por lo menos?
07:49

Está bien
08:21

Pensé que no me ibas
a contestar dios
08:30

ya te contesté
08:31

que está haciendo?
08:32

me muero por verla gigi
08:32

te juro q no sé que más
puedo hacer
08:32

ahora está durmiendo Enzo
08:33

estas sola entonces
08:33

¿por qué ella sí? ; enzo fernándezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora