Capitulo 1

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Well, the years start coming
And they don't stop coming
Fed to the rules and I hit the ground running
Didn't make sense not to live for fun
Your brain gets smart, but your head gets dumb

So much to do, so much to see
So what's wrong with taking the back streets?
You'll never know if you don't go
You'll never shine if you don't glow

Hey now, you're an all star
Get your game on, go play
Hey now, you're a rock star
Get the show on, get paid
And all that glitters is gold
Only shooting stars break the mold

All Star
Smash Mouth.


Camila cabello se arrodilló en el suelo al lado de su cama e inclinó la cabeza para su oración vespertina.

Su mano se deslizó a la pequeña cruz de plata alrededor de su cuello y su
pulgar frotó una trayectoria familiar en la lisa superficie.

Por varios minutos, susurró las palabras que había recitado desde que
era una niña, y luego terminó como lo hacía siempre.

Se incorporó del suelo, sus rodillas un poco rojas por el tiempo que duraron en esa posición, le dolieron un poco.

Su mira se dirigió a un lugar específico en la pared.

El sencillo traje marrón que llevaba colgado más de dos años a un lado de su cama señalaba su antiguo lugar junto al de las otras novicias.

A pesar de haber durado tantos años en aquel convento, nunca había
tomado los votos que completarían su viaje espiritual. Siempre fue su intención. Era su sueño. Lamentablemente no pudo continuar con el.

Se acercó al baño, donde pretendía hacer sus necesidades antes de bajar.

Salió de este una hora después, envuelta en una toalla, lista para vestirse e ir donde su madre.

Cuando bajó, la encontró preparando lo que sería el almuerzo de la semana de sus dos hermanos, a un lado estaba listo el desayuno.

Suspiro evitando pensar en en niñez. Si su padre hibiera sido una buena persona, las cosas serían diferentes ahora.

Diferentes para ella.

- Camila, quítate - su hermano mayor la empujó, provocando que esta tropezara un poco con el marco de la puerta - Te quedaste parada como una tonta. Deja de estar fantaseando.

- ¿Tu estas segura de que le enseñaste modales al idiota ese? - Camila se acercó a la cocina, abrazando a su madre por detrás - Buenos días, mama.

- Las monjas no deberían decir palabras como idiota - el también saludo a su madre con un fuerte abrazo.

- No soy monja - atacó molesta.

- No, por supuesto que no. Preferiste quedarte cuidando al viejo.

- Ni se les ocurra empezar una pelea ahora - les regaño su madre colocando el desayuno en la mesa.

Sinu miró la hora,

Camila se sentó, al igual que su hermano Scott.

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