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Prólogo

Hola, soy Andrea, toco piano, mi deporte favorito es el baseball estoy en primero de preparatoria, y soy adoptada.

Mi padre biológico llegó un día drogado, mientras mi madre y yo preparábamos la cena, yo tenía diez años; el,  agarró una pistola y le disparó a mi madre,y después de agacharme llorarla, él se acercó, me miró atentamente,y sonrió, sonrió, con una sonrisa que hasta años después entendí que era de una persona drogada... y él también se disparó.

*Flashback*

Mami y yo preparábamos la cena, cuando de pronto, se escuchó que alguien entró y aporreó la puerta.

-¿porqué me engañaste puta?- gritó papi.

-no sé de que hablas- le respondió mi madre con dulzura.

-¡a mi no me engañas  cabrona!- sacó un arma de su bolsillo- ¡te voy a matar!

-Thomas...- dijo mami mientras trataba de  acercarse a el. Pero, una bala salió disparada de la pistola, y se estrelló contra el estomago de mami. 

Mami estaba en el piso sangrando. Yo me senté de rodillas y le acaricié el cabello despertarla, pero no despertaba, y lloré.                                                                                                                                                     

-te voy a dar verdaderas razones para llorar, hija de puta- papi me apuntó con el arma.

-papi...

Pero después se apuntó a él, me sonrió, con una sonrisa para nada bonita, y se disparó.

Al ver a mami y a papi tirados en el piso, comencé a llorar aún más, hasta que unas personas con trajes negros entraron y me llevaron con ellos.

-¡no! Mami no se siente bien- grité.

Y me llevaron a un lugar, con niños por todas partes.

- hola cariño, yo soy la monja Adri, si necesitas algo, solo dímelo.

Al notar la ausencia de mis padres, empecé a llorar de nuevo.

Fin del flash back

Después de eso, me llevaron a un orfanato. Unas personas que no podían tener hijos me adoptaron a los trece años. Y se podría decir, que en esos momentos vivía feliz, tenia las cosas que necesitaba con las personas que necesitaba, era una de las mejores alumnas de mi clase, tocaba piano y era la bateadora principal del equipo de baseball... pero el recuerdo me seguía atormentando día a día... impidiéndome la satisfacción de estar feliz. Y yo, permanecía callada ante el dolor en el pecho que tenia en ocasiones... nadie tenia que saber que los recuerdos, atormentaban mi memoria... nadie tenia que saber que dolía...