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Para comenzar empezaremos con una historia sobre los destinados: Dos almas que se complementan y están unidas para toda la vida, pero que pasa si una vida no es suficiente para corregir los errores.

actualidad

El nacimiento de un ser siempre suele ser una dicha para la familia y en este caso los de Luque fueron bendecidos con un niño, de ojos amatista y cabello tan negro como la noche y pequeñas pecas en su rostro. 

Con el paso del tiempo eso joven creció y se encontraba en el momento de revelar su casta, la que le daría un aroma particular, toda su familia se alegro en tener otro alfa y el también, cuando llego el momento apareció su aroma un tenue olor a uvas se comenzó a desprender del joven, no era un aroma muy dulce pero le alegro.

Luego de que todos se fueran su madre le recordó que los alfas suelen ser fuertes y algo dominantes, pero que debía ser mejor, Vegetta sabia a que se refería su madre pues al ser una omega varios alfas la acosaron y eso no era agradable, el prometió ser mejor.  

-pero las promesan suelen romperse-

  Años después

Era una linda mañana nuestro joven Vegetta volvía de su trote mañanero cuando vio el gran camión frente a su casa, llamando su atención ya que la casa de al frente parecía tener nuevos vecinos, el le resto importancia y fue a su habitación para poder bañarse.

Pero al observar al otro lado se encontró con un chico alto de cabello blanco y ojos verdes como esmeralda, el se quedo observando al chico por bastante tiempo viendo como su rostro era iluminado por los rayos del sol, como su cabello se movía levemente, hasta que este sintió la mirada y antes de que lo viera se escondió, por primera ves Vegetta se sentía avergonzado, tenia una sensación rara y todo solo por observar a su nuevo vecino. 

Al pasar algunos días y observar debes en cuando -todo el tiempo- a su nuevo vecino, la madre de Vegetta decidió invitarlos a cenar, claro que cuando este se entero sintió de nuevo ese nerviosismo, esa sensación de como si se ahogara y le suplico a su madre que no lo avergonzara. 

Cuando vio entrar a sus nuevos vecinos sus ojos solo se quedaron posicionados en aquel chico alto de cabello blanco y hermosos ojos, que tenia un leve aroma a miel que se le izo imposible de ignorar, cuando sus ojos se cruzaron Vegetta sintió un mar de sensaciones y al observar mejor esos ojos sintió algo familiar en ellos haciendo que ignorara la conversación de los mayores y solo puso atención cuando este menciono su nombre Rubius. 

 

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Destinados     ~rubegetta~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora