✨Extra✨

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La calma había vuelto al extraño lugar. No había diosas, ni su hija, amigos. Tampoco hacía frío como momentos atrás. De repente la orilla del lago, y el bosque era un sitio completamente distinto. Hasta un poco más cálido y familiar.

Al recuperar la fuerza en sus piernas. Hisirdoux logro ponerse de pie. Vio al frente, y trago aire, para luego soltarlo con lentitud y calma. Y con esa misma actitud volteó para irse de ahí.

White, quien seguía olfateando la orilla del lago, vio con la calma que este tomaba la situación. Comenzó a ladrarle, dejando al descubierto la desesperación y dolor en su voz.

—¿Qué haces?— gruñó.—Debemos ir por ellos.

Corrió hasta Hisirdoux y lo tomo de la remera con el hocico. Él se detuvo pero no giro para verla.

—¿Qué quieres que hagamos? Se han ido.— murmuró.—No logramos salvar a nadie. Lo siento White.

Dio unos paso en dirección al túnel, con sus ojos conteniendo las lágrimas que sus propias palabras produjeron, y la realidad no ayudaba en nada. Pero algo hizo que se detuviera. Nenet paso a su lado, siguiendo un ruido burbujeante.

—¿Qué es?— pregunto al ver al lago.

Hisirdoux volteó, y vio lo mismo que ella.

—¿Burbujas?

De pronto, cerca de la orilla salieron al flote, dando grandes bocanas de aire, Galaga y Olivia. Esta última apenas manteniéndose a flote. Hisirdoux corrió y sin pensarlo salto al agua.

—Papá.— exclamó Olivia.—Ayudame.

  Estando cerca, ella se aferró a sus hombros como si fuera un salvavidas. No era buena nadadora y estaba seguro que algo así la mataría de un susto.

—Luciérnaga ¿Estas bien?

No dijo nada, solo se abrazó con fuerza a su cuello, enroscandos las piernas a la cintura del mago, como cuando era niña.

—Ya estás conmigo.— murmuró y le dio un beso en lo alto de cabeza.

Luego vio a Galaga, un tanto perdido.

—¿Estas bien?— insistió.

—¿Qué qué hago acá?— pregunto confundido.—No recuerdo ¿Qué pasó conmigo?

Con algunas complicaciones lograron salir del agua, e Hisirdoux no tardó en abrazar a su hija con fuerza. Esta tiritaba del frío, y lloraba por el dolor de cuerpo.

—Quiero ir a casa.— balbuceó contra su pecho.

Archive se acercó a ella con cuidado y le brindo algo de calor, sin embargo no hizo que llorara menos.

Galaga, sin saber mucho de cómo fue que termino en el lago, busco a alguien con la mirada. Nenet estaba enroscada a él, e Hisirdoux no hacia más que abrazar a su hija.

—¿Y ...?

Hisirdoux lo vio, y al instante corrió la vista. Esperaba no tener que decirle más nada, porque estaba seguro que las palabras le iban a hacer doler.

—Esperen ¿Qué es eso?— pregunto White.

Esta aún seguía al borde del lago, con un mínimo de esperanza.

Hisirdoux volteó, y vio lo que ella. En medio del lago, una suave luz rosa, como un pequeño espíritu, flotaba hasta que se hundió en el agua. Y pronto comenzó a burbujear.

—Galaga, cuídala.— dijo.

Se aseguró que Olivia se encontrara a salvo en sus brazos. De pie, se acercó a White, sin embargo no se detuvo. Algo le decía que debía estar allí, donde el agua se teñía de rosa. Se zambulló y nado tan rápido como pudo. 

Destinados. [Tales Of Arcadia, Au. Douxie X Oc]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora