El amor flechado del Lord Vampiro.

El amor flechado del Lord Vampiro. [Capitulo 20]

Llegando en una gran cantidad de caballos corriendo a toda prisa pude determinar con la vista la llegada de la rebeldía humana, sorprendiéndome pude determinar que estaban dispuesto a atacarnos.

Rey Davius: —¡Aseguren el castillo del Rey Demonio! ¡No perdonen a ningún ser con vida!

Lord Vampiro: —Finalmente decidieron atacar... cientos de ellos....

Encontrándonos en el balcón viniendo a toda prisa volando por el cielo era el mismísimo Lord Demons, que al ver la situación no podría creerlo.

Lord Demons: —Rudolf! Me entere de los detalles demasiado tardes, no sabes cuando te pediré perdón por esto.

Lord Vampiro: —Ya es demasiado tarde para eso, debemos asegurar las lineas del castillo para que no haya heridos.

Lord Demons: —Pero.... en mi camino hacia aquí, pude notar una extraña presencia emergiendo oculta en el ejercito humano. Por mi parte, los demonios están listo para ayudar con mi ejercito preparado deberíamos ponerle fin.

[Asia las afueras del bosque se encuentra un gran ejercito armado de puros humanos envuelto en armaduras y con lanza filosa.]

Capitán de la guardia: —¡Tercer pelotón, todo normal, señor!

Rey Davius: —¡Muy bien! ¡Manténganse en alerta máxima!

—Valla! que maravillosa linea de formación.

Rey Davius: —¿Con esto esta conforme? Como puedo invadir ese territorio derramariamos sangre.

—Eh? ¿Acaso mi poder hipnótico aun sigue sin funcionar?

[Tras alzar su mano y sostenerlo por el cuello utilizo una especie de magia en el, hipnotizandolo por completo.]

—Dime, ¿Te sientes mejor?

Confundido y con dolor, el Rey Davius responde: —S-si, g-gracias....

—Muy bien, ahora prosigue con la orden de ataque.

[Esquivados por armas de los archimagos, poco a poco empezaron a lanzar bolas de fuego, piedra que hacia un gran golpe en los alrededores del campo, al notarlo la gente del reino vampiro se estaba preocupando en querer escapar. Hasta cierto punto la barrera mágica que cubría todo el continente fue destruida por completo.]

Rey Davius: —Todos! Adelante.

[Entrando como una caballería desenfrenada, los humanos empezaron a destruir todo a su paso quemando las casas, esparciendo terror en todo el territorio, para obtener apoyo el Rey Demons envio a sus tropas para detener la invansion tratando de asegurar a los ciudadanos que no podía luchar, mientras mas se acercaban hacia el castillo mas invadan la ciudad.]

Lilith: —Mi señor! La guardia de los humanos han entrando al interior del castillo, denos sus ordenes para...

[Booom! Tras explotar una bomba entraron en fila de dos un gran numeros de soldados, seguido por el gobernante rey de los humanos quien llevaba su espada en mano hizo en apunte en dirección del Lord Vampiro.]

Rey Davius: —Rindete ahora, Demonio. Con esto ya no tendrás a donde acudir.

[Con una leve sonrisa observa la situacion.]

Lord Vampiro: —¿Hasta cuando dejara de jugar a los soldaditos? Jason!

[Aplaudir. Aplaudir. Paso. Paso. Aplaudir. Aplaudir.]

Jason: —Valla, valla. Valla. Para ser el poderoso gobernante de los vampiros como supiste que este escenario montando iba hacer obra mía.

Lord Vampiro: —Tu don de hipnotizar a otros les brinda la mayor parte de tu poder para hacer que hagan todo a acorde de tu voluntad, ahora dime. ¿De que Moral te atreves a invadir mi gobernación?

Jason: —Lo mismo que estuve planeando durante años, y es... Invadir el mundo humano hasta llevarlo hasta su destrucción y desatar una poderosa guerra de humanos vs demonios.

[Sorprendido se quedo el Lord Vampiro y junto a el se encontraba lilith que estaba furiosa. Pero de repente fueron embocados por un pequeño grupo de guardias humanos hipnotizado que le pusieron unos grilletes mágico que impedian su hajil movilización.]

Lilith: —Bastardo.! Como te atreves a traicionar a nuestro señor? Eres un traidor para nuestra raza.

Jason: —En eso te equivocas Lilith, yo en realidad le jure una gran lealtad a nuestro antiguo Señor e incluso el de ahora que gobierna en este mundo, pero... Por culpa de los humanos hemos sufrido la perdida de un gran gobernador y ademas... el horrible sufrimiento que hemos tenido que soportar durante décadas. ¿Acaso no lo recuerdas Lilith?

[Tras decir una gran razon de la verdad las dudas estaban presente en el ambiente, aprovechando ese momento hizo aparecer tras una dentellaste luz a un humano quien estaba atado con unas poderosas cuerdas de rosales que contenían espinas, al verlo el Lord Vampiro se sorprendió.]

Lord Vampiro: —Hiiro! Maldito. Suéltalo ahora mismo.

—Ugh! señor Vampiro.... [Se aprietan las cuerdas.]

Jason: —Tanto amor le has entregado a este inútil humano que prácticamente te has olvidado de una cosa muy importante.

Lord Vampiro: —Que quieres decir con eso....?

[Sonriendo, atrajo a Hiiro antes su presencia donde al notarlo asustado mostró en su rostro una malévola sonrisa en la cual con su mano lo introdujo al interior de su pecho, donde el dolor fue tan inmenso que un grito agudo se hizo escuchar en las paredes del castillo.]

—Ahhh! Duele! Agh!

Lord Vampiro: —Detente!

Jason: —Ja. Ja. ja. Un insignificante humano como tu, no debería recibir el amor de nuestro gobernador.

"Agh! Es tan doloroso... siento que me estoy quedando sin fuerza. ¡Alguien... ayúdeme."

[Al estar el borde del dolor Hiiro ya no podía mantenerse mas despierto, el señor Vampiro y Lilith no podía hacer nada ya que estaban haciendo retenidos por los guardias humanos que con su de sus grillete incluso su poder se le hacia imposible desafiarse. Pero tras un gran viento (Swoood) que soplo por sorpresa hizo que le cortara la mano logrando asi soltar a Hiiro que cayo desmayado en el suelo.]

Heroe: —Sentimos mucho el haber llegado tarde.