Jardín De Estrellas (Kookmin)

EXTRA: INICIACIÓN

—Pertenezco a una mafia muy poderosa. Mato gente, no sólo por placer, también para el beneficio de algunos. —Soong-joo no quitó su mirada seria de una pequeña Dahyun de ocho años quien se asustó ante eso.

—¿E-eso es malo? — preguntó con su voz chillona

—No, pequeña... — contestó caminando hacia ella y acariciando su cabello — Muchas personas hacen daño y yo me encargo de evitar que lo sigan haciendo.

—¿Usted ayuda a las personas buenas para que no les hagan daño?

—Algo así pequeña... — se alejó de Dahyun y se sentó en su sillón de cuero, abrió el cajón de su escritorio frente a él y sacó un arma — ¿Tú quisieras ayudarme a salvar a las personas buenas?. — preguntó cerrando el cajón manteniendo aún el arma en su mano.

—Si, yo también quiero ayudar — contestó la pequeña pelinegra con una gran sonrisa.

—Bien... — se inclinó un poco y presionó un botón del intercomunicador que estaba sobre su escritorio — Traiganlo. — ordenó y de pronto la puerta se abrió, dejando ver a tres guardaespaldas que sujetaba a un hombre de unos cincuenta años que tenía un traje costoso pero que ahora estaba destrozado y lleno de sangre.

—¿Quién es él? — preguntó Dahyun cuando arrodillaron al hombre en el medio de aquella oficina.

—Él... — Soong-joo soltó una risa sin gracias y fijó su vista en los ojos  negros del hombre que suplicaba con la mirada ya que su boca estaba con una venda — Él mató a muchos niños como tú y Jimin... Niños pequeños e inocentes que fueron violados y asesinados luego de destruir sus almas.

—¿Es un hombre malo?. — Soong-joo asintió y Dahyun, a pesar de ser niña, se enojó oscureciendo su mirada de solo imaginar a ella o Jimin siendo maltratados.

—Ahora sabes lo que se hace con los hombres malos, ¿No?. — Soong-joo le dio el arma a Dahyun quien la tomó entre sus pequeñas manos  y la analizó por unos segundos —Este hombre no merece vivir. La mitad de su dinero irá a un orfanato y la otra nos la quedaremos como recompensa por haber ayudado en eliminar un hombre malo.

—Sé lo que debo hacer con los hombres malos. — Dahyun se acercó al hombre que tenía los ojos abiertos como platos al ver a una niña pequeña a punto de quitarle la vida —Eres un hombre malo, no tuviste corazón al maltratar tantos inocentes... Mereces morir. — apuntó el arma directamente a su frente, justo entre sus cejas.

—Sólo presiona el gatillo, Dahyun. Así acabaremos con un hombre malo.

—Adiós, hombre malo. — un disparo se escuchó y pronto el cadaver del hombre estaba en el suelo rodeado de sangre que brotaba de su cabeza, justo donde recibió el frío y despiadado disparo —¿Lo hice bien?. — preguntó la pequeña Dahyun quién no mostraba miedo hacia el cuerpo inerte frente a ella, sólo se alejó un poco del charco de sangre que comenzaba a extenderse.

—Lo hiciste más que bien, pequeña. Eliminaste a un hombre malo, estoy orgulloso.

—Gracias señor. — respondió tímida con la mirada gacha. Soong-joo se agachó hasta quedar a su altura y acarició su mejilla.

—Dime papá.

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—Jimin... — llamó Dahyun cuando vio a Jimin pasar por el parque.

—Oh, Dahyun... No sabía que estarías aquí —Jimin llegó con la pelinegra y la saludó — Hola Momo.