Obsesivo [KTH] COMPLETA

𝚅𝚎𝚒𝚗𝚝𝚎

Capítulo 20
Bajo su poder

Comienzo a despertar encontrándome en un sótano, sigo un poco mareada por lo cual es difícil incorporarme rápido, como puedo logro quedar sentada tocando mi frente, estoy en un colchón en el suelo, frunzo el ceño y miro alrededor, en efecto, en un sótano, hay unas pequeñas ventanas cerca del techo a una gran altura de mí, está comenzando a anochecer. No tengo mi teléfono y tampoco mi bolso, no tengo nada, noto mi ropa, tengo una de mis pijamas puestas, escucho una puerta volteando hacia allí, TaeHyung baja por las escaleras trayendo comida en una bandeja, él también tiene otra ropa, una más cómoda para estar en casa.

—Que bueno que despertaste, necesitas comer algo.

Me levanto dispuesta a acercarme a la pequeña mesa donde coloca la bandeja y es ahí que noto la cadena en mi tobillo. Estoy encadenada como un perro, dicha cadena se mantiene sujeta a la pared, mi miedo va escalando, estoy secuestrada por Tae. No sé qué pretende hacerme, pero debo mantener la calma.

—¿Por qué tengo esto? —me agacho tocando la cadena.

—No quiero que me dejes, este es tu hogar ahora.

—¿No sería extraño si no vuelvo a casa? —levanto la cabeza para mirarlo. Éste se acerca ofreciéndome su mano, una vez de pie toma mi rostro entre sus manos aumentando mi nerviosismo. Sus ojos me ven como algo valioso, más bien tienen una idolatría que no me gusta—Ya te lo dije, no terminamos la relación, mis padres se preocuparan...

—Ellos no entienden nuestra relación, tú misma dijiste que tu madre me detesta, ¿No?

—¿Y qué le dijiste?

—Que estaríamos ocupados. Hoseok también dijo lo mismo sobre estar sometida por ti—ante eso se detiene. En su rostro no hay rastro de dulzura como hace segundos, luce muy serio—No sé porque creen eso, siempre has sido bueno conmigo.

—¿Así que tu madre cree que soy malo para ti?

—No, sólo digo que tienen una idea errónea de ti—ladeo mi cabeza.

—Pero...deben aceptarlo ya que soy yo quien mantiene una relación contigo, ¿No te parece?

Sonríe deslizando sus manos a mi cuello.

—Te quedarás aquí, DaHee.

—Pero...

Entonces aprieta sus manos allí tomándome desprevenida. Mis ojos se abren por completo observándolo aterrada, sonríe disfrutando con eso apretándome más.

—Tae...—golpeo sus manos intentando respirar.

—No vas a dejarme, eres quien más me entiende y eres la única que ha querido conocer mi historia—dice entre dientes—No te perderé.

Cuando suelta mi cuello comienzo a toser recobrando el oxígeno. Llevo mis manos allí siendo testigo de su cambio de humor, vuelve a su lado dulce acercando la bandeja a la cama, no quiero comer, retrocedo siendo consciente que la comida debe contener algo, todo lo que me ha dado acaba sedándome o drogándome.

No quiero que vuelva a tocarme.

—No tengo hambre.

—Debes comer, todo el día has estado de aquí y allá.

—¿Desde qué momento has estado siguiéndome?

—Desde siempre—toma una cucharada de arroz colocándole algunos vegetales encima. Tae camina hacia mí y sigo retrocediendo—Siempre te he protegido, aunque no me veas, sabía que tu madre quería alejarte porque muchas veces leí sus mensajes en tu teléfono cuando estabas distraída.

—Bueno...desde que me dijiste que están en una relación, siento que apenas puedo hablar contigo.

—No es verdad, estamos hablando ahora.

—Te he dejado varios mensajes preguntando por tu día y nunca respondes.

—Mamá, siempre reviso el teléfono y nunca consigo notificaciones tuyas o de papá.

—¿Crees que te miento?, tengo todos los mensajes que te he enviado.

"Lo siento mucho, mamá"

—No tengo hambre—el miedo que tenía se sustituye por el enojo. TaeHyung me ha tenido bajo su control todo este tiempo y me siento como una estúpida.

—Sé que tienes hambre, no seas terca conmigo, amor. Abre la boca.

No puedo retroceder más, la cadena no me lo permite. Tae toma mi rostro intentando que abra la boca, me rehúso a hacerlo golpeando la mano que sostiene la cuchara, ésta cae al suelo junto al arroz. El golpe llega tan rápido a mi rostro que apenas soy consciente de ello, estoy en el suelo con un fuerte dolor en mi pómulo derecho, el golpe me deja algo aturdida.

TaeHyung recoge la cuchara y la comida del suelo. Se acerca a mí tomándome del cabello obligándome a inclinar la cabeza hacia atrás, no me gusta lo imponente que se ve desde aquí abajo, está lastimándome.

—Abre la boca—ordena con voz grave. Más de lo que ya es.

—No vas a drogarme. Sé lo que hacías en las noches, eras tú quien me drogaba de alguna forma con bebidas, dulces o comida—su mano se tensa en mi cabello. Me quejo de dolor intentando que me suelte.

—Abre la boca o lo haré yo mismo, DaHee.

Mis ojos arden por las lágrimas de la impotencia. Me siento usada, me siento estúpida y me siento vulnerable. Tengo miedo y al mismo tiempo siento enojo, es el enojo que no me hace dar por vencida.

—Cómetelo tú mismo.

Rueda los ojos antes de jalar más mi cabello, mi cabeza queda inclinada hacia atrás por completo, el chico logra hacer que abra la boca introduciendo la cuchara en ella, cuando pienso en escupirla se apresura a cubrirla con su mano advirtiéndome con la mirada.

—Si la escupes será peor para ti—sus ojos oscuros demuestran poder. Sabe que me ha dominado por completo y que no sea sumisa lo mata lentamente—Mastica.

Tener tanto tiempo la comida en la boca sólo me causa ganas de vomitar, mastico de mala gana terminando por tragar lo que me ha dado. Se levanta regresando a la cama tomando otra cucharada, aparto las lágrimas silenciosas sintiéndome humillada. Mi mejilla derecha duele si la toco, se siente caliente, Tae acaba de golpearme por primera vez.

Espero que mis padres me encuentren rápido.

Quiero aclarar que TaeHyung es mi segundo bias y al igual que JungKook me inspira en ciertas historias, la diferencia es que por alguna razón siento que a Tae le queda más el papel de villano (ni idea porque)

PD. Nos acercamos al final.