Una estaca a tu ataúd (DráculaxJohnny)

CAPÍTULO 12

Y tal como había prometido, Jonnathan planeo toda una semana completa para su suegro. No era la gran cosa, pero quería hacerle saber a Mavis que los tres estarían a salvo mientras ella estuviera en su viaje. No sabia por donde empezar, pero sabia que seria divertido. Y aunque algo dentro de él le decía que tal vez no era buena idea. Hizo todo lo posible para ser optimista al respecto.  

 -Juegos de mesa, atrapar la bandera, ir de pesca-. Decía Jonnathan mientras iba a apuntando en su lista. Y claro, para su hijo también habría diversión, aunque no sabía exactamente como le haría para que no quedara lastimado o hiciera demasiado esfuerzo.

 Ahora lo único que faltaba era encontrar al Conde Drácula que no lo había visto desde que Mavis había partido. Lo busco por todas partes, por no decir que se estaba preocupando demasiado por la desaparición de esté mismo.  

Lo que no sabia era que dicho vampiro se estaba escondiendo. Procurando que nunca fuera encontrado por el humano.

 - Drac, ¿qué haces? -, preguntó Wayne a ver a su amigo escondido detrás de una planta, un Bambú para ser exactos.

-Revisando que el bambú este en un buen estado, todo en este hotel tiene que estar impecable-. hablo entrecortado con mucho nerviosismo, mirando a todas las direcciones de que Jonny no estuviera cerca.

-Aja, y se puede saber ¿de quién te escondes? -. Pregunto a darse cuenta como esté se escondía como si su vida dependiera de ello, más sin embargo solo recibió como respuesta una mirada de no entender de que estaba hablando-. Amigo, es demasiado obvio-.

 -No, no es cierto-se negó, aun sabiendo que era demasiado exagerado incluso para él-. ¿Por qué no mejor vas aullarle a la luna o algo así? -.

-Drac, eso no es gracioso-. Hablo en un tono serio y para nada agradable-. Por cierto, Jonnathan te esta buscado y…

No termino de hablar antes de ser interrumpido por una mano es su hocico, tapando cualquier sonido que pudiera salir de el. 

-Shhh...no digas su nombre-, acto seguido, quito su mano de encima dispuesto a seguir con su escondite.

-No creo que eso sirva de mucho-. Dijo su amigo

- ¿Por qué? - Respondió con desdén.

- ¡Drac, al fin te encuentro! -. Dijo Loughran entusiasmado abrazando al Conde, quien no hace mucho había llegado. Y pesé al ruido que hizo, el vampiro ni siquiera se percató que estaba detrás de él.

 -¡¡¡¡AHHHH!!!!-. Grito y dio un brinco del susto.

 -Es lo que trataba de decirte, él estaba detrás de ti-

 -Gracias por la información, “amigo”- Respondió Drac

 Su plan había fracasado, y no suficiente con eso, Jonnathan lo había llevado de la mano, y a casi a rastras, hacia el lago que se encontraba cerca del hotel.

Drácula tenía miedo, estaba haciendo todo lo posible para no acercarse demasiado al joven, y ahora no tenia otro remedio más que obedecer. Ni siquiera sabia a hacia donde iban a ir, pero algo era seguro, tenia que escapar. Pero para su mala suerte, no tenía ningún plan. Sobre todo, porque su nerviosismo de ser agarrado de la mano de Jonny le impendía pensar claramente. No conforme con esto, comenzaba a pensar que tan mala idea era quedarse a solas a lado de él.

 -Vamos Drac, nos vamos a divertir mucho- llevándose a rastras lo más pronto posible, pues el sol ya se estaba ocultando y quería que fuera de noche, pero tampoco que fuera tan tarde.

-Johnny, no creo que sea buena idea-.

- ¡Tonterías, será genial! - No mucho después ambos llegaron al lago, donde les esperaba una pequeña canoa con dos cañas de pescar. El joven fue el primero que se metió en la canoa, y en un gesto amable, estiro su brazo derecho para ayudar al vampiro a meterse. Lo dudo mucho, quería correr lo más pronto posible de aquel lugar, pero al voltearse, tan pronto que miro sus ojos, no pudo evitar sentir mariposas en su estómago. Y en su momento de desliz, acepto la mano de Jonnathan.

Era un momento incomodo, ninguno de los dos quería hablar, tan solo se mantuvieron en silencio por unos minutos que parecían eternos, fue entonces que Loughran decidió romper el silencio.

 - ¿Y cómo haz estado? ¿Todo bien con Erika? – lo observaba desde una cercanía de no más de cinco centímetros.

 -Sí, todo bien…-No tenía que mentir, no quería decirle toda la verdad, pero tampoco le podía mentir, no a él- Ella y yo, nos vamos a divorciar- Finalizo con tristeza, pues a pesar de ya no amarla, aun le dolía tener que separarse de ella.

Jonnathan se quedó perplejo, por un momento creyó que había escuchado mal. Pero estas dudas se dispersaron cuando vio el rostro del Vampiro. El rojizo no podía creerlo, quería saber la razón, más sin embargo decidió no preguntar, sobre todo porque sentía que era un tema que no le incumplía.

-Ya veo-. Pronuncio en seco, haciendo todo lo posible para no sonar alarmado de como le había caído la noticia.

- ¿Y tú cómo has estado? - No esperaba esa pregunta del parte de él, supuso que solo quería cambiar de tema, más en su mirada solo podía notar tristeza y dolor. Dicho esto, tampoco se sintió con la necesidad de mentir, era como si el Vampiro necesitara un poco de sinceridad.

-Mavis y yo, no lo sé…- detuvo sus palabras tratando de buscar las adecuadas para no sonar demasiado directo-. Siento como si me estuviera ocultando algo, no sé qué le sucede, es como si ya no fuera ella misma. Tengo miedo que si algo le pasa…

-No estaré ahí para protegerla- Complemento Drácula, a lo que el joven pronuncio con un “sí”.

-Desde que Dennis enfermo, ella se ha estado apartando de mí y me hace sentir… algo solo- admitió por fin, y no era como si le reclamara a Mavis por preocuparse demasiado, era hijo de ambos después de todo, pero la soledad tampoco era algo que le gustara, sobre todo porque desde el inicio habían sido tan unidos y ahora, no sabría nada sobre ella durante algunas semanas, y aquello le dolía.

-Jonnathan, no estas solo, me tienes a mí-, lentamente, casi por inercia, poso su mano en el hombro del joven, y este por instinto, también volteo a verle. Ambos se quedaron en esa posición por unos segundos, y casi podía jurar que le quería besar. Más eso nunca sucedió, era hora de irse.

-Drac, ¿puedes prometerme algo?

-Sí, lo que sea.

-Cuando Mavis regrese, por favor, prométeme que no te alejaras de mí - Ahora más que nunca necesitaba a alguien a su lado. Alguien que en verdad necesitaba.

Drac por el otro lado no supo como tomar esa promesa ¿acaso era una declaración? No, debía bajarse de las nubes, solo se sentía solo, eso era todo.

-Sí, te lo prometo- pero, aun así, era imposible no sentir algo de emoción por jurarle tal promesa.