The Last of Us: La historia de Sarah y Ellie.

Los suburbios.

Al día siguiente, Sarah finalmente tomó una decisión.

-Escuchen-le dijo a las hermanas-¿Por qué no viajamos juntas hasta Wyoming? Igual tenemos que ir para allá. Nos podemos ayudar mutuamente si quieren.

Morgan pensó la propuesta por unos minutos y finalmente dijo:

-¿Por qué no? Cuanto más seamos, mejor.

-¿Ves? Te lo dije-dijo Ellie satisfecha.

-¿Iremos con ellas?-preguntó Amber.

-Estaremos mejor en un grupo grande Amber, confía en mí.

-Bueno, terminemos de comer y vámonos.

A solas y mientras recogían sus cosas, Ellie le preguntó a Sarah si les iban a decir sobre la inmunidad de la pelirroja.

-No lo creo Ellie-dijo Sarah-. No nos van a acompañar todo el camino. Entre menos sepan, mejor.

-¿Y entonces iremos a Wyoming?

-Eso parece. No nos desviaremos mucho. Además, si no lo hacemos, tal vez no sobrevivan.

-Está bien.

Sarah no olvidaba lo que le había dicho Tess.

Salva a los que puedas.

Eso iba a hacer. Si podía salvar a estas hermanas, lo haría. No dejaría que más personas murieran.

-Muy bien, vámonos.

Condujeron en dirección hacia unos suburbios abandonados no muy lejos de ahí. Mientras viajaban, empezaron a platicar sobre sus vidas.

-Amber y yo estábamos viajando junto a un grupo de personas que querían unirse a los Luciérnagas, como ustedes-explicó Morgan-. Nosotras sólo queríamos que nos ayudaran a llegar a Wyoming. 

-¿Nunca se les ocurrió unirse a los Luciérnagas?-preguntó Ellie.

-Ni loca-dijo Amber con cierto rencor en su voz-. No después de lo que hicieron.

-¿De qué hablas?

Morgan suspiró.

-Cuando Amber nació, mis padres y yo vivíamos en la zona de cuarentena de Filadelfia. Un día, nos atacaron esos desgraciados.

-¿Los Luciérnagas?-preguntó Sarah.

-Arrasaron con todo-dijo Morgan apretando los puños-. Se dicen los salvadores del mundo, pero no son más que unos terroristas. Mataron a muchos de los desgraciados de FEDRA, pero los civiles quedaron atrapados en medio del caos. Mis padres estuvieron entre esos civiles. Los mataron las bombas de los Luciérnagas.

Ellie no decía nada. Nunca había pensado que los Luciérnagas podían ser tan monstruosos como los de FEDRA.

-Siempre creí que eran los buenos-dijo la pelirroja en un murmullo.

-Es normal-dijo Sarah-. Las personas creen en lo que quieren creer. Pero la verdad, no hay bueno ni malo cuando se trata de sobrevivir, sólo hay muertos y sobrevivientes, y tú te ves en la obligación de decidir a cuál quieres pertenecer.

-¿Entonces por qué van a unirse a los Luciérnagas?-preguntó Morgan.

-Hacemos lo necesario para sobrevivir-dijo Sarah para dar por zanjado el tema.

-Ok.

 Llegaron hasta los suburbios. Pero mientras manejaban...

¡BANG!

Un disparo hizo que una de las llantas se ponchara y chocaron contra una casa cercana.

-¡Mierda!

-¡Saca a las niñas!