The Last of Us: La historia de Sarah y Ellie.

El laboratorio de los Luciérnagas.

-Perdón por el golpe-dijo Marlene-. No sabían quienes eran.

-¿Dónde está Ellie?-preguntó Sarah reincorporándose-Tengo que verla. Ella...

-Tranquila, está bien-le aseguró Marlene-. En este momento la están atendiendo y haciéndole unos estudios.

-¿Estudios? ¿Para qué?

-Para determinar la causa de su inmunidad y ver cómo replicarla-Marlene se sentó, mirando fijamente a la rubia-¿Cruzaron todo el país juntas para llegar hasta aquí? ¿Cómo?

-Fue ella-explicó Sarah-. Fue todo gracias a ella. Luchamos juntas contra viento y marea para llegar aquí.

Suspiró.

-Tal vez, así tenía que ser.

Marlene se quedó callada un rato. Luego volvió a hablar.

-He perdido a la mayoría de gente cruzando el país-le dijo-. He perdido prácticamente todo. Y luego apareces y de alguna manera te encontramos a tiempo para salvarla... sí, tal vez así tenía que ser.

Sarah asintió. Por primera vez, ambas mujeres se veían como amigas.

-¿Cuánto tiempo tardarán los estudios?

-Llegaron ayer, ya no deben de tardar.

Justo cuando terminó de decir eso, un soldado de piel morena como Marlene y algo gordo entró al lugar.

-Isaac-Marlene lo saludó-. Ella es Sarah, la que trajo a la niña. Sarah, él es Isaacn, el líder de las Luciérnagas en Utah.

-¿Qué tal? Mucho gusto-dijo Sarah-¿Cuándo nos dejarán ver a Ellie?

-No tienen que seguir preocupándose por ella-dijo Isaac con voz grave-. Nos haremos cargo...

-Se preocupa, Isaac, y yo también-dijo Marlene-Déjanos verla, por favor.

Isaac suspiró.

-No pueden, la están preparando para cirugía.

-¿Cirugía?-preguntó Sarah. Por alguna razón, esa palabra le daba mala espina.

-Los doctores dicen que el cordyceps mutó dentro de ella debido a que como su madre fue infectada antes de parirla, su cerebro entró en contacto con el hongo antes de nacer y desarrolló químicos similares al cordyceps, haciéndole creer que ya está infectada-explicó Isaac-. Si extraemos el hongo, quizás podríamos desarrollar una vacuna mediante ingeniería inversa.

Isaac miró a Marlene, con esperanza.

-Una vacuna, Marlene. Lo logramos. 

Marlene lo miró desconfiada.

-El cordyceps crece en todo el cerebro.

Isaac desvió la mirada un poco.

-Así es.

Ambas mujeres no tardaron en entender lo que eso implicaba.

-Búsquense a otra-dijo Sarah bruscamente mientras tomaba su chaqueta y se la ponía.

-No existe otra. Entiende que...

-¡¿Dónde está?!-preguntó encarando a Isaac-. Llévame con ella.

Isaac no se movió, Sarah lo empujó.

-¡Llévame con ella ahora!

Dos Luciérnagas entraron y tiraron a Sarah al suelo, preparándose para disparar.

-¡Alto, no disparen!-pidió Marlene.

Isaac les hizo señas de que obedecieran a Marlene y luego volteo hacia Sarah.