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días de calma
Un leve jadeo se escucho en el aposento de Stiles, el omega dejo escapar una dulce sonrisa al ver la cara de asombro del pequeño alfa.
―Te sorprendio― por unica respuesta obtuvo un emocionado asentimiento
―Son cada vez mas activos pero parecen estarse quedando sin espacio― el niño mantuvo su mano en el vientre abultado del omega, donde sentia algunas patadas de los bebes, mientras que sus ojos lo veian fiajamente.
Con las largas horas de convivencia durante esos largos ocho meses, al omega lograba comprender al pequeño principe con solo un par de gestos. Comunmente el niño solia llevar consigo un cuaderno y un lapiz de carboncillo para hacerce escuchar ante los aghas y criadas y en ocaciones para dirigirse al omega.
A Stiles le preocupaba que el niño siguiera sin intenciones de hablar ni siquiera con el, habia acudido con la doctora en mas de una ocacion preocupado por la salud del niño e incluso en una ocacion se atrevio a pedrile al sultan que el medico real revisara al niño, pero obtuvo los mismos resultados, Mustafa estaba en perfecto estado.
Decidio dejar las preocupaciones de lado y le sonrio al niño. Ese dia su vientre tenia una forma levemente ovalada por la forma en que sus cachorros se habian movido, Bajti le habia explicado que al estar a finales del embarazo sus bebes se quedaban sin espacio y se movian mucho intentando buscar una posición comoda.
Con practicamente ocho meses ya le era sumamente dificil hacer muchas cosas, le era imposible ver sus pies y oblingo sin la ayuda de un espejo, necesitaba la ayuda de Erika y Dilek para hacer casi todo principalmente bañarse y vestirse. Dilek era quien pasaba mas tiempo con el durante el dia mientras que Erika estaba con el en las tarde-noches y parte la mañana, asi que era la rubia menor quien lo ayudaba a tomar su baño diario a medio día.
El clima caluroso en Estambul solo lograba que se abochornara y sudara mucho haciendo que se sintiera incomodo. Su gusto por las fresas se habia visto remplazado por codorniz.
El sultan habia ordenado que se organizara un desyuno en el jardin privado para celebrar el embarazo de Katerina. Se habian dispuesto varias mesas con comida y postres, las concubinas bailaban y tocaban musica mientras que su majestad y las sultanas permanecian en una tienda viendo todo. Su majestad pidio codorniz especialmente para Katerina pero el olor de la comida hizo que la mujer sintiera asco y no pudo comerla, asi que retiraron el platillo para las concubinas en el harem donde a el se le sirvio una porcion.
Erika y Dilek bromeaban diciendo que para cuando sus beves nacieran no quedaria ni una sola ave en la capital.
―Vamos mi alfita, busquemos a Ibeke― tomando la mano del niño camino con el, pasando por el harem vio a una mujer extraña siendo acompañada por la señorita Dudu, vestia de blanco y llevaba el cabello cubierto.
Ignorando a ambas mujeres siguio su camino al jardin del palacio. Llegando ahi vio a Ibeke y tambien a Katerina a un par de metros de la alfa, desde qe la noticia de que la mujr porfin estaba embarazada se corrio por el harem todos la respetaban aun mas que antes y le obedecian. Junto a ella estaba Gulfen y sus criadas.
―Nihal porfin has llegado, pense que tendria que mandar a buscarte―
―Lo siento, me cansa mucho caminar ahora―
La alfa sonrio llevando su mano al vientre del omega sintiendo las fuertes patadas que daban los bebés ―Son tan fuertes, cada dia se quedan sin espacio―
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𝔖𝔲 𝔪𝔞𝔧𝔢𝔰𝔱𝔞𝔡 ...
FanfictionEl hombre es un ser complejo: hace que los desiertos florezcan y que los ríos mueran.