𝔖𝔲 𝔪𝔞𝔧𝔢𝔰𝔱𝔞𝔡 ...

Ataraxia

Fue raro, no pude llorar, pero mi alma estaba echa pedazos

El sultan estaba en el harem, eran pocas la veces que se permitia celebrar junto a toda su familia, las concubinas bailaban mientras otras tocaban los instrumentos, su madre pedia su cancion favorita y Mehmet estaba en sus brazos sonriendo a su hermano que estaba en brazos de Laura.

Laura su amada hermana estaba embarazada, ella estaba tan feliz con la noticia que le pidio hacer una celebracion. Estaba feliz viendo a todos sus hijos con el y a sus hermanas.

Se sintio explotar de alegria cuando Katerina entro con un vestido hermoso color morado, con una corona y un collar que el mismo habia echo. Ella se veia deslumbrante con sus rizos negros enarcando su fino rostro dandole un aura magica. Dejando a Mehmet en brazos de Cora recibio a Katerina abrazandola y besando su frente, ella se sento junto a el y asi permanecio por el resto de la fiesta. 

De vez en cuando tocaba el vientre de su sultana sintiendo como poco a poco crecia con su hijo dentro de ella. En un punto de la fiesta Katerina inento tomar en brazos a Mehmet pero el niño comenzo a llorar de inmediato, no era la primera vez pero como las otras veces el rostro de Katerina se distorciono con gestos tristez, Derekc sonrio amablemente a su amada y ordeno a una criada se llevara al niño a la habitacion donde Osman y Mahmud estaban viendo un acto de sombras.

No paso mucho tiempo para que Chihanger comenzara a zollosar por lo que tambien lo envio con sus hermanos, al final solo Aybike estaba con el, la niña era sumamente hermosa con su cabello rojizo en pequeños caracoles y ojos verdes en piel blanca, tan parecida a su madre, si bien no pasaba tanto tiempo con la niña como con el resto de sus hijos la queria mucho.

El alfa amaba a sus hermanas, siempre habia soñado con tener una hija pero conforme el tiempo pasaba y ninguno de sus hijos se presentaba como alfa sabia que una hija solo seria una decepcion pero ahora con Mehmet, Aybike era su pequeña sultana adorada. 

Derekc jugaba con su hija en su regazo cuando una criada entro al harem gritando 

― ¡Fuego Sultan! ¡Los principes se estan quemando! ―

. . .

Stiles desperto con el ruido de pasos, pasos corriendo por los pasillos, desperto con el ruido de gritos y el olor a humo. Se levanto escuchando los susurros pero lo que lo alerto fue el olor a humo y el chasquido de la madera ardiendo.

― ¿Que sucede? ―

Su voz era un suspiro a penas pero conforme se iba despertando y el bullicio se hacia mas notable la desesperacion dentro de su pecho tambien. 

― ¡Abran! ¡Díganme que sucede! ― golpeo con los puños la puerta tratando de llamar toda la atencion posible pero nadie contestaba

― ¡Dejenme salir! ― cuando escucho pasos tranquilos, a comparacion del resto del bullicio dejo de gritar y golpear la puerta ― ¿Quien esta ahi? dejame salir― los pasos se detubieron delante de su puerta, otra vez, podia escuchar el ruido de los seguros ser quitados de la puerta

En esa ocacion el omega no espero para salir de la habitacion, no le importo la ausencia de los dos guardias que siempre estaban cuidando la puerta o quien era la persona que estaba a un lado, la persona que habrio, solo le importo llegar a la fuente del ruido y saber que sus hijos estaban bien.

La respiracion se atasco en su pecho, el miedo oprimio en un puño su corazon y sintio como el aire abandonaba su cuerpo cuando escucho a una criada gritar.