La Venganza De Gohan ||04||

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Gohan sigue entrenando en el planeta de Aeos. Para este entonces, han pasado ya nueve meses desde que comenzó con su entrenamiento.

En este periodo de tiempo, el saiyajin a logrado incrementar sus poderes. Gracias a que a estado entrenando sin descanso dentro de aquellas mazmorras y con los consejos que Aeos le a dado, el guerrero a obtenido muy buenos resultados.

Con la puesta del sol en aquel mundo sagrado, se a dado por terminado un día más y el final de una semana. Y como es costumbre, en ese día se llevo a cabo un combate amistoso entre maestra y alumno.

Dado el hecho de que Gohan parece haber roto el limitador de su poder en su estado base, Aeos le a permitido transformarse, con esto él podrá fortalecer el poder del súper saiyajin. Aunque para Aeos, Gohan ya se ha hecho mucho más fuerte pero parece que él todavía no se da cuenta.

Aun así, ni usando el súper saiyajin a su máximo poder Gohan sigue siendo incapaz de vencer a la diosa. La diferencia de poderes entre ellos dos seguía siendo la misma, y aunque esté hecho le provoca mucha frustración al saiyajin por sentir demasiado lejos la meta de superar esos poderes, el guerrero no se daba por vencido, al contrario aumenta su entrenamiento y su espíritu de lucha se va fortaleciendo, bastante motivado porque esta seguro de que todavía puede romper sus límites como el guerrero saiyajin que es.

Esa tarde Gohan terminó en el suelo como siempre, cansado y empapado en sudor, mientras Aeos se mantenía de rodillas a su lado, ella usaba sus poderes para curarle las heridas que le provocó en el combate y también le restauraba las energías perdidas.

Después de eso, ambos volverían al templo.

Mientras Aeos se encargaba de la comida, Gohan tomaba una ducha, limpiando su cuerpo del sudor y relajando todo su cuerpo con el agua fría a la cuál ya estaba acostumbrado.

Luego de salir del baño y con una ropa limpia, el saiyajin se dirigió a la cocina, al entrar vio a la chica que seguía preparando la comida, aunque está vez había algo inusual en ella.

—Aeos...

—¡Oh Gohan, ya estás aquí! Todavía no termino de preparar la comida pero llegas a tiempo, por favor siéntate y espera un poco más ¿si?

—S-Si está bien, pero... ¿Que haces de esa forma?

—¿Ah esto?

Aeos se vio así misma reluciendo su figura mientras estaba transformada en esa forma que la hacia ver una mujer alta y atractiva. Aquella era la forma de Poder del Tiempo Desatado, una transformación única entre los dioses del tiempo.

—Estoy usando mi forma potenciada ¿No te agrada verme así?

—¡No es eso, claro que me gusta como te ves! Es solo que no esperaba verte con esa forma.

—¿Recuerdas que te conté que cuando estoy en esta forma mi cuerpo es muy sensible y aparte no puedo mantenerla por mucho tiempo debido a que consume mucha energía?

—Si, lo recuerdo.

—Pues estoy intentando controlar esta forma, quiero mantener todo mi poder el mayor tiempo posible, así cuando lo logré ya no tendré problemas con el desgaste de poder y me haré más resistente a la sensibilidad.

—Ya entiendo ¡Es como un tipo de entrenamiento!

—¡Así es! ¡Eres muy inteligente, Gohan!

—O-Oh gracias.

La diosa sonrió y siguió en lo suyo. Realmente le gustaba la forma en la que Gohan le sacaba conversaciones y la manera en la que esté reaccionaba a cada uno de sus cumplidos, pues rara vez lo veía sonrojarse, y está era una de esas veces.

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