Me reuní con Laura y Pablo, llevaban esperándome un buen rato.
-¿Lo encontraste?-me preguntó Laura-.
-Sí, y se lo llevó la profe de biología...
-¡¿Cómo?!-dijeron Laura y Pablo casi al unísono-.
No tuve más remedio que contarles todo lo que había sucedido, aún no le había dicho siquiera a Laura que ya tenía novio. Lo sé, soy muy mala amiga. Cuando acabé se quedaron muy sorprendidos.
-Primero, te dije mil veces que me contaras todo sobre vuestra relación, pero bueno te perdono. Segundo, ¿qué se cree esa zorra? Hay decenas de parejas besándose en el instituto cada día delante de todos y nunca les dijeron nada, yo te digo que esa se enfadó por otra cosa y no me tiene muy buena pinta. Si no fuera nuestra profesora y una persona adulta diría que es una escena de celos.
-Estoy totalmente de acuerdo, no es normal que haga eso, y menos que a ti te mande fuera y Kyle tenga que hablar con ella. Siento decirte esto Diana pero esta situación me huele muy mal-dijo Pablo exasperado-.
Lo peor de todo es que tenían razón, hasta yo al principio pensé que estaban juntos. Pero entonces, ¿por qué mentirme? ¿Qué sacaría él de todo esto?
-Pablo-dijo Laura indignada-, no seas así, a lo mejor no es su culpa. No lo sabes, así que no siembres dudas en Diana.
-Yo sólo digo lo que pienso, no quería sonar acusador. No conozco mucho a Kyle y no puedo opinar de él, pero por lo que dices tuvo que haber algo para que se ponga así, y a lo mejor no tiene nada que ver entre ellos dos así que no te preocupes.
-Ya...
Aunque afirmaba, no estaba segura de lo que había pasado. Lo mejor sería hablar con él tranquilamente y listo.
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Después de comer me tumbé un rato en el sofá, no me podía creer que Kyle no me hubiera mandado ningún mensaje. Eso sólo me hacía dudar más, pero, ¿de qué tenía que dudar? Llevabábamos menos de un día saliendo, si ahora ya estaba así no me quería ver en una semana.
Biiip Biiip Biiip
Miré la pantalla del móvil esperanzada, pero no, era Sebastian.
-¿Qué?-dije de mala gana-.
-Yo también me alegro de hablar contigo...
-Lo siento, es que estaba esperando una llamada y, bueno, perdón. Hoy no es mi día.
-Vamos, Diana, nos conocemos¿Qué te ha pasado? Hace tiempo que no hablamos y echo de menos nuestras conversaciones inacabables.
-Sí, yo también. Bueno, ¿recuerdas a Kyle?
Le conté todo lo que me había pasado, realmente yo también echaba de menos hablar con Sebastian. Desde que me lo había contado todo nuestra relación se había vuelto fría, sé que es mi culpa, no debí haber sido tan injusta, ni siquiera era realmente con él con quien estaba más molesta, sino con Ash... Él sólo quería protegerme y ahora lo veía claro.
-A mi también me parece que hay algo que no cuadra, pero no creo que sea nada malo, así que relájate.
-Gracias, la verdad es que me estaba comiendo demasiado la cabeza.
-Esta tarde viene ¿no? Tengo curiosidad por conocerlo, si Leonardo dijo eso de él... no me lo puedo perder.
-Mejor que no le pongas la mano encima-dije riéndome-.
-Ya sabes que para mí sólo existe Rafa, que por cierto, también estamos saliendo. No he tenido oportunidad de decírtelo.
Ahora sí que me sentía increíblemente culpable por no haber hablado antes con él. Debería alegrarme de poder compartir con alguien más mis miedos y problemas y no apartarlo de mi lado.
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Susurros
Ficção Adolescente¿Que pasaría si de un día para otro empezaras a notar cosas extrañas? Tan raras como voces en tu cabeza, desmayos, sentir que alguien te persigue... Esta es la historia de Diana, y como a veces lo sobrenatural puede resultar más real de lo que crees.