Cuando recibes una llamada de Sheng Li, es imposible decir que tu corazón no tiene una pequeña fluctuación. Zuo Chi dudó durante dos segundos si contestar o no, pero finalmente descolgó.
No quería oír la voz de Sheng Li, ni tenía curiosidad por lo que Sheng Li quería decir. Sólo aprovechó los dos segundos para hacer una hipótesis: si fuera una llamada de otra persona, ¿respondería?
Si respondía, también lo haría la llamada de Sheng Li.
Su primer paso para salir del callejón sin salida no era expulsar a Sheng Li de su mundo, sino dejar de hacer especial a Sheng Li.
Zuo Chi hablaba en serio cuando dijo "Eres libre", pero Sheng Li no se lo creyó y dijo enfadado: "¡Como quieras! ¡Puedes jugar todo el tiempo que quieras! ¡A quién le importa!"
¿Cuál era la queja de Sheng Li?
Era por la preocupación ocasional de Sheng Li, que había tenido suerte en el pasado, pensando que incluso los amigos podían convertirse en amantes.
Repasó su itinerario propuesto para el día y preguntó a Sheng Li: "¿Hay algo más?".
Sheng Li colgó el teléfono.
Zuo Chi se rio de su infantilismo, pero, inevitablemente, le dolió un poco el corazón.
Durante el siguiente medio mes, Zuo Chi fue a Italia y Alemania, dando un paseo en barco por Venecia para experimentar el paisaje nocturno, tomando el té de la tarde en un restaurante de lujo en Milán, viendo ópera en Verona y visitando monumentos y el Reichstag en Berlín. Al principio le resultaba un poco incómodo viajar solo, pero una vez que se acostumbró, descubrió que era otra cosa. Podía ir a donde quisiera sin tener que pensar en los sentimientos de los demás, podía quedarse todo el tiempo que quisiera por la belleza, y podía probar toda la comida que quisiera.
Pensó para sí "No me extraña que Sheng Li siempre esté pidiendo a gritos libertad, es una bendición poder divertirse sin preocupaciones".
Durante el viaje, a Zuo Chi se le acercaron muchas personas, pero las rechazó a todas. Cuando alguien vio su anillo de compromiso, expresó su pesar, pero Zuo Chi no dio explicaciones, simplemente se lo quitó en silencio.
Cuando recibió otra llamada de Sheng Li, Zuo Chi acababa de pasar el celo en un hotel de Alemania.
El momento del celo de Omega no está del todo fijado, y es habitual que se adelante o retrase dos o tres días. Sheng Li parecía desconocerlo, como si no hubiera sido él quien colgó el teléfono la última vez, y le preguntó a Zuo Chi: "¿Viene tu celo?".
Zuo Chi respondió con sinceridad: "Ya ha terminado".
"¿Ya terminó? ¡Cómo puede ser!" Sheng Li se sorprendió y luego se retorció un poco y habló: "¿Cómo lo pasaste ......?".
"En el hotel".
Sheng Li: "¡Eso no es lo que quería preguntar!".
Zuo Chi se sentó en la alfombra junto a la ventana del suelo al techo, mirando por la ventana la escena nocturna, sin entender qué tipo de respuesta quería Sheng Li.
Dudó en contestar, y Sheng Li volvió a preguntar con urgencia.
"Esta es mi intimidad". Dijo Zuo Ji.
Sheng Li respiró pesadamente: "¿No habrías encontrado un Alfa en el extranjero?".
Zuo Chi: "¿Y qué si lo hubiera hecho? ¿Y qué si no lo hiciste?"
Sheng Li estaba furioso: "¡Te lo digo, no te involucres con gente al azar de fuera, ni siquiera sabes qué clase de persona es! ¡A lo mejor está enfermo!"
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Brecha [ABO]
RomanceAutor: Frozen lemon red País: China Capítulo: 76 + 2 extras Comparte mundo con: No guArdes unA morAl & Concurso Zuo Chi quiere ser el Omega de Sheng Li Sheng Li y Zuo Chi se conocen desde hace más de veinte años, han jugado juntos y han visto pelícu...