Brecha [ABO]

Capítulo 50: No me preocupo

Tras la mayor parte del año de tratamiento de rehabilitación glandular y la oportuna inyección de inhibidores, el estado de Zuo Chi no era demasiado malo.

Sólo que Qin Xu no dijo nada para dejarle volver solo. Qin Xu preparó una habitación de invitados y dejó que Zuo Chi se quedara en ella, y también puso la llave de la cerradura de la puerta de la habitación de invitados en la mesilla de noche: "Puedes mantener la puerta cerrada todo el tiempo si no estás seguro. No es seguro que vuelvas ahora. Además, Omega necesita que alguien cuide de él durante su celo. En mi casa, aún puedo prepararte gachas de mijo".

Zuo Chi sabía que Qin Xu tenía razón, ahora mismo no tenía fuerzas para conducir, así que, en vez de hacer un viaje, podía quedarse en casa de Qin Xu para pasar el celo.

Pero había tres días enteros de calor, así que no podía no hacer nada.

"Gracias". Zuo Chi dijo sinceramente: "¿Puedo hacer una petición más?".

"¿Hmm?"

Zuo Chi: "¿Puedes ir mañana a mi casa y traerme el ordenador?".

En realidad, antes de hacer esta petición, Zuo Chi estaba un poco indeciso porque su ordenador contenía muchos documentos importantes y secretos comerciales, y apenas podía soportar las consecuencias si se filtraban. Pero pensándolo bien, su ordenador estaba configurado con una complicada contraseña y una capa adicional de bloqueo antirrobo, que cualquiera tardaría mucho tiempo en descifrar, aunque quisiera.

Qin Xu se sintió algo impotente: "Vale, eres realmente un cerebro en funcionamiento".

A la mañana siguiente, Qin Xu recibió un grito de Qin Yanren para que fuera a la familia Qin a hablar de algo. Por la tarde, llevó la llave que le había dado Zuo Chi a la casa de ésta.

Ya había llevado a Zuo Chi a su casa antes, pero eran pocas veces y siempre lo entregaban en la planta baja, por lo que no estaba muy familiarizado con el camino que llevaba a la casa de Zuo Chi. Una vez dentro, envió una llamada de voz a Zuo Chi, encontró su portátil y le preguntó si necesitaba llevar algo más.

Zuo Chi le pidió que le ayudara a traer un pijama y dos mudas de ropa.

"Ah sí, y una poción. Está en el primer cajón de la mesita de noche del dormitorio".

La poción servía para regular los niveles de feromonas y evitar el pseudoestro.

Qin Xu habló con el teléfono entre la oreja y el hombro mientras se dirigía a la salida: "Bien. Cógelo todo".

Abrió la puerta y una figura se abalanzó sobre él. Antes de que Qin Xu pudiera verlo bien, un puño firme aterrizó en su mandíbula.

Los movimientos de Sheng Li fueron fluidos y bruscos, agarrando las manos de Qin Xu por la espalda antes de que su mirada se detuviera en el rostro del otro hombre.

Pensó que la persona de dentro era un ladrón, pero resultó ser su rival amoroso.

¡El rival tenía la llave de la casa de Zuo Chi! ¡Y ni siquiera podía entrar por la puerta de la casa de Zuo Chi! En un instante, la cara de Sheng Li se volvió incomparablemente fea.

Qin Xu dejó caer al suelo el objeto que tenía en la mano, y la pantalla de su móvil quedó hacia arriba, mostrando que estaba en una llamada de voz, y la nota de la persona que llamaba era "Chi".

"Qin Xu, ¿qué está pasando?"

La voz de Zuo Chi estaba sin aliento, pero en los oídos de Sheng Li sonó como un rayo, haciendo que su corazón se rompiera y le doliera tanto que no pudo evitarlo.