Capítulo 23

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Narradora:

A la mañana siguiente, el vocalista se levantó antes que su novia. Le dio un dulce beso en los labios, la tapó nuevamente con las sábanas y se colocó ropa para bajar a la cocina, su cabeza le daba vueltas por el alcohol consumido la noche anterior.

-Ey D, buen día- le saludó el baterista preparando el desayuno al lado de Ace. El peliazul los saludó a ambos.

Minutos más tarde, la guitarrista baja las escaleras hasta la cocina, saludando animada a Ace y a Russ.

-¿Por qué estás tan feliz Noods?- le preguntó el baterista una ves que terminó de servirse un vaso de jugo de naranja.

-Anoche la hice feliz- contestó el cantante comiendo de su cereal para poder tomar una pastilla para su resaca.

-Anoche la hice feliz- contestó el cantante comiendo de su cereal para poder tomar una pastilla para su resaca

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-¡I-IDIOTA!- le gritó muy avergonzada la nipona poniéndose completamente roja. El segundo bajista no pudo evitar dejar salir una carcajada.

-¿Qué? Yo hablaba sobre la cita de hoy- le reclamó hablando serio el peliazul mostrando una sonrisa creída y burlona que solo ella pudo ver, haciendo que la chica se tapara la cara de la vergüenza.

"La cita" retumbó en su mente aquellas palabras en la chica.

-¿Van a salir?- cuestionó el baterista con los platos de desayuno en mano.

-La invité a salir, pero hasta hoy podremos hacerlo. Mañana estaremos muy ocupados con las grabaciones- respondió 2D con un bocado de cereal en la boca y dirigiéndose al comedor.

-Muy bien, solo no vayan a regresar muy tarde o estarán exhaustos para mañana- comentó con una sonrisa Russ mientras todos los demás se sentaban en la mesa.

-¿Por qué hacen tanto ruido?- llegó Murdoc sosteniendo su cabeza por el gran dolor de la resaca.

-Solo ven y desayuna- le contestó su primo y él le hizo caso. Ace le dio un vaso de agua con una pastilla, la misma que tomó 2D.

-¿Entonces saldrás con el Face-ache preciosa?- se dirigió a la guitarrista sentada a un lado suyo. Ella lo fulminó con la mirada por aquel apodo que odiaba que lo llamara, y acepto con la cabeza.

-Aún sigo algo molesta contigo, no te ilusiones- le contestó ella empezado a comer. El primer bajista suspiró débilmente, no sabía que hacer para poder reconsilearse con su pequeña.

Después de que la banda terminara de desayunar, la pareja se alistó para salir, mientras que los demás integrantes se quedaron en casa.

-¿Estas seguro que no te vas a escabullir por ahí otra vez?- le cuestionó Ace a su primo.

-Tuve una resaca horrible y estoy asqueado de alcohol, no tengo ganas de salir.

-Vaya que si es raro- le hizo segunda el baterista pensativo por su respuesta.

Como desconocidos- 2DleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora