Serendipity|• ᵀᴷ

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—¿Has escuchado los rumores?—la voz de su mejor amigo atravesó sus oídos una segunda ocasión, soba su sien y aparta la vista de la computadora demostrando que su atención era únicamente para él.

—¿Qué cosa?, Sabes que me desvivo trabajando, no me entero de nada a mi alrededor

—Mi hermana, Jiwoo vio a Jungkookie, todos dicen que hace un tiempo se enteró que estaba embarazado, mi hermana lo observó comprando prendas para bebé  y biberones, ¿Crees que él?

—Imposible, Jeon no podía tener hijos, eso fue lo que los doctores nos dijeron todas las veces que lo intentamos, incluso médicos extranjeros, todos llegaban a ese veredicto.

—Llamalo y averigua, puede que está sea una oportunidad para los dos... Dudo bastante que ese niño se haya metido con alguien más, todos sabemos que estaban tan enamorados y...

—No, no necesito saber nada, si eso fuera cierto él me lo hubiera comentado—explico el de hebras negras suspirando, paso con desespero las manos por sus ojos e hizo sonar su cuello, el estrés lo consumía.

El pelirrojo asiente dejando sobre su escritorio un bonche de hojas que firmar, Kim agradece en silencio por el rabillo del ojo lo observa marcharse en silencio, sus falanges recorren con agilidad las teclas creando el próximo documento para la siguiente reunión del jueves, parecía que él era el único que trabajaba en el edificio puesto a que laboraba más de lo que los empleados hacían.

Las palabras de su amigo penetraron su cerebro durante la jornada laboral ahora ansiaba conocer la historia tras los rumores, tenía que apartarse del trabajo e investigar.

Aunque no encontraba la manera de hacerlo, después de su divorcio y el desgaste mental para él y su antigua pareja creía que lo mejor sería no irrumpir en la vida de su menor.

Porque si es que era cierto aquello que él estaba en espera de un menor o una princesa debía aguardar el momento en el que la vida los juntara por más que fuera difícil.

Existía la posibilidad que todos hayan mentido o aún peor, que el problema por el que no podían tener un hijo, fuera él mismo Taehyung, él podía ser ese error.

Menea su cabeza para dispersar los malos pensamientos cierra su archivo de Powerpoint y se deja caer sobre el respaldo de su silla, masajea su sien leyendo por encima su bandeja de entrada, mensajes de Jimin.

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Jimin

Hace un rato Jungkook vino pidiendo informes de ti, dijo que necesitaba hablar contigo sobre algo privado, me pidió tu número pero le dije que no tenía idea en donde te encuentras, tenía en sus manos una caja y faltas de ir a buscarte directo a Londres no le faltaban, debes hablarle y escucharlo.

Se ve ansioso y cansado, noté de igual forma que, le cuesta algo de trabajo caminar.

No necesito hablar con él, estoy bien desde que no está en mi vida, así que, si vuelve dile lo mismo, algún día se cansará.

Taehyung, no seas duro con él, dale una oportunidad hablen, se ve que era algo muy personal porque traía un abrigo quería ocultar algo.

Lo que le suceda o no, no es de mi incumbencia, suena mal porque conoces mis sentimientos, solamente nos haremos daño si volvemos a juntarnos.

¡Taehyung, no seas un cabeza dura!, Esta embarazado, ¡Espera un hijo tuyo actúa como un jodido adulto, por dios!.

¿Qué?

¡Lo que leíste imbécil!, ¡Esta embarazado de ti!.

Su vista cae y la boca se le fue de lado, un suspiro resbala de sus labios, pasa sus manos con desespero por su rostro y golpea el escritorio, el bote de lápices tiembla al igual que los demás útiles y objetos de oficina que están sobre la fina madera de mármol, se pone de pie y da vueltas por toda la habitación.

Se postra delante del ventanal que da directo a la ciudad, se recarga un poco pensando que sería lo mejor, aún amaba a Jungkook y por respeto a ese amor era que lo había dejado y desapareció de su vida, nunca se marchó con intención de dejarlo embarazado, eso era lo más extraño de la situación, ¿Qué clase de ruleta era está?, Recordaba perfectamente todas las pruebas fracasadas de aquellos meses, le parecía imposible.

Los autos y personas se ven tan diminutos desde la altura en la que se asoma, su reflejo luce hasta la ventana del edificio de adelante, en su mano descansa el mentón mirando únicamente hacia el horizonte, el sol desciende mezclando las nubes naranjas y rosadas, el azul pintándose de marino lentamente.

Por primera vez en su vida observa un arcoiris llegar antes que la luna, considera la opción de tomar el vuelo e irse rumbo a Seúl, las palabras de su madre resuenan en su mente, aquellas que solía decirle cuando era niño e iban a la iglesia, esas que se encargaron de inculcarle.

Y Dios dijo: «Esta es la señal del pacto que hago con ustedes y con todos los seres vivientes. Mi pacto continuará por todas las generaciones. En las nubes cuelgo mi arco, el arcoiris, que servirá como señal del pacto que yo hago con el mundo. Cuando yo ponga nubes sobre la tierra y el arcoiris aparezca en las nubes, me acordaré del pacto que tengo con ustedes y con todo ser viviente. El agua nunca se volverá a convertir en diluvio para acabar con toda la vida. Cuando el arcoiris esté en las nubes, yo lo veré y me acordaré del pacto eterno que tengo con todo ser viviente de la tierra». Luego Dios le dijo a Noé: «Esa es la señal del pacto que tengo con toda vida en la tierra».

[Génesis 9:12-17]

Sus padres fueron herrados a base de la biblia e iglesia, es por eso que nunca recurría a ellos cuando discutía con Jungkook, es por ello que no los visitaba, porque eran tan cínicos que fueron felices cuando se enteraron que su pequeño Junghyung había muerto, y casi armaron un reventón al ser noticiados acerca de la infertilidad de Jeon.

Nunca lo apoyaron y mucho menos lo acompañaron en su dolor, no se justificaba pues el atenderse con un psicólogo le hizo darse cuenta del daño que provocó en su alma gemela, le dejaron ver qué las cicatrices no llegaban a su corazón, pues todo el daño psicológico de toda su vida lo hundió más que incluso la muerte de su hijo.

Ante sus padres Jungkook era un hijo de Satanás que llegó como la víbora a envenenar a Eva haciéndole comer del fruto prohibido, para el señor Kim y la señora Kim era un milagro del divino el enterarse de su huida de la vida del hijo mayor de los Jeon.

Para ellos seguramente Taehyung iba a lograr razonar y cambiaría su pensamiento formando una familia como dios lo había dictaminado.

Así como dios creo a Adán y Eva.

No entiende como debe interpretar ese versículo y su situación actual, ¿Acaso era una señal?, ¿Él fue quien le concedió la oportunidad de formar una familia de nuevo?.

No tenía respuesta para su pregunta, no contaba con alguien para resolver sus dudas puesto a que sus padres le dirían que está delirando y debe asistir a la iglesia a clamar la misericordia de Dios, Seok Jin su hermano mayor igual aborrecía a Jungkook y Namjoon, él era un joven de quince años, alguien como él que no sé dejo moldear a la antigua forma de sus padres, más liberal y más rebelde que él mismo, sin embargo no quería hablar y llenarlo con sus problemas pues conocía el comportamiento de sus padres y aseguraba Namjoon la pasaba peor que él.

¿Qué debería hacer en este caso?

—No se que hacer— suspira profundamente regresando su vista al débil arcoiris que comienza a desvanecerse y la luna comienza asomarse por fin.