That Way - João Félix

- 6 -

# "i don't even know where to start"

— LIANA FRIESEN.

Ayúdame, diosito.

El dolor de cabeza es horrible.
Pero duele aún más recordar cada parte de la conversación que tuve ayer con João.

Y duele mil veces más el sentimiento de inseguridad, porque siento que no estoy siendo razonable.

Salí de mi habitación cautelosamente tratando de hacer el menor ruido posible.

En el camino, algo me detuvo.
O más bien, alguien.

O más bien, João, alias;dolor de culo.

— ¿Que chucha queres? Tengo dolor de cabeza, y me quiero ir a dormir.

El frunció el ceño, ya me estaba acostumbrando a ese gesto de su parte — Necesitamos hablar de algo. De lo de ayer.

Y aquí es cuando le pido perdón a Dios, por el pecado. Por la mentira.

— No me acuerdo de nada de ayer. De lo último que me acuerdo es cuando Enzo se cayó de la silla donde estaba.

El me miró incrédulo — ¿De verdad?

En sus ojos se reflejaba la decepción y tristeza — Si. Lo siento.

— Está bien. No pasa nada — el sonrió. Pero nunca había visto sonrisas tan falsas como esa. Ni siquiera la de Magui.

Se fue.
No me abrazo. No se despidió.
Solo se fue.

Y la culpa llegó a mi como un castigo.

Me dolía tanto hacerle esto.
Me dolía hacerle esto a el.

A mi mejor amigo.

Las cosas no deberían ser así.
Somos mejores amigos. Listo, no es la gran cosa.

Pero si no es la gran cosa, ¿por que duele tanto?

Tomé un ibuprofeno y volví a la habitación.

El remordimiento me consumía.

Le dije egoísta.
Pero tal vez la egoísta estoy siendo yo al prohibirle tener esta conversación.

Pero es por su propio bien. Y si se lo digo, no lo entenderá.

Es João, es un terco, y un necio.

Se parece a mi.

Me vestí y no me preocupe en maquillarme.
Pedí un taxi y me fui rápidamente a casa de Enzo. Quien sería mi salvación en estos momentos.

Toqué su puerta y abrió luego de unos segundos — Hola, Lia. Adelante.

Parecía confundido, así que empecé a hablar — Me gusta João.

Su expresión fue tan graciosa, pero no podía reírme, no en este momento — Y me odio por eso.

La mirada comprensiva de Enzo me hizo sentir que todo estaría bien por un momento, pero no lo estaba.

Nos sentamos y le conté absolutamente todo, desde la noche donde João terminó con Magui hasta esta mañana.

— Así que ¿no se te olvidó lo que sucedió ayer? - preguntó.

— ¿Cómo podría olvidarlo?, pero no puedo decírselo, Enzo. No puede enterarse, así que espero que no digas nada.

El asintió — Lo prometo.

Asentí y me dirigí a la cocina, pero antes de entrar Enzo me detuvo — No creo que quieras entrar ahí.

Yo fruncí el ceño, el se veía nervioso — ¿Por qué?

— Es que Oli dejó un desastre, y me da pena que lo veas.

Yo asentí, pero sabía que algo andaba mal. Agarré mis cosas y me fui, no sin antes agradecerle a Enzo por escucharme.

No fue de mucha ayuda decirle a Enzo, sin ofender. Como dije antes, estaba agradecida de que me haya escuchado, pero necesito un consejo.

Al llegar a casa, tomé las donas que habían sobrado de el otro día y las comí mientras veía Spider-man Far From Home.

Pero luego llegó el, y juro que nunca había estado tan nerviosa.

— Hola - tomó asiento a mi lado y agarró una dona.

Y aunque parecía que todo estaba bien, sabía que no lo estaba.
Estaba siendo muy seco, el no era así.

— ¿Pasa algo? - pregunté pausando la película.

El negó.

— ¿Donde estabas? - volví a preguntar.

Y el tardo mucho en responder.

— En el parque.

Me pareció raro pero no pregunté nada más.

— Bueno - besó mi cabeza y se levantó —. Me iré a dormir.

Yo lo miré confundida — Son las 4:47 de la tarde, João.

— Tomaré una siesta.

— ¿Que te sucede? ¿Desde cuando me mientes en mi propia cara?

El suspiró — No tendré esta conversación contigo, Lia. Al menos no ahora.

— ¿Es por Magui? - me atreví a preguntar —. ¿Es eso lo que te entristece?

— ¿De que estás hablando? No estoy triste.

— Entonces dame una razón por la cual actúas tan indiferente conmigo.

El volvió a suspirar, pero con cierta molestia — Si, es por Magui.

Y podría haber dicho que eso me rompió el corazón.

Pero se que está mintiendo.

— De acuerdo. Vuelve con ella, como siempre - me levanté pero el me tomó de la cintura.

— Nunca dije que me gustaba.

— De acuerdo, tengo que irme.

Rápidamente huí de la sala y me fui a mi habitación.

Craziest. Day. Ever.

Traducción: João. Es. Un. Dolor de culo.

Pero lo adoro. Y el dolor que siento cuando estoy frente a él es indescriptible.

Por favor, João, olvida todo tipo de tensión entre nosotros, te lo pido.