Un Romance Coreano muy Latino

Capitulo 4

Habia pasado una semana desde que Taeyang y Ricardo se habían conocido y de verdad que en ellos se estaba dando una buena amistad ya que de ahí pues se comenzaron a chatear un poco.

Al principio el tema de conversación era en base de que querían saber un poco mas de la cultura del otro, Taeyang quería aprender un poco mas de la cultura mexicana mientras que Ricardo sentía curiosidad acerca de la cultura coreana, a pesar de que había estudiado acerca de ella en paginas web pues pensó que mejor explicación que la de un nativo de la propia cultura.

Justo una noche, después de hablar sobre la cultura, pues de ahí Ricardo le había sugerido a Taeyang que se volvieran a encontrar por el hecho de que quería pasar el rato con el, así que se pusieron de acuerdo en encontrarse en un café. Y ante unos minutos después Taeyang le deseo que tuviera una bonita noche.

Ricardo estaba recostado en su cama mirando al techo por el hecho de que tenia a ese chico coreano en la cabeza, por la cual ahora era imposible desprenderse de esa imagen de su rostro, que por alguna razón le parecía linda y que daba un toque de ternura a la vez.

Si que eres especial Taeyang—.decía Ricardo antes de arroparse y apagar la luz para después dormir.

Por otro lado, también Taeyang estaba recostado en la cama pero tenia la mirada perdida por el hecho de que estaba sintiendo muchas cosas en el pecho en base a esta nueva amistad con ese chico latino, es decir, el si había escuchado que los latinos eran muy abiertos y sobretodo alegre, pero después de conocerlo pues si se había confirmado lo que había escuchado pero le sorprendió la caballerosidad que mostró cuando comieron juntos por primera vez.

Aunque también se había sentido protegido en aquel momento, también había sentido libertad de poder expresarse tan abiertamente, ni siquiera con su propia familia podía hacer una conversación tan animada y al estar con Ricardo le hacia sentir un respiro de todo lo que pasaba en su rutina diaria.

Al día siguiente Ricardo estaba de camino a sus clases pero había salido de su casa una hora antes, así que se dirigió a una tienda de conveniencia para comprar un pequeño refrigerio y un te helado. Normalmente en ciudad de mexico pues en la universidad siempre llevaba un topper con fruta picada y que también otras veces mínimo se detenía en un puesto de jugos que se hallaba cerca de donde vivía.

Sonia le mandaba mensajes de que ya se encontraba en el edificio, a lo que Ricardo le respondía mientras que tomaba el camión y ademas ponía música de costumbre y esta vez estaba escuchando una canción de Kpop, y se llamaba This is Love, era del grupo Super Junior.

Justo ahora estaba llegando a la parada para después bajar del camión e ir al edificio que solo estaba ahora a diez minutos de distancia.

Ahora mismo Ricardo pudo ver a Sonia que la esperaba en la entrada del edificio como de costumbre empezaron a conversar de algunas cosas pero su amigo hizo una pregunta de la cual lo tomo un poco por sorpresa.

¿Ha pasado algo especial durante estos días?—.le pregunto curiosa.

¿Aparte de que nos vimos antier en el río Han junto con Rosa, Saul y Luis?—.dijo Ricardo.

Bueno si, es que últimamente tienes algo diferente—.dijo Sonia.

¿Diferente en que sentido?—.dijo el.

Te veo mas contento de lo normal y hasta en la clase pasada te vi un poco distraído—.le comentaba ella.

Debe ser tu imaginación—.dijo Ricardo riendo un poco.

Puede que no te conozca demasiado pero siento que algo ha cambiado por el hecho de que tu mirada muestra un brillo un tanto especial—.dijo Sonia.

¡A caray! ¡¿Tanto así me ves?!—.dijo este un poco sorprendido.

Es que te voy a ser honesta, eres muy obvio—.dijo ella.

¿Obvio en que sentido?—.pregunto intrigado.

En el sentido de que tal vez hayas conocido a alguien, porque tienes una mirada un poco soñadora—.dijo Sonia de manera coqueta mientras le daba golpecitos en el brazo con su codo.

No, no he conocido a nadie mas—.dijo Ricardo un poco nervioso.

Tu nerviosismo te delata, por favor dime...te prometo que no diré nada a los chicos—.dijo ella un poco impaciente.

¡Agh! ¡¿Por qué tengo que ser tan obvio?!...esta bien, pero te contare después de clase, ya que dentro unos minutos va empezar—.dijo Ricardo que iba avanzando al salón mientras que era acompañado de su amiga mientas que recibía una palmada en su espalda y soltando una pequeña risa ante leve berrinche que hizo.