CAPÍTULO 7

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Seúl 4 años atrás...

Seungkwan estaba terminando de acomodar los planos en el estante, el asunto de California había terminado bien, si todo salía según lo planeado podían comenzar la construcción en un mes. Seungkwan miró por encima de su hombro, Seungcheol estaba concentrado realizando unos trazos, ¿Quién lo hubiera dicho? ¡Trabajando para Choi Seungcheol! Al principio creyó que era temporal en lo que encontraba otro empleo, pero acaba de cumplir dos años y nada era como pensó que sería.

¿Cuándo el niño idiota se había convertido en un adulto más o menos responsable? En muchas ocasiones llegó a pensar que estaba equivocado, que el Choi Seungcheol de la escuela no era este Choi Seungcheol, ¿su gemelo bueno tal vez?... cuando no tenía esos malos recuerdos del pasado, Seungkwan podía pensar en Seungcheol como otra persona, como en un hombre que...

-¿Por qué se siente esa energía tan negativa? ¿Ocurre algo? - preguntó Seungcheol sin dejar de trazar líneas. Hoy estaba muy apuesto, cada que cerraba un trato importante él utilizaba su mejor traje, él siempre estaba apuesto, pero hoy, con ese traje de raya diplomática, con barba de dos días...-Hoy fue un buen día y tus malas vibras están alterando mi chi- Seungkwan rodó los ojos. Este hombre nunca tomaba nada en serio.

-¿Te hago una pregunta?

-Si te digo que no... ¿Prometes no hacerla?

- Seungkwan no tomó en serio sus palabras, dejo lo que estaba haciendo y se giró a hacia su.... ¿amigo? ¿desde cuándo comenzó a pensar en Seungcheol como un amigo?

-¿Crees que es correcto suprimir tus emociones y no expresarlas a la persona que te gusta solo para no arruinar una amistad que vale la pena conservar? - Seungcheol dejó lo que estaba haciendo y lo miró, se ajustó las gafas considerando su respuesta. Por un instante Seungkwan se tensó, nadie en la oficina sabía sus preferencias sexuales.

-¿Estas enamorado? - preguntó intrigado, parecía realmente interesado

-Contesta a mi pregunta- dijo para evitar contestar -¿Qué opinas al respecto?

-Sería una estupidez- dijo Seungcheol seriamente.

-¿eh?

-Estupidez- repitió Seungcheol dejando su lápiz sobre la mesa, giró en su silla hacia él -Es como si no aceptaras que esa persona es especial para ti, imagina que mañana es el fin del mundo ¿No crees que lo lamentarías?

El corazón de Seungkwan comenzó a latir con fuerza, sentía caliente las orejas, esperaba que no estuviera tan sonrojado. Seungcheol hablaba seriamente, ¿Cuándo se había vuelto tan maduro? Esas palabras eran fuertes proviniendo de un hombre que tenía una amante cada noche. Pero Seungcheol tenía razón... tal vez debería....

-Seungcheol...

-¿Qué...? - No... no debería

-¿Cómo qué? ¿desde cuándo te volviste tan brillante? - Seungcheol rio.

-¿Apenas te das cuenta? - Seungcheol le lanzó una hoja de papel -En mi opinión es mejor arrepentirse por hacer algo, que arrepentirse por no haberlo hecho.

☘️

Seungkwan se frotó los ojos para asegurarse de que estaba viendo correctamente, el olor a quemado inundaba el ambiente, sobre la estufa y toda la encimera se podrían divisar trastes sucios, todo estaba cubierto de harina, huevo, y quién sabe qué otra cosa.

-¿Dónde está la señora Lee?

-Tenía la noche libre- dijo Mingyu, maldiciendo mientras lanzaba al fregadero una sartén humeando.

-¿Qué mierda crees que haces?

<<pregunta estúpida>> se dijo a sí mismo, era más que obvio que este hombre estaba loco.

-Me diste mal la receta para hacer hot cakes- acusó Mingyu. Seungkwan gruñó, se acercó a la barra y frunció la nariz, olía horrible, ¿Qué le había echado ese hombre?

-¿No te fue más sencillo pedírselos a la señora Lee?

-Aprender a cocinar hot cakes está en la lista - explicó Mingyu buscando en el gabinete un nuevo recipiente.

Seungkwan negó con la cabeza, tenía que hacer algo o mañana que la señora Lee entrara aquí le daría un infarto al corazón.

-¿Qué lista? - preguntó dejando el maletín en el banco y quitándose la chaqueta. Se arrancó la corbata y se arremango las mangas de la camisa.

-Mi lista de cosas por hacer- dijo Mingyu encogiéndose de hombros, Seungkwan no le dio mucha importancia a eso, estaba más espantado viendo como Mingyu vaciaba una gran cantidad harina en el cuenco con la cuchara sin importarle tanto las medidas.

-¡Ahhh! deja eso, es mucha harina- dijo Seungkwan rodeando la barra.

-¿Qué estoy haciendo mal?

-¡Todo! - gritó Seungkwan arrebatándole el recipiente. -Tienes que medir las cantidades.

-Tu no me dijiste cantidades exactas, supuse que dependía de la consistencia- acusó Mingyu, Seungkwan entrecerró los ojos.

-¿Eres tonto o qué? - señaló el libro de recetas sobre el gabinete -Se supone que tu deberías seguir la receta, yo ni siquiera recuerdo que te dije sobre lo que preguntaste- Mingyu lo miró con semblante acusador.

-Entonces es tu culpa, no la mía, yo te pregunte buenamente, pero claro, en tu cabeza solo tienes espacio para tu amor no correspondido. Te daré un consejo, si no le dices a Seungcheol lo que sientes, él jamás se dará cuenta- Seungkwan abrió la boca para maldecirlo, pero decidió guardar silencio. Este no era un tema que quisiera tocar, definitivamente era más seguro los panqueques.

-¿Quieres que te enseñe a hacer los panqueques o no?

-Por eso te llamé

-Bien- dijo Seungkwan de mala gana, -Presta atención, porque no pienso volverlo a repetir

Durante la siguiente hora, Seungkwan intentó enseñarle a Mingyu como preparar los hot cakes. "Intento" era la palabra clave, fue misión imposible, no sabía cómo lo lograba, pero en cada ocasión que a Mingyu le toco poner la mezcla en el sartén, o se quemaban, o no se cocinaban bien, o se desparramaban por toda la sartén. Este hombre era un caso perdido, hacer panqueques era la cosa más sencilla del mundo, pero Mingyu parecía que tenía una maldición al respecto.

Durante todo ese tiempo estuvo temiendo que Mingyu sacara de nuevo el tema de Seungcheol. No lo hizo, realmente estaba interesado en cocinar. ¿Por qué seria? Ni siquiera se molestó cuando Seungkwan le mencionó que los hot cakes por lo general eran para el desayuno, no para la cena. Él estaba determinado a que le salieran bien. Seungkwan se preguntó si la razón era porque quisiera impresionar a alguien. Inmediatamente aparto de su mente esa idea. No era su asunto.

-Mañana iremos a cenar- dijo Mingyu guardando una sartén en el estante. Por lo menos el hombre sabía fregar los platos.

-¿Qué cosa? -pregunto confundido.

-Te recogeré al salir de la oficina

-No quiero salir contigo

-Eres muy lento para entender ¿verdad? - dijo Mingyu secando otro plato. Al menos no le había dejado hacer solo la tarea de limpiar.

-¿Qué? - pregunto confundido.

-No te estoy preguntando, no tienes opción-

-¿Qué quieres decir? - lo enfrentó, Mingyu enarco una ceja como diciendo ¿Tu qué crees que quiero decir? Entonces lo comprendió. Seungkwan enfureció -¿Me estas chantajeando? - ¿Ahora tenía que ser el esclavo de este hombre con tal de que no le contara la verdad a Seungcheol?

-Es correcto- Mingyu sonrió. -Desde hoy, sin importar la hora que sea y te llame, deberás de ser cortés conmigo y elogiarme- Seungkwan bufó y rodó los ojos.

-¡No lo puedo creer! - Seungkwan lanzó de mala gana la toalla de manos sobre la encimera. ¡Lo que le faltaba! - ¿Y si decido no hacerlo? - preguntó desafiante, Mingyu se puso serio al instante.

-No deberías retarme- dijo con voz dura. Y Seungkwan supo que hablaba en serio. ¡Joder! ¿en que se estaba metiendo? No podía ceder a esto, era como firmar un trato con el diablo. -Pasaré a recogerte mañana- y con esas últimas palabras Mingyu salió de la cocina.

NO FRIEND - GYUBOODonde viven las historias. Descúbrelo ahora